Mi Vecino Es Un Vampiro {L.H} (TERMINADA) (ADAPTADA)

51. They Can Not Be Together

Brian miro con disgusto a Diego.

-No me parece correcto.-Dijo cruzándose de brazos.

-Vamos, por favor, ellos no lo notaran. Una vaca más, una vaca menos, ¿no es lo mismo?-Brian seguía serio-Qué aburrido eres.-Se quejó Diego.-Me muero de hambre y la señora Liz nos da muy poca comida.-Dijo mientras caminaba de lado a lado de la sala de estar.

-Eso no es cierto Diego-Dijo negando con la cabeza- Ayer te dio a repetir cinco veces más la comida por que tú se lo pediste, y eso que el filete de carne era grande.

-Ay por favor.-Lo miró con ironía- ¿Ahora me vas a decir que te pareció mucho? No te vi muy satisfecho al finalizar la comida, es más, tu estómago todavía rugía cuando llevaste tu plato al fregadero.

Brian negó con la cabeza.

-Para eso está el bosque , ahí podemos cazar animales sin que nadie se de cuenta, y así no tenemos que explotar a la mamá de Luke.

-No,-Dijo Diego- Ahí solamente hay ardillas y perros salvajes y de vez en cuando conejos, los malditos son demasiado astutos para dejarse comer, las ardillas son fáciles igual que los perros pero créeme, no me gusta comer a alguien que deriva de nuestra raza.

Brian estuvo de acuerdo en eso.

-Pero robarle una vaca al granjero del pueblo, eso es realmente cruel , Diego. ¿Lo has visto alguna vez? Está todo viejo y maltratado por el trabajo y tiene varios hijos a los que alimentar.

-Okey, señor caridad, entonces, ¿Qué ofreces para comer? Por que si no como un poco de carne ahora voy a comerme a todo el pueblo de ahí-Dijo señalando la ventana.

Brian se frotó la cabeza por el fuerte dolor que sentía, estaba agotado. Dianella lo había mantenido toda la mañana tratando de convencerlo de ir a un baile con ella y al final tuvo que aceptar, tuvo que apoyar a Brooke en la tarde ya que realmente estaba triste y preocupada por lo de la carta de universidad y ahora esto, ni siquiera había tenido tiempo de comer algo y se sentía mucho peor que Diego.

Hoy realmente no era su día.

-Diego. -Dijo realmente fastidiado- Puedes ir al mercado a comprar gran variedad de carne y te lo comes en tu habitación o puedes morirte de hambre.

-Bueno, entonces acompañame.-Dijo desafiante.- No tengo el dinero suficiente para comprar.

-No puedo.

-¿Por que no?-Dijo él, intrigado.

Ese niño era muy curioso y cuando tramaba algo no paraba hasta conseguirlo, algo que le hacia recordar a Dianella en varias ocasiones.

-Tu hermana esta deprimida , Diego, debo apoyarla.

-¿QUÉ LE PASÓ?-Dijo preocupado.

-Le enviaron una carta, de la universidad Stanford.-Admitió Brian, debía desahogarse con alguien. Brooke le había hecho prometer no decir nada de esto,pero era demasiado para el, al menos contándoselo a Diego se sentiría mejor.

-¿No la aceptaron?

-Peor, -pausa-La aceptaron.

Diego no entendió.
Hizo una "O" con la boca al darse cuenta.

-Luke y ella no podrán estar juntos...-Dijo comprendiendo.

-Lo sé y esta devastada, no sabe que decidir.

Diego se encaminó hacia las escaleras.

-¿Qué haces?- Le preguntó Brian.

-Necesito hablar con ella.-Dijo siguiendo su camino.

-No, ella me hizo prometer que no le diría a nadie , se molestará conmigo si se entera que lo sabes.

Diego suspiró.

-¿Y que hacemos?-Le preguntó él.

-Por el momento nada, todo esto es su decisión, solamente de ella.

Hubo un incómodo silencio hasta que Dianella entró a la habitación.

-Chicos, necesito un favor, ¿Podrían comprar un pote de helado de chocolate gigante?No, mejor que sean dos: uno de chocolate y otro de vainilla-Les dijo sacando dinero mientras bajaba las escaleras y se dirigía a ellos.

Ellos la miraron confundidos, Dianella suspiró.

-¿Se enteraron lo de Brooke?.-Ambos asintieron al comprender.

-Bueno, necesito que los compren ahora.-Dijo dándoles el dinero.- Para encaminarse de nuevo por la escaleras. Se detuvo por un minuto para mirar a Diego.- y ten listo tu traje para este sábado-Dijo guiñándole un ojo.

Brian lo miró confundido.

-¿Tu también?-Dijo sorprendido.

En todo el tiempo que lleva conociendo a Diego, ni una vez lo había visto usar alguna ropa elegante y mucho menos ir a bailes.

-Ya te dije que no iré Dianella.-Dijo molesto.

-¿Y si te compro un lomo de cordero, aceptarías?-Dijo retándolo.

-Que sean tres y que sean de vacas-Negoció él.

Brian abrió la boca por la sorpresa.

-Hecho.-Aceptó Dianella, lanzándole un fajo de billetes, retomando el rumbo hacia arriba- Y no te olvides de traer a esa amiga tuya , Jannet.-Dijo antes de irse.

Diego se encaminó a la puerta con las mejillas rojas  por lo que había dicho Dianella.

-Así que Jannet , ¿eh?-Lo molestó Brian, haciendo que sus mejillas se pusieran mas rojas.
-Larga historia.-Dijo abriendo la puerta, para que al menos el aire frio de la noche hiciera que se le bajara el color de la cara.