Faltaba una semana para navidad, muchos de nosotros nos iríamos a casa. Me emocionaba ver a mis padres, pero lo cierto es que también tenía un poco de ganas de quedarme. Como todos los años, tendría que asistir al baile de navidad que los Malfoy organizaban. Este era bastante aburrido, la mayoría de las veces consistía en sentarme a ver a los adultos bailar, estar parada junto a mis padres mientras hablaban de cosas que poco me interesaban con otros invitados y si tenía mucha mala suerte, pues bailar con él hijo de alguna otra familia sangre pura que estuviera invitada. Hasta ahora, de todas las veces que había asistido ninguno de ellos había sido memorable, incluso habían sido odiosos. Cada uno más engreído que el otro, idiota, maleducado y desagradable.
Luego de esa tortura, seguía que mis padres me preguntaran que tal me había parecido aquel muchacho con el que había bailado. Nunca paraban de buscarme un prometido, eso apestaba, pero por lo menos, tomaban en consideración que aquel niño me agradara antes del arreglo. Hasta ahora ninguno me había agradado, no en absoluto.
La peor parte de este año, posiblemente, era que Fred me había invitado a su casa en vacaciones, pero sabía que debía declinar su oferta. Los Malfoy no dejarían nunca en paz a mi familia si sabían que iría a la casa de los Weasley. Era un poco de la mierda que debía aguantar. Sabía que la familia que me había tocado era la mejor, podrían haber sido como cualquiera de las otras familias sangre pura.
Hacía rato que Fred chasqueaba sus dedos frente a mi para sacarme de mis pensamientos. Cuando me percate de ello, le lance una mirada confusa, él solo me regalo una sonrisa.
-¿En qué tanto pensabas?
-Navidad...
-¿Has pensado en mí oferta? –me pregunto mirándome esperanzado.
-Sabes que quiero Freddy...
-Pero no puedes...
-Estoy destinada a pasar unas "agradables" vacaciones con los Malfoy.
-Pues sí que siento pena por ti.
-Ja ja, muy gracioso –dije mirándolo cínicamente, no era gracioso burlarse de las desgracias del otro- De todas formas te escribiré.
-Convenceré a mi madre de que te haga un suéter Weasley. Debes tener uno de esos.
-De seguro ha de ser mucho mejor que los que tengo.
-Tenlo por seguro.
Extrañaría esto de Hogwarts, las comidas con mis amigos eran lo mejor, casi tanto como hablar hasta tarde con Eva todas las noches. Lo bueno es que de seguro podría invitarla a ella a venir a mi hogar. Incluso consideraba implorarles a mis padres para invitar a los gemelos aunque sea un día. No había motivo para que los Malfoy lo supieran. ¿No suena estúpido? Le temía más a ese señor que a mis propios padres. No podía creer que así fuera mi vida.
-Oye Fred...
-¿Si, princesa?
-Yo... No es algo confirmado y debo preguntarle a mis padres, pero si me dijeran que sí, ¿considerarían venir a mi hogar aunque sea un día?
-Por supuesto, si a tus padres no les molestan algunas bromitas...
-Eso sería desconsiderado por tu parte, claro que a mis padres no les importara, sobre todo cuando tienen a nuestra pobre elfa domestica que deberá limpiar todo. Piensa en la pobre Eeve.
-Está bien...
Cuando terminamos de desayunar, ambos nos dirigimos en direcciones opuestas. Fred tenía la hora libre y yo debía dirigirme a clase de Pociones. Fue cuando me cruce con Harry, quien se veía bastante animado.
-¿Qué sucede Harry? Te veo de un gran humor.
-Sí, pues me quedare en Hogwarts por navidad, lo que significa que no debo volver con mis odiosos tíos.
-¿Felicitaciones? –dije soltando una pequeña risa.
-¿Y tú?
-Iré a casa, con mis padres. Te invitaría pero la verdad es que encontrarías a los amigos de mis padres muy desagradables.
-No creo que más que Malfoy.
-Pues...
--------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------
Es un poco mas corto que los demás, pero el siguiente es bastante mas largo. En realidad con cada visto del fanfic me pongo mas feliz. Me gustaría saber si les gusta :)
YOU ARE READING
I really don't want to love you (Draco Malfoy y Tú)
Fanfic___ Rowle pertenencia a una familia de sangre pura y, como todos quienes pertenecían a una, debía cumplir con las expectativas de su familia y la sociedad, respetar las tradiciones y siempre mantener la frente en alto. Aunque estas ultimas dos se vu...