Almohadas y SooYoung 🌙 ChanJoy • [찬조이]

🌙 • 2 3 p m

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— Creo que estás leyéndolo mal, Yeol.

Pero el alto no le permitió tener las instrucciones. ¿qué tan difícil podría ser pintarse el pelo?

— No te preocupes, soy un profesional. — Se jactó ChanYeol.

— ¿Un profesional?  — SooYoung lo miró con diversión, tenía el cabello lleno de tintura. — ¿No es la primera vez que haces algo así?

— Me capacité leyendo las instrucciones. — Le informó con falsa soberbia, entrando al baño y saliendo luego de algunos minutos con el pelo también lleno de tintura.

— Deberíamos dejarlo media hora. — Propuso SooYoung, desbloqueando el celular para colocar una alarma. Sintió la mirada de su novio sobre ella. — ¿Qué?

— En las instrucciones dicen cuarenta y cinco minutos. — Le quitó el celular de las manos y se encargó de poner la hora.

SooYoung rodó los ojos.

— Como quieras. — Musitó, recibiendo nuevamente su celular. — ¿Qué deberíamos hacer mientras? — Preguntó, acercándose a ChanYeol y abrazándolo por la cintura en medio de su habitación.

— Bueno. Definitivamente no podríamos hacer lo que estoy pensando ahora. — Bromeó mientras jugaba con las mejillas de su novia. — Haríamos un desastre de tintura por todas partes.

SooYoung infló las mejillas y ChanYeol las apretó, sacando todo el aire con un sonido sordo.

— ¿Quieres bailar?

ChanYeol casi se rió en su cara.

— ¿Yo? ¿Bailar?

SooYoung frunció las cejas.

— ¿Qué tiene de malo? Lo haces muy bien.

— Entiendo que me veas como a ser perfecto. — La separó gentilmente de su cuerpo. — Pero no es así.

— ChanYeol. — Se volvió a pegar, lo abrazó con mucha fuerza.

— No funcionará. — Gruñó, mirando hacia el techo.

— ChanYeol. —  Lo llamó, haciendo su voz más aguda de lo normal. — ChanYeol. — Repitió, balanceándose de un lado a otro moviendo a su novio con ella.

El alto se encogió de hombros y suspiró, resignado.

— Supongo... Que estaría bien. — Miró a su novia con autoridad antes de que comience a saltar por la victoria. — Sólo hasta que la tintura esté lista.

SooYoung asintió muchas veces, se escabulló como una niña hasta el pequeño equipo de sonido en el librero y Yuri resonó a un volumen moderadamente alto.

— Prepárate. — Le advirtió ChanYeol. SooYoung lo observó con diversión. — Acabas de despertar al rey del baile.

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