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Alma;

—¿Ya sabés la respuesta? —le pregunté.

Estábamos haciendo la tarea. Va, yo estaba haciéndola, porque Paulo estaba muy concentrado con su celular.

—¿Qué hacés? —dije molesta.

Me miró con desdén y fruncí el ceño. Yo estaba regalándole mi tiempo cuando podía estudiar para la prueba, ¿y él? Qué falta de respeto.

—Estaba charlando.

—P-parece que podés trabajar solito —escupí fingiendo enojo. No era para nada buena dando autoridad.

Se rió y alzó una ceja.

—Sos igual que la profesora —exclamó—. Por eso nadie te quiere.

Eso fue como un baldazo de agua fría. Yo sabía eso, ¿por qué siempre tenían que recordármelo?

—No me importa; así voy a tener un futuro mejor, un buen trabajo...

—¿Quién te dijo eso? —me interrumpió— Vos podés tener el futuro que quieras, y no por eso tenés que estar acá metida todo el tiempo estudiando.

Miré al suelo. Eso no podía ser cierto. Mi mamá siempre me decía que ella había sido igual que yo, que había pasado por lo mismo. Me comentaba que así iba a triunfar en la vida e iba a tener un puesto muy bueno. Que los que me insultaban no iban a ser más que fracasados en la vida.

Negué con la cabeza.

—Prefiero esto a estar cantando por las plazas.

Frunció el ceño y me miró enojado. La había cagado, como siempre.

—Perdón, no quise...

Pero fue demasiado tarde. Agarró todas sus cosas y se levantó.

—Me tengo que ir —dijo mirando la hora en su celular y se fue.

Corrí hacia abajo para poder despedirlo y poder disculparme de nuevo, pero ya estaba cerrando la puerta. Me quedé parada unos segundos en la escalera.

Entonces, en realidad, así se sentía cuando todos me insultaban. No era nada lindo. Sigo sin entender por qué lo hacen. Aunque cuando estoy en paulolondrahaters me siento tan bien...

—¿Qué pasó? —exclamó mi mamá preocupada sacándome de mis pensamientos.

—N-nada, se le hacía tarde.

—¿No me vas a saludar? —comentó mi papá acercándose a mí pero yo me fui a mi cuarto sin decir nada.

Mi papá siempre me decía cosas iguales o peores que mis compañeros. Eso me daba rabia, y aunque intentara no darle importancia no podía. Todo me afectaba.

A los minutos bajo para preguntarle algo a mi mamá que estaba en la cocina, pero los oigo hablar a los dos y trato de escucharlos atrás de la pared.

—¿Vos decís que son algo? —exclama mi mamá.

—¡No, por favor! —dice esta vez mi papá— ¿Vos crees que un chico así se fijaría en ella?

—No lo sé, puede ser...

—No, no puede ser. Él es muy lindo, ¿la viste a ella?

—No digas esas cosas de tu hija.

Me llevé las manos a la boca y no pude evitar llorar. Me fui corriendo a mi cuarto y cerré con llave, por si me habían oído.

¿Por qué nadie podía quererme?

¿Qué les hice?

///♡///

corta la cosa ahre perdon

los amo mucho gracias como siempre por todo el apoyo 

hater ; Paulo Londra / CANCELADADonde viven las historias. Descúbrelo ahora