No parecía el tipo de cosas que un hombre como él haría.
Hasta ese día su vida parecía de lo más normal. Ese día en que todo ocurrió.
Habrá sido su innegable carisma, su tierna e inocente sonrisa que lo cautivo apenas cruzó por la puerta. No lo sa...
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Miro mi reloj, suspirando de alivio al ver que por fin son las cuatro de la tarde y por fin mi turno ha terminado. Enciendo la patrulla, soltando un ligero bostezo ni bien me pongo en marcha.
Pues anoche no he dormido mucho que digamos la noche anterior, pues tal cual dijo Shane, tuve "trabajo" que hacer con respecto a Lori, dado que si, estaba sumamente molesta, y no la culpo en lo absoluto.
Conduzco entre las calles sin prisa, pues no hay nada que tenga que hacer hoy. Freno al ver la señal de ALTO, justo en el momento en que mi móvil suena. Lo tomo aprovechando que estoy detenido, mirando el nombre de mi hijo en la pantalla.
- ¿Hola? - le cuestiono.
- Papá, hola - saluda Carl - ¿Estas ocupado?
- Me dirigía hacia casa - le respondo - ¿Pasa algo?
- De hecho si, quería pedirte un favor - dice mi hijo - Charlotte ha ido de compras al mall, y yo he traído a mamá al súper - explica - No pense que iria a tardar mucho y estoy algo lejos ¿Te importaría ir por ella?
- Seguro - le respondo -Enviame la dirección.
- Gracias, papá.
Corto la llamada, dejando el móvil de lado. Pongo en marcha el auto una vez más y ni bien pasan unos pocos segundos, el móvil vuelve a sonar y lo tomo simplemente para ver dónde queda aquel lugar. Cambio de ruta, lo cual no es molestia pues no está tan lejos de donde estoy.
Luego de varios minutos conduciendo, logró llegar al mall donde ella está, ingresando al estacionamiento de este yendo hacia una de las puertas. Logro identificarla casi al instante. Charlotte está hablando por el movil, y no se ve muy feliz que digamos. Sujeta dos o tres bolsas de una mano, agitándolas con brusquedad mientras le grita a quien sea que esté del otro lado de la línea.
Estaciono la patrulla justo frente a ella, justo en el momento en que ella nota que se trata de mi y decide decir un simple "adiós" y colgar de manera brusca.
- Gracias por venir - dice ella, mientras me acerco a la puerta del copiloto para que ella pueda subir.
- No es nada - le respondo de vuelta.
Ella se sube al auto, dejando las bolsas en la aprte de abajo y es ahí cuando noto que lleva un short demasiado corto, dejando a la vista sus largas piernas. Carraspeó incómodo, antes de volver a ponerme en marcha para ir a casa. Ella analiza la patrulla con curiosidad, antes de mirarme.
- Es la primera vez que subo a una patrulla - dice ella - En la parte de adelante.
Suelto una ligera risa, mirándola unos pocos segundos antes de mirar al frente otra vez.
