Todos juntos?! ( Zodiaco Gay )

CUATRO

Narradora

Los doce chicos ya estaban en el estacionamiento todos juntos.
- Bien, entonces nos dividiremos en las parejas que había mencionado antes. Y nos veremos aquí mismo dentro de 3 horas. Es el tiempo máximo que nos han dado para salir. ¿De acuerdo? - Todos asintieron a la pregunta de Capricornio. Entonces todos tomaron sus camino con su compañero.

♓️ Piscis Leef ♓️

Caminaba con Cáncer por todos lados, yo estaba impresionado y cada juego que veía hacían que mi adrenalina subiera. Entonces pare en seco con la boca abierta, vi el juego al que definitivamente me subiría.
- Que pasa Piscis? - Preguntó Cancer. Yo solo lo mire con una sonrisa.
- No te escapas de esta, nos subiremos ahí. - Señalé una montaña rusa, la más feroz de todo el parque de diversiones. Era prácticamente una réplica del Zombie Ride, solo un un poco más insegura. Eso era increíble.
- Tú, pequeño Piscis, estas demente si crees que me subiré a eso. - Dijo Cancer riendo nerviosamente.
- A que le tienes miedo Cans? - Pregunté burlescamente.
- Ya veras. Nos subiremos. - Cancer tomó mi mano, haciendo que me sonrojara y me jaló a la fila del juego, siempre obtengo lo que quiero. Parecía que Cancer se ponía cada vez más nervioso según íbamos avanzando, lo sabia por qué en todo este rato nuestras manos no se habían separado, y podía sentir como sus manos sudaban, para muchos algo asqueroso, para mí algo tierno, puesto que se hace el duro, pero yo sé que tiene miedo de esa monstruosidad de juego mecánico. Finalmente había llegado nuestro turno.

♋️ Cancer Stone ♋️

Solo quedaba una persona frente a nosotros para subirnos a la montaña rusa. Entonces llegó nuestro turno. Sentí como unas inmensas mariposas se paseaban por mi estómago, nos subimos al carrito el cual era de tres, Piscis estaba sentado en el medio, a un lado me tenía a mí y del otro había un chico con cabellos negros y ojos de color azul. Justo cuando el señor colocó el cinturón de seguridad fue cuando me digne a hablar.
- Puedo salir? Necesito ir al baño. - Dije muy nervioso.
- No te va a pasar nada Cans, vas a ver cómo te va a gustar. - Me dijo Piscis con una sonrisa. El juego comenzó a avanzar y yo estaba cada vez más tenso. Lo que me aterraba de las montañas rusas era la velocidad, la altura y las vueltas de cabeza. Siempre fueron las más aterradoras. El carrito iba de subida para después descender con ferocidad, esta vez ya no tenía miedo, sino que sentir el viento en mi cara me tranquilizo, voltee a ver a Piscis quien reía y levantaba los brazos feliz, mientras que gritaba. Ahora se avecinaba lo que me aterraba... la vuelta, lo peor es que eran tres vueltas seguidas. Así que me prepare, y... No estuvo mal! De hecho me gusto, la adrenalina que sube por tu cuerpo al probar estos juegos es impresionante. Seguía la segunda vuelta. En eso la montaña rusa paró. Justo cuando estábamos de cabeza.
- Cancer? - Me llamó Piscis con voz temblorosa. Estaba asustado.
- No pasa nada Piscis, verás cómo nos sacan de aquí. - Le dije a Piscis tratando de convencerme a mí mismo primero.
- Si tienes miedo puedes tomar mi mano. - Dijo coqueto el chico que se encontraba del otro lado de Piscis.
- Gracias, pero no creo que sea necesario. - Dijo Piscis.
- Insisto. - Dijo de nuevo el chico con una sonrisa. Cosa que me hizo hervir la sangre, así que sin previo aviso tome la mano de Piscis y la acerque a mis labios para depositar un pequeño beso en el dorso de ésta. Piscis tomó un leve sonrojo y me miro incrédulo.
- Dile a este chico que vienes bien acompañado, cariño - Dije guiñando un ojo, dándole a entender que me siguiera la corriente, y así lo hizo.
- Lo lamento, pero a mi novio no le gusta que hable con desconocidos que seguramente le insinúa el sexo a cualquiera con el que se topa. - Dijo Piscis de manera cortante al chico. Me le quedé viendo con sorpresa.
- Bueno si son novios, quiero que se besen, ahora. - Dijo el chico frunciendo el ceño.
Piscis me miró y yo a él. Esto iba a ser incómodo... Yo no lo haría si él no quería, no lo obligaría a hacer algo que no quisiera, sin embargo Piscis tomó mi rostro entre sus manos y me acerco al suyo para juntar nuestros labios. Ese fue el mejor beso que haya dado en mi vida. Fue un beso corto en realidad, nada tan largo, cuando nos separamos Piscis me miro con una chispa en sus ojos y un leve sonrojo en sus mejillas.
- De acuerdo, dejaré de molestar. Pero necesito que me saquen de aquí. - Comentó el chico de cabellos obscuros. Recién recordaba que estábamos de cabeza en una montaña rusa. Pasados 3 minutos la montaña rusa comenzó a avanzar y la ultima vuelta paso de lo más normal. Entonces Piscis y yo nos bajamos con una sonrisa.
- Otra vez! - Gritamos los dos al mismo tiempo para volver a formarnos.