HUÉRFANAS| BTS & Lectoras [EDITADO]

🌹Capitulo 7: Culpa

Ya eran las cuatro de la madrugada. Los únicos despiertos eran Eunji, Jin, JungKook y Hoseok. La azabache caminaba en círculos, casi desesperada. El oficial paso con dos mujeres que corrieron a la celda de los chicos.

— ¡Ay! Mi vida —dijo la mujer. Acercándose a la celda.

— Mamá. Estoy bien —rodó los ojos Hoseok.

— Mi bebé, ¿estas bien?

— Mamá —dijo entre dientes JungKook—. Aquí no —dio una mirada rápida. Las chicas ya habían despertado y miraban la escena.

Todos despertaron y se pusieron de pie. La señorita Sook, llegó corriendo. Las chicas se le acercaron. Hyo Bin, Hye Mi, Yunho y Do Yeon, empezaron a llorar. Todas hablaban al mismo tiempo, explicando lo que había sucedido con sus versiones.

— Tranquilas. Les creo. Déjenmelo a mí. Saldarán de aquí. Se los prometo —hablo con una voz dulce.

— Todo es mi culpa señorita Sook —se sorbió la nariz Hyo Bin. Intentado no llorar, pero rompió en llanto.

— ¡No! —gritó Eunji— Es mi culpa. Yo salí —miro rápido a los chicos. Por un segundo miro a Namjoon. Él estaba sorprendido de lo que estaba diciendo. Volvió a mirar a la señorita Sook—. Yo fui a beber con ellos. Me persuadieron y accedí. Las chicas salieron a buscarme pero no quise y peleamos. Todo es mi culpa —bajo la cabeza. Suspiro y levantó la vista—. Estoy lista para asumir las consecuencias.

— Eunji... —dijeron tenue las chicas y miraron a su hermana. Se había echado toda la culpa.

— Señorita Sook, la verdad... — Hwan In, no pudo terminar. Fue interrumpida rápidamente por Eunji.

— ¡Yo fui! —gritó— Todo es mi culpa. Chicas no intenten echarse la culpa por mí.

— Eunji, cariño.....no estoy enojada. Te prometo que te quitarán la denuncia —dijo la señorita Sook. Limpiando sus lágrimas.

— ¡Eso ni hablar! ¿Sabe cuanto hemos invertido en su orfanato? Para que estas.... niñas.... se la pasen en prisión. Por no tener padres no tienen buena moral. Son unas cualquiera —bufo la madre de Hoseok.

Eunji se había molestado. Empezó a gritar en chino y no le importo. Debía desahogarse de una o otra manera. Estaba cansada que la gente pensara mal de ella y de sus amigas por el echo de ser huérfanas. Las chicas intentaron calmarla, pero no paraba. No le entendían nada, solo gritaba. Hwan In, le jalo fuerte el brazo para que saliera de ese enojo.

— Óigame bien —intervino la señorita Sook—. Estas niñas tienen más moral que cualquiera de nosotros aquí. Tienen razón hacen cosas, solo para llamar la atención. Han pasado años, anhelando una familia para que las adopten. Mis niñas no son malas. No me rendiré hasta que retiren esa denuncia.

— ¿O que hará? ¿Amenazarnos? ¿Con que recurso? Seamos realistas. No le creerán aunque tuviera mil pruebas. Nosotras tenemos dinero y perfectamente podemos sacar nuestros hijos ahora. Llegarán a descansar en buenas condiciones mientras comen comida hecha por buenos chefs y fingiremos que nada pasó. Mientras usted no podrá hacer nada para sacar a sus niñas. Si nos disculpan, tenemos que pagar la fianza de nuestros bebés. Hasta nunca —salió victoriosa la madre de JungKook. La señorita Sook, estaba muy molesta y se salían humos por las orejas.

— Niñas... tengo que hacer una llamada. Volveré enseguida. No se darán cuenta y estaremos en el orfanato. Nada de esto pasó. Vuelvo enseguida —salió de la sala y Yunho, se le aguaron los ojos y empezó a llorar.

— No llores Yunho. La señorita Sook nos sacará de aquí... eso espero —Hyo Bin, siempre había sido optimista. Pero en esta ocasión le costaba verle el lado positivo a la situación.