Los chicos de las escaleras II Ziall Horlik II

15. Necesitaba saber

Harry

Dicen que cuando escuchas un zumbido en tu oido sin razón aparente, una neurona está muriendo.

Bueno el funeral dentro de mi cabeza me despertó.

Quité la sabana de encima de mi cara torturando mis ojos, haciendome regresar dentro de ella.Bajo la protección de la tela, inicié mi martirio tratando de recordar como había llegado a mi habitación, lo que había hecho, con quien estaba y como me habían convencido de salir.

Liam, me condujo hasta aquí asegurandose de que me quedara en la cama.

Zayn y Niall fueron por mi al lugar de perdición al que fui a "divertirme".

Louis... bueno él estaba conmigo... y estuvo ahí... conmigo.

-Demonios.

A mi mente llovieron las imagenes de anoche.

Las luces de neón en el techo hacían lucir sus ojos cristalinos, su apariencia me causaba un cosquilleo desconocido en mi espina dorsal, los primeros rastros de tinta sobre sus brazos y su cabello desordenado.

Alguna vez en la vida uno tiene pensamientos con algun "amigo". Aunque bueno la forma en que me dijo que saliera con el parecía una insinuación o fui  yo quien comenzó a darle vuelta a esos ojos.

Con algo feliz entre mis piernas sacudí mi cabeza quejandome bajo la almohada, quería olvidar todo.

Por unos minutos medité mis culpas y solo llegé a un callejón sin salida.

Me destapé por completo sintiendo el ligero calor que entraba por la ventana, Liam debió haber dejado las cortinas abiertas.

Respiré, más preguntas que oxigeno, un respiro tupido de dudas que necesitaban contestarse antes de inundar la habitación de paranoia.

Decidí levantarme y buscar mi móvil, viajariamos a Irlanda y no sabía nada de lo que tendríamos que hacer.

Busqué algun mensaje o llamada del susodicho, pero fue en vano. Debía llamarlo o hablar en persona ¿me hablaría? Bueno el empezó ¿y si seguía en shock? La bebida fue la responsable. Arrojé el móvil al colchón y me alisté para salir.

Cuatro noches en Dublin dos en Belfast y cuatro dias libres antes de ir a Sheffield, todo lo que sabía.

Una ciudad acertadamente ubicada, por asi decirlo, en medio de nuestras ciudades natales excepto por Niall.El se quedaría en Irlanda y con los celos de Zaynie quizá fuera escoltado por el mismo de ida y vuelta a territorio inglés, o donde le pudiera ver veinticuatro siete.

Bufé al pensarlo y mentalizé la calma que debía transmitir antes de aparecer en la puerta de Louis, tomé una ducha, lavé mis dientes y saqué mi ropa.

Un vistazo en el espejo, al menos luciría bien.

Una parte de mi, permanecía controlada, centrada en lo que tenía que hacer, ir al grano y aclarar todo. La otra parte mandaba al demonio a la primera.

Cruzé la habitación, y como si la distancia a su recámara fuera larga, caminé lento. Su puerta estaba en frente a la mia, junto a la de Liam, al salir recargé mi espalda contra la puerta que había cerrado.

-Tu puedes Styles.- sabía que lo lograría, algún dia.

Quizá no hoy, si mejor después. Volteé mi rostro a la puerta mientras trataba de insertar nervioso la tarjeta que no encajaba.

-Métete ahi...- dije entre dientes.

El sonido hueco de la puerta y un par de ojos clavados en mi cuello me detuvieron.