Llevaba semanas sin consumir la esencia de alguien y sentía que no podía más, intente controlar mis impulsos, esta maldita necesidad que tenia de seguir devorando almas de las personas y justo aparece alguien que aparentaba ser un leñador. Intente resistirme al tal tentación pero mi cuerpo, mi alma, mi poder me suplicaban que devorara toda su alma, que no dejara sobras y por más que luche, al final, fui débil.
Me deje llevar por mis instintos más salvajes, aquellos a lo que intente suprimir inútilmente, y me abalance violentamente contra aquel hombre. Al momento de verme soltó un gran grito y con una de mis esferas lo golpee en el pecho derribándolo y poniéndome encima de el en el acto, puse su rostro sobre el mío, pose mis labios sobre los suyo eh inmediatamente comencé a succionar la esencia vital de este hombre, su alma, y sabia tan bien, recuerdos de que este cazador había vivido no hace mucho invadían mi mente, su familia.... ¡Ahri detente!
¡No!, ¡no quiero convertirme en el monstruo que todos creen que soy! ¡No soy el monstruo que todos creen que soy...!
Con cada segundo en el que yo devoraba su alma sentía como la fuerza y la magia recorrían mis venas, sentía como volvía a ser la misma de antes, pero con cada recuerdo de su hija... de su esposa, de su familia yo titubeaba más... dudaba más pero cada vez que me daba el lujo de sentir culpa, sentía como la fuerza que recobraba me abandonaba, así que me veía forzada a cerrar mis ojos, devorar todo lo que pueda y suplicar tomar solo lo necesario para no matar a este hombre... todo mientras lagrimas cubrían mis mejillas.
No sabría decir si por milagro o por desgracia una inesperada visita llego justamente a detenerme, o por lo menos eso creía, no lo vi pero escuche sus pasos y justo cuando presentía que me iba a atacar junte algo de la magia que logre recolectar y me moví lo más rápido que pude de esa posición.
Cuando me aleje lo que yo creí lo suficiente de aquella escena lo pude ver claramente.
Era lo que parecía ser un Shimon, nunca había visto a uno personalmente pero sí que los vi de reojo en las memorias de personas a las que les consumía sus recuerdos en forma de pesadillas fugases o cómo demonios monos embaucadores, pero yo sabía lo que son en realidad... son como yo.... Son vastayanos...
Sabía lo que era pero como decía, nunca había visto uno en persona, así que quede anonadada ante la presencia de aquella criatura mágica en la cual podía ver un aura mágica menos poderosa que la mía pero algo me decía que debía de tener cuidado con él.
Tras echarle un pequeño vistazo a aquel cazador comenzó a buscar por todos lados hasta que alzo sus ojos justo donde yo me encontraba y nuestras miradas se cruzaron y no sé por qué lo hice pero por un momento llegue a pensar que... tal vez no estaba sola e este mundo... quizá... solo quizá habría alguien como yo, alguien que me entendiera y que no me viera como un monstruo.
Aun que naturalmente ese grano de optimismo que tenía desapareció cuando lo vi sonreír maliciosamente, lo cual demostraba sus intenciones hostiles que tenía hacia a mí.
No lo pensé mucho antes de salir huyendo de ese lugar pero al poco rato me percaté de que era inútil pues él me estaba persiguiendo a una velocidad que era de esperar de alguien de su especie, y debido a que el interrumpió mi alimentación no tenía la energía sufriente para encararlo, intentaba huir con mis ráfagas o lanzándole todo lo que podía pero era inútil, después de todo el igual que yo era una criatura mágica y no tenía la energía para averiguar todos sus trucos...
¿Pero por qué me estaba persiguiendo? ¿No se supone que somos de la misma especie? ¿Por qué querría lastimarme? ¿Acaso su raza no necesita devorar almas? De ser así... que envidia...
Aunque ahora que lo pienso... una vez, al devorar la esencia de un viejo granjero me di cuenta de la presencia de dos peculiares seres que se dedicaban a ayudar a gente que se encontraba en graves problemas como el... si no mal recuerdo uno de ellos tenía una especie de armadura blanca con una máscara o algo así que hacía que pareciera que tuviera 7 ojos... y el otro de ellos era exactamente igual que mi perseguidor, ahora todo está claro... ¿así deben de ser las cosas no? El bueno siempre debe de detener al malo... el héroe debe de derrotar al villano...
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¿Que hare sin ti? Ahri x Wukong
RomanceDos vastayanos con un modo de vida muy diferente bastante mas diferente del que su especie esta acostumbrada, ellos son totalmente distintos pero a la vez comparten tantas cosas en comun, tanto que aprender el uno del otro