Amor Silencioso |COMPLETA|

Existen muchas formas de destruir a una persona

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ALLEN

Las noticias siempre llegan mucho antes de lo que uno pueda imaginar. Muchas veces son adornadas con falacias para mantener a salvo a otros, intentando contener la verdad de quienes son muy sensibles. Otras veces se busca distorsionar la realidad para exagerar las cosas y llamar la atención.

—Dicen que fue encontrada en el baño de mujeres con un par de jeringas a su lado.

—Pobre Jamie. No puedo creer que siendo la capitana del equipo de porristas haya hecho algo como eso.

—A mí me dijeron que la obligaron. Que alguien salió del baño minutos después de que ella entrara.

Muchas hipótesis sobre lo que había pasado con la rubia se escuchaban entre susurros en el aula.

Ese día había asistido al instituto solamente por petición de mi madre, procurando  salir de mi habitación una vez Anthony se hubiera ido de la casa. No quería toparlo por los pasillos, ni siquiera el tener que dirigirle la mirada.

Las palabras de aquel hombre de nombre Nicolae aún resonaban en mi cabeza, necesitaba algo para bajar mi ansiedad, quizá un cigarrillo... Solo uno.

La mayoría de mis compañeros ya estaba en el salón. Algunos en silencio, otros con el semblante preocupado. Pero de fondo, entre los murmullos más perdidos el nombre de Jamie era pronunciado siendo ella el tema principal de esa mañana.

La mayoría sentía hasta cierto punto pena o tristeza por la chica. Cuando las personas se van adquieren títulos inexistentes. Amistades que nunca fueron percibidas. Hipócritas oportunistas.

Aunque era la presión en mi nuca, de una mirada oscura sobre mis movimientos lo que me perturbaba. La sonrisa cínica de Rider a quien no le venía la reciente pérdida de la institución, a quien no le importaba la vida de los demás.

—Buen día.

Entró el profesor Charles, logrando que todo el alumnado guardará silencio. Sólo sus pasos firmes fueron escuchados al fondo. Cada quien veía su llegada a la expectativa, quizá de recibir algunas palabras de consuelo. Nadie dijo nada, solo nos quedamos viendo como acomodaba sus pertenencias y se sentaba al borde de su escritorio con la vista puesta en nosotros.

—Vaya. Esto es más difícil de lo que pensé —pasó la mano por su cabello alborotado y exhaló profundo —. Me imagino que ya han de estar enterados del último acontecimiento en la institución.

Todos guardamos silencio.

—Es algo realmente lamentable. Ningún joven debería de morir a esta edad, pero muchas veces tomamos malas decisiones que nos llevan hasta estas circunstancias. Aunque nunca es demasiado tarde para salir.

Se me formó un nudo en la garganta como una pasta terrosa difícil de pasar. Era por lo que yo estaba atravesando, me había metido en una situación difícil y ahora las amenazas comenzaban a llegar a mí.

—Solo quiero que sepan. Si alguno de ustedes está pasando por una situación similar puede contar conmigo y juntos buscaremos alguna solución.

Muchas chicas comenzaron a llorar de manera desconsolada, algunos chicos estaban realmente consternados, y yo por primera vez estaba hasta cierto punto incómodo con la situación. El miedo de que me inculparan, la carga de conciencia de la muerte de una chica inocente.

Dirigí a mi mirada a mi amigo. Evan tenía una expresión difícil de descifrar, como si él sospechara de mí.

Esa mañana había resultado bastante incómodo sobrevivir a las clases