Corazón Acorazado (Shingeki no Kyojin FanFic) +18

Volumen 2: Algo inesperado (parte 1)

Diana no sale de su asombro.

—¿Esto es una broma? ¿No?

—No Diana, el libro está vacío

—Mentira —Diana agarra el libro y comprueba que está totalmente vacío— No puede ser, imposible... Yo vi el libro y estoy segura de que es este

—Tal vez hicieron todo a propósito... Era demasiada suerte que tuvieran ese libro al alcance

—¡Maldita sea! —Diana grita con coraje. Arroja con mucha furia el libro contra al suelo. Llora mientras siente un coraje inmenso en su interior— Nuestros compañeros perdieron sus vidas para nada... Tiffa, Karl, Arla y Jeff murieron en vano —Aprieta el puño— Todo por mi culpa, por ser tan débil

—No es tu culpa

—Es la verdad, yo soy la líder. De que vale tanto poder, ser una Ackerman y ser titán cambiante si tan siquiera pude hacer nada por protegerlos... ¡Maldición!

—Cálmate, te estás poniendo muy pálida

Diana se marea y cae sentada. Roy la cubre con una chaqueta. Ella llora.

—Todo fue mi culpa. Nunca debí acercarme tanto a Reiner ni tampoco acercarme al... —Se queda callada—... Tsk, tanto odio que le tenía y terminé enamorada de él... Todos murieron por mi culpa —Llora más fuerte—

—No tienes culpa de la muerte de Tiffa, eso fue un accidente. Karl, Arla y Jeff dieron su vida por Paradis. Ellos creían en ti, en que lograríamos la misión y regresar como héroes. Recuerda que también casi doy mi vida... Desde aquel accidente que tu vida cambió todos creímos que con tu poder ibas a traer la paz que tanto anhelamos. Yo sé que el ejército de Mare tembló al saber que tenían espías, e hicimos más de lo que pensamos. No sólo conseguir un libro, sino hacerles entender que no están seguros como ellos pensaban. Siete demonios de Paradis lograron entrar a su territorio sin ellos darse cuenta y si queremos podemos atacarlos desprevenidos porque conocemos sus puntos vulnerables... Algún día nos vengarnos, te lo prometo

—Roy... —Ella lo mira a los ojos— Reiner siempre nos espió. Todo lo que nos ocurrió fue porqué ellos mismos lo permitieron. Fuimos a engañar y salimos engañados... Sino pude completar una misión, ¿Cómo voy a traer la paz que tanto anhelas?... Yo, yo no soy nadie —Diana se levanta, se quita las correas del equipo tridimensional y las tira al suelo. Cuando va a entrar al camarote del barco ve que hay una mujer y un bebé. Diana se altera, la mujer está asustada, protege a su bebé en los brazos— ¡¿Quién eres?! ¡¿Qué haces aquí?! —Grita Diana—

Al capitán darse cuenta, corre hasta el camarote.

—Capitán, ¿Quién es ella? —Diana pregunta molesta—

—Disculpe por no decirles antes... Ella es mi esposa Clarice y mi hija Sarah

—¿Esposa?... Es una marleyana, ella no es bienvenida en Paradis

—Lo sé, pero no podía dejarla sola y tampoco podía dejarlos a ustedes sin regresar a su hogar... Perdón

—Tus enamoramientos con una marleyana pudieron comprometer toda la misión

—Diana no es para tanto, ¿Acaso no te enamoraste de un Guerrero de Mare?... Ellos ni sabían de la existencia del Capitán y menos lo iban a asociar con nosotros

Diana se gira triste y se cubre el vientre con la chaqueta que le dio Roy. Se va molesta y se sienta en la proa del barco. Roy se acerca.

—No intentes echarle la culpa a alguien de este fracaso... No es del Capitán, no es mía y menos es tuya