10..

51 15 2
                                    

(Narrado por el abuelo)

La vida puede ser muy injusta, y de la injusticia hay que saber sacar la justicia...

Después de escuchar el representante del vecindario llamarme al escenario, me levanto para iniciar mi discurso.

Hola.. Creo que ya muchos me conoceis .... bueno quien quiera opinar sobre mi vida que levante la mano.

Algunos se miraron entre ellos extrañados, hasta que por fin un hombre entre el público levanto mano.

Bien, pues con esa misma mano, tapate la boca.

Se escucharon risas desde el público mientras el hombre avergonzado y molesto bajo la mano.

Me lanzó una mirada tipo: Te vas a cagar viejito.

Mientras yo le lanzó una mirada tipo: Si hablamos de cagadas tu ya tienes la diarrea. 

Yo me considero una persona feliz, no por tener la vida perfecta, sino por saber como vivirla. Soy feliz como soy y no voy a cambiar y quien no me acepté, por allí está la puerta. No soy perfecto, pero nadie lo es, cada quien es único y tiene su historia, su propio cuento.

El sentido de la vida es vivirla, pero siendo uno mismo.

!¡Seamos locos, raros y absurdos, pero libres siendo nosotros mismos porque aburridos, amargados y oprimidos existen demasiados!¡

El entero público del vecindario explota entre aplausos y risas.

El rostro del representante es un poema al ver el circo que acabo de montar.

Me coje de la muñeca izquierda para bajarme del escenario y comunicarme al oído discretamente, que se suponía que yo simplemente tendría que haberme disculpado por molestar la tranquilidad del vecindario con mis huelgas.

《Si mi luz te hace estar mal, es la confirmación de que pronto morirás porque nunca dejaré de brillar, baby.》

Abuelo.

Lo que el viejo verde me confesó...Donde viven las historias. Descúbrelo ahora