Capítulo VII: Descubrimiento.

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Hola a todos!!!

Aquí les traigo el siguiente capítulo, y sí... ya sé que me odiarán... 

Les agradezco mucho sus votos y comentarios, y dedico este capítulo a: J_FLOWERS_, xX-Mena-Xx, LucianaAngelinaOrtiz, The_Shadow_Queen0116, CrisMartinezMoreno, AzunaStone, powerfullforever, florecita-06, constanza024 y tookachell.

Este capítulo también incluye canción: Se llama Sólo para mí de la obra teatral de Los Miserables. Refleja a la perfección los sentimientos de Dipper, escúchenla, les dejo el link en el texto.

Si este capítulo les hace sentir algo, voten y comenten por favor =).

Ya saben, Gravity Falls NO me pertenece.

Capítulo VII: Descubrimiento.

-¡¿Stella Pines?! –Gideon estaba realmente sorprendido. –Eres... ¿Eres hija de Mabel? –Preguntó con cierto temor y su tono fue bajando de a poco. Stella no comprendió.

-No... soy hija de Dipper.

-¿Qué? ¿Dipper Pines tuvo otro hijo? –El albino parecía no entender nada, y Stella menos. -¿Qué edad tienes?

-Nueve...

-Eso quiere decir... ¿Qué eran dos bebés? –Stella trató de descifrar esas palabras. ¿Eso quería decir que no sabían de su existencia?

-No entiendo, explícame. –Gideon la miró ligeramente asustado y puso su mano sobre el hombro de la niña.

-Hace tiempo, Bill supo de que tu papá estaba esperando, pero pensamos que sólo era un bebé, sólo detectamos una magia.

-Pero papá nunca me habló de Tenebris, nos conocimos en el campamento. –Ella comenzó a alterarse y a hablar rápido. -¿Por qué nunca supe de él? ¿Por qué nunca he visto a papá Bill? –Ella tomó las solapas del saco de Gideon. Él miraba hacia abajo con cierta culpa en sus ojos.

-El plan era que Pines tuviese al bebé y cuando éste naciera... -Miró a Stella. –Yo lo robara.

..............................

Tenebris estaba en su cuarto escuchando los regaños de Dipper. Por fin él logró atraparlo y llevarlo a casa... bueno, al menos logró arruinar su cita con la tal Candy.

¿Sentía culpa?

No.

-Y estarás castigada. No irás conmigo al bosque durante una semana. -¿Eso era un castigo? Tenebris quería reírse, su padre Bill era un millón de veces peor, y a los castigos de él sí les tenía miedo.

De igual forma puso cara triste, no quería que las cosas se pusieran peor. Dipper terminó con su monólogo que Tenebris se ahorró de escuchar realmente y salió del cuarto.

Saliendo del cuarto, Dipper tomó una linterna, un cuaderno y salió hacia el bosque. Candy seguro estaría demasiado enojada para hablar con él en ese momento. Lo intentaría en la mañana.

Se adentró un poco en la espesura del bosque, donde se sentó sobre un tronco caído y dejo salir su triste y desolado rostro. A veces necesitaba estar solo, y esa era una ocasión. Siempre se preguntaba por su hijo, si él estaba bien, cómo había crecido... o si seguía vivo o muerto.

En esos momentos también Bill llegaba a su mente. Habían pasado diez años, casi once y el triángulo no daba señales de vida. Aunque le doliese en el alma, tuvo que aceptar que posiblemente ese ser sólo quiso algo de él. Tal vez información, protección... ¿Su cuerpo? No sabía si Bill tenía necesidades sexuales como los humanos.

Pero a pesar de todo eso, le seguía queriendo. Lo quería porque lo conquistó, porque le endulzaba el oído, porque era el padre de sus hijos, a pesar de que no supiese absolutamente nada de uno.

En ocasiones, revivía aquellos momentos que tuvo junto a Bill. Él recordaba sus palabras, sus abrazos, sus besos, su pasión. Sabía perfectamente cuál fue la noche en que concebieron a sus bebés, pues fue la primera y última vez que estuvieron juntos.

El día siguiente de su encuentro, Bill no estaba. Dipper pensó que quizá había desaparecido porque sus tíos rondaban en la cabaña, pero nunca lo volvió a ver.

Al principio no supo interpretar su embarazo, de hecho, fue la única cosa que no pasó por su mente. El primer mes tuvo náuseas y vómitos, llegó a pensar que quizá había comido algo en mal estado, pues su tío con tal de ahorrar compraba ingredientes de segunda.

Luego, vinieron los antojos. Sentía una inexplicable necesidad de comer helado, chocolate y en ocasiones, cosas picantes.

Al tercer mes, se percató de que estaba empezando a subir de peso. Siempre lo tacharon de flaco y enclenque, pero ahora todos le señalaban la prominente panza que empezaba a desarrollar. También se sentía extraño. En las noches ya no quería salir, para evitar ponerse en riesgo, igual que los misterios ya no le llamaban tanto la atención porque significaban peligro.

Finalmente, un día, fue a una farmacia por la crema de hemorroides de Stan cuando vio en la vitrina, una prueba de embarazo. Pasó fugazmente por su mente la posibilidad, principalmente por sus síntomas, pero de inmediato desechó la idea, era imposible. Compró lo de Stan y regresó a la cabaña, pero la prueba seguía rondando su mente.

Finalmente lo decidió, no perdía nada. Compró la prueba y cuando dio positivo, casi se muere. Por una parte estaba feliz, se quedó con una parte de Bill para él, pero por otra, ¿Cómo se lo diría a su familia?

Al final no fue tan malo, sí acertó su pensamiento de que Ford le daría la opción de abortar, pero agradeció que Mabel y Stan lo apoyaran. Amaba a sus hijos, a los dos, aunque no supiese nada de uno, ya que aunque frente a su familia lo fingía por Stella, la verdad es que nunca podría olvidarlo.

Se preguntaba cuál sería la reacción de Bill al saber que ambos tuvieron hijos, y el triángulo no podría negarlos, pues los mellizos se parecían a él, además que también tenían poderes, cosa que Ford trataba de suprimir en su hija, y con tal de que ella viviese como alguien normal y no desapareciese como su hijo, él aceptaba todo eso.

Stella no sabía de la existencia de su hermano porque Dipper no quería que ella se sintiese con miedo, o que sintiera celos porque su padre pensaba demasiado en ese bebé perdido. Con la desaparición del niño, Stella se volvió más preciada para él, porque no soportaría perderla a ella también. La veía como el ser más frágil del mundo, y debía protegerla de todo a toda costa.

Y la otra cuestión, una cosa que Mabel le había preguntado cuando inició su nueva relación: ¿Por qué sale con Candy si nunca podría olvidar a Bill?

Simple: Era muy probable que él ya no existiese para Bill. Quizá sólo fue un acostón y ya, aunque para él fuese muy especial, sobre todo por los mellizos. Tal vez Bill seguía con su vida en un mundo al cual él jamás podría llegar. Le quería, pero el sentimiento era sólo para Dipper mismo.

...........................

Gideon salió del cuarto de Tenebris, donde ahora estaba Stella. Tuvo que dormirla con magia, pues era demasiada información y quería tiempo para él mismo comprender todo.

Según recordaba, Bill le dijo que cuando Pines estaba embarazado, había una corriente de magia, pues existía la probabilidad de que el bebé no tuviese magia y eso no le servía al triángulo, pero esa magia que corría era dorada y poderosa, incluso Gideon lo sintió.

Bill le ordenó robar al bebé cuando naciera, pues necesitaba a su heredero. Y dos días después de que Dipper dio a luz, él aprovechó que el castaño salió del cuarto, no supo a qué por la obscuridad, pero aprovechó y se llevó a Tenebris.

Bill buscó los mejores genes humanos para tener a su hijo. El mejor candidato para su desgracia, era el símbolo del Pino por su potencial e inteligencia.

No se lo dijo a Stella, pero la verdad era que Bill sólo quiso a Dipper como una incubadora.

La aventura de los mellizos. (BillDip)Where stories live. Discover now