Mi Waffle.🔞

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¿Hombre celoso + sexo? Leen bajo su responsabilidad 🕶/'🚫
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Mía.

Mía.

Mía.

Era la única palabra que podía rondar en su cabeza mientras la veía desde lejos, platicando muy amablemente con personas que ni conocía.

Toda su vida pensó que los celos eran ridículos e innecesarios, se burlaba cada que Sarada lo celaba. Siempre le decía que no se preocupara, sólo la ama a ella y jamás la cambiaría, pero si Sarada le dijera eso no estaría seguro si le decía la verdad.

La inseguridad estaba ahí, pinchando junto a la ira y mal humor. Sarada había estado ocupada más de lo común, muchísimo más y eso le enfadaba.

Había comprendido el trabajo y esfuerzo de ser Hokage, comprendía que ella lo disfrutaba y era su sueño. Era feliz con verla unos minutos, pero ahora, ni siquiera tenía esos minutos.

Además de que, aunque sus amigos dijeran que estaba exagerando, sentía a Sarada distante.

¿O era normal que después del segundo año de matrimonio se perdiera la magia? No, él aún sentía muchísimas cosas con sólo mirarla o escuchar su voz. Le preocupaba bastante que ella lo dejase de amar. ¿Qué sería de él? No podría soportarlo, la amaba tanto que podría amarla incluso en otra vida con la misma intensidad.

Se dijo mil veces que estaba exagerando. Sarada tenía un buen corazón, le demostró de una manera tan sencilla y hermosa su amor que podría jurar que nunca se acabaría, pero tenía miedo e inseguridad.

Odiaba admitirlo, pero estaba celoso.

¡Celoso hasta el demonio! Se sentía una bestia enjaulada casa vez que se atrasa más de lo debido. Pero no podía, había estado ocultando toda esa energía explosiva porque se negaba a mostrarse celoso ante ella, se había burlado tantas veces de lo celosa que podía ser que ahora se arrepentía.

Cada vez era más difícil ocultarlos.

Tenía ganas de patear culos cuando la saludaban de beso en la mejilla, ¡Lo peor en su presencia!

--- ¿Por qué mierda tienen que besar a mi Waffle?

Se pasó los dedos por el cabello frustrado. Sólo él podía besarla.
Era su esposo, Sólo él tenía ese privilegio, y uno que otro familiar, claro.

Ya no podía tolerarlo más.

¿Acaso Sarada lo hacia a propósito? No, ella tampoco era de esa manera. Pero ya no lo soportaba.

Al principio se enfada muchísimo, nunca creyó enfadarse a sí con ella, y no podían discutir porque ella no llegaba a la casa como antes, razón por la que se enfadada. Después de matar medio mundo en su cabeza se sentía sólo en esa casa en la que ansiaba llegar para pasar tiempo con ella, pero ahora, el tiempo se reducía y le dolía.

Papeleo, misiones... ¡Mentira! Sus ojos veían otra cosa, eran los celos que lo orillaban a imaginar cosas, pero es que ya no podía ocultarlos más.

El orgullo valía un coco en ese momento. Extrañaba a su esposa que estaba con quién sabe quién.

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Boruto parpadeó tras caer en cuenta de que se había quedado dormido. Al instante, sintió el terrible dolor en su cuello, recordándole que había dicho que jamás volvería a dormir en el sofá, sin embargo lo hizo. Se sobó los músculos tensos y al momento se congeló.

Sarada aunque estuviese totalmente enojada lo obligaría a subir a dormir a la habitación. Él seguía en el incómodo sofá, entonces... Ella no llegó.

➳ONE-SHOTS BORUSARADonde viven las historias. Descúbrelo ahora