Liuterant imita el segundero de un reloj y cruza sus brazos de forma repentina antes de agitar su cabeza de lado a lado
- Se acabo el tiempo peli-verde -sigo encima del escenario, muerdo mis labios ante el estrés de la situación
- ¡¿Y qué diablos quería que hiciera?! -mi paciencia se está agotando, de no ser porque menciono a Moon lo más probable es que lo hubiera dejado por alto o quizás le hubiera quitado la vida hace un rato, no lo conozco, eso está claro, así como a muchas de mis victimas y no es que asesinar sea un hobby mío, para eso me entrenaron, he matado a muchas personas... y a su vez ellos son quienes me han dejado, en este mundo roto por la guerra la humanidad apenas esta despierta, muchos solo son títeres ahogados por necesidad o por el miedo de perder a los suyos, así como yo con Amanda o Angeles, nos aferramos a lo único que amamos y por eso, muchas veces, aquellos que no tienen nada mas, agradecen la muerte... un frasco de color purpura llega al escenario, traído por un asesino y dejado al filo de la deteriorada madera
- Veras, como he dicho, me gusta el teatro, pero en la actualidad carece de pasión y de sentimiento, así que lo que haré es lo mas lógico, quiero que mi obra sea real -puedo notar como su brazo se alza y como chasquea los dedos y de forma inmediata escucho como las armas son cargadas en lo alto del teatro- Noah, solo pido que seas mi sujeto de pruebas, esta obra es fácil: "El joven herido y casi muerto que se enfrenta al ejercito de soldados en soledad", gran título, ¿no?
- Sí consigues mujer, deja que ella ponga los nombres -escucho como hace un pequeño berrinche ante mi respuesta y se sienta en la butaca
- ¡Como sea, lucha o muere, y después, cuando te pese la vida, toma esa basura!
- ¿Para convertirme en uno de tus títeres? No, gracias -el chasqueo de sus dedos suena de nuevo, veo las ráfagas de luz en lo alto del teatro seguido de volver al suelo, mi brazo izquierdo y mis piernas sangran pero no grito, la hemorragia comienza y gimo ante el dolor, observo cómo se acercan hacia mi varias personas, con máscara y con espadas en la mano, uso mi espada para encontrar apoyo y levantarme, comienzo a caminar hacia atrás, estoy rodeado, con las hemorragias me será difícil satisfacer a este sujeto y por sobretodo, sobrevivir, también podría obedecer a mi hermana, aunque no conozca las consecuencias de tomar mi sangre... o también puedo perder el tiempo pensando
- Oh vamos, si que eres lento, esto no es un juego de cartas, esto es arte
- ¡Esto se asesinato! -uno de los asesinos patea el frasco y rueda hasta mis pies
- ¿Y para qué crees que te di eso? -puedo notar como murmura algo a través de su radio, sin embargo mis enemigos están tan cerca que no puedo hacer más allá de dar un par de amagues para alejarlos, no funciona- ¡Me aburro, si esto fuera el cine, ya estaría pidiendo que me devuelvan mi dinero! -el saco me parece ligero, solo me ha dejado la espada- ¡Mátenlo! -no puedo con todos ellos, menos herido, tomo la delantera y me abalanzo hacia ellos, buscando sus cuellos o sus rostros, comienza el sonido del impacto de nuestras armas, me paralizo por un momento, el dolor está empezando a subir, no puedo morir, tengo que protegerla, tengo que protegerla, mi visión comienza a ser borrosa y no percibo cuando es que me empujan de nuevo, no puedo mantener mi equilibrio y caigo contra el telón, observo el pote con el liquido a mi lado
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Ultralita
Teen FictionAmén, que así sea... ¿Cómo comenzar? Cada forma, cada imagen, cada indicio me llevó a ella, a este punto, a esta situación que tan solo empezó sin saberlo. El silencio aumentaba la tensión, el frío gris del cielo, me hacía sentir pequeño, no sabía...