UP-date ❀ Double B [iKON]

Capítulo 1

La vista desde mi oficina era simplemente espectacular. Era un precioso día claro, el cielo era de un azul brillante y mientras la mayoría de la gente habría maldecido por ir a trabajar, yo seguía sonriendo. La luz de la línea cinco de mi teléfono fijo se iluminó. Era mi línea personal. Así que sin esperar demasiado, tomé el teléfono sabiendo de quién se trataba.

Una voz familiar me contestó del otro lado de la línea.

—Señor Kim.

Me reí en el teléfono.

—Señor Lee— era la tercera llamada de ese día —¿No tienes suficientes cosas por hacer?

—Oh, tengo un montón— respondió HanBin —Pero aún no has aceptado.

—Te dije que realmente no es mi ambiente— repetí, de nuevo —¿Por qué no llevas a uno de tus otros amigos?

—¿Te refieres a amigos más jóvenes?— respondió —No quiero ir con ninguno de ellos, quiero que tú vengas conmigo.

HanBin tenía dos entradas para ver a una banda demasiado ruidosa en el Olympic Gymnastics Arena, y para bien o para mal, quería que yo fuera con él.

—¿No es esto algo que podríamos discutir durante la cena?

—Me gusta molestarte en el trabajo— dijo alegremente —Por lo general, si te molesto lo suficiente, terminas por estar de acuerdo conmigo solo para hacerme callar.

Gemí.

—¿Es esa una habilidad por la que trabajas o es un talento nato?

—Es una cosa de la generación Y.

—Es una cosa de Lee HanBin.

Se río entre dientes en el teléfono. Luego, su tono de voz cambió a un susurro juguetón.

—Vamos, bebé. Sabes perfectamente que lo estás deseando. Es Shinedown. Son mis favoritos.

—¿Shine qué?

Se echó a reír otra vez, y suspiré.

—Voy a hablar contigo acerca de ello esta noche— le dije —¿Vendrás?

—Eso depende.

Solo entonces me di cuenta de que seguía sonriendo.

—¿De qué?

—De que digas que sí al concierto...

—Tengo mucho que hacer hoy...

—Entonces dime que sí.

—Adiós, HanBin.

Colgué sin dejar de sonreír. Ni siquiera pasó la mitad de un minuto cuando mi línea personal se iluminó nuevamente. Apreté el botón que parpadeaba y sonreí.

—Está bien, voy a ir contigo si eso va a hacer que te calles por el resto del día para que pueda trabajar un poco.

Pero HanBin no se rió. Solo había silencio.

Rápidamente registré la línea para confirmar que se trataba de mi línea personal y que no era una llamada de negocios, pero entonces otra voz familiar habló:

—¿Disculpa?

Mierda.

MiYeon. Mi ex esposa. Me aclaré la garganta y contesté.

—Pensé que eras otra persona.

—Obviamente.

Podría haberle recordado que ella me había llamado a mi línea personal en el trabajo, pero en cambio tomé aire y empecé de nuevo.