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La cuenta de los días ya eran lo de menos. Hasta había decidido que mientras menos contara mejor seria, ya que cada vez que pensaba en los porcentajes o los números me entristecía más.

Era al fin momento de iniciar con todo. Estaba muy atareada. Tanto que sentía el temblor en mis piernas en mi camino hacia el hospital.

Recuerdo que tu hermano me recibió aquella tarde con una sonrisa. Me esperaba en la entrada; mientras, dentro de mi rogaba que todo saliera bien.

Tu no sabias nada sobre lo que tenía en mente. No queria decirtelo. No hasta que no tuvieras tiempo  de detenerme.

La espera fue larga. La noche llego.

mi alegría en ese atardecer fue instantánea al recibir el diagnóstico. Era posible. Aquel doctor lo había confirmado. Te salvaría. O al menos eso intentaba hacer.

Me sentí tan culpable aquella noche al titubear sobre si realmente quería aquello, pero después de todo sigo siendo humana y ¿A quien no le aterra la muerte?.

.DAYS. NicoMakiDonde viven las historias. Descúbrelo ahora