Todo del revés // Martalia💗

VIII

Natalia

Marta se había lanzado y me había dado un beso, y esto no podía ser así, yo no podía dejarme hacer esto.

No ahora.

Mi objetivo no era el mismo que el suyo, no lo era.

No lo es.

Me separo y la miro, esta sorprendida por mi rechazo.

- Buenas noches -entro en la habitación y cierro, no sin antes volver a mirarla.

Esta perpleja, y en sus ojos se puede ver dolor. Mucho.

Me cuesta, me cuesta cerrar y dejarla ahí con su rostro apagado apunto de llorar, pero lo hago.

Cierro.

Marta

Si, he estado llorando todo el finde semana. Alba me había preguntado, pero no le di ninguna respuesta, por que por alguna razón intuía que lo sabía.

Lloro porque me siento humillada, usada. Pero se que no es la única razón. Estoy asustada.

Ni siquiera se porque lo estoy.

Me levanto de la cama, es lunes y son las 12 de la mañana, no me apetecia ir a clase, no quería verla.

Me he prometido no decir su nombre, no quiero decir su nombre.

Me visto, dispuesta a salir para comer con todos. Mejor dicho, me preparo para ver a "N".
Vale es un estúpido apodo sin personalidad, pero no se me ocurría nada más mientras lloraba. Esto acaba de sonar muy sad.

Tocan la puerta.

Ha Alba se le han olvidado las llaves, seguro.

Miro por la mirilla.

No es Alba.

Es "N"

Y yo no voy abrir.

Ella llama otra vez, y vuelvo hacer caso nulo, estoy ahí de pie, sin hacer ruido, para que la estúpida que está detrás de la puerta piense que no hay nadie.

-Joder -dice desde el otro lado.

Escucho un ruido y intullo que se ha sentado. Sin hacer ruido hago lo mismo.

Me la imagino con su abrigo azul, y su camiseta a rallas, y simplemente me sale una sonrisa.

- Mierda Marta, donde estás. -se queja- ni siquiera me diste el puto teléfono para que te llamara.

Da un golpe al suelo y a continuación se escucha el mismo sonido que cuando empiezas a grabar un audio en instagram.

- Yo solo quería pedirte perdón Marta. Soy estúpida como tú dijiste, y maleducada, incluso fría. Por favor escríbeme.

Ha eliminado el audio, porque no me ha llegado ninguna notificación.

Sonaba arrepentida, muy arrepentida.

Abro, y como ya intuía esta sentada en el suelo.

Ella levanta la cabeza cuando me ve.

- Oh Marta lo has escuchado...

- Si -no se que más decir-

-Eh bueno, no he mentido. -lo sabia, su voz sonaba de verdad arrepentido.

- ¿Por qué no estás en clase? -suelto.

- Estaba preocupada -me rio- ¿de que te ríes?

Me sigo riendo.

- Venga illo, no estabas preocupada por mi -intento decir todavía en carcajadas.

Ella no hace caso a mis palabras.

- Esta tarde paso a por ti.

Mi confusión se refleja en mi rostro seguro.

- Tengo cosas que hacer -pero me muero por estar una tarde contigo- no puedo ir contigo.

- A las 8

Algo en mi casi grita y salta en sus brazos pero no.

- Que no pued...

-Adiós -me interrumpe y se pierde por el pasillo.

Se me dibuja una sonrisa, así sola.

Ayer me humilló, y hoy con tan solo pedirme perdón la perdono, le vuelvo a dar mi mano, para que posiblemente me la suelte de nuevo.

Y casi sin darme cuenta estoy llorando, pero esta vez se la razón, y me duele incluso más que antes.

Se por que estoy asustada.

Me asusta Natalia.

Me asusta sentir algo por ella.

Me asusta que ya siento cosas por ella.