Vacíos ✩ EMILIACO ✩

9.

Dio la hora, Joaquín no había salido para nada de su desde que llego a su casa ni cuando lo llamaron a comer, solo cuando Emilio le mando un mensaje de que ya estaba afuera se decidió a salir

J: me voy – fue lo único que dijo y sin esperar respuesta salió de su casa, se encontró con Emilio esperándolo en el auto donde venia

E: ¿comiste algo?

J: si, vámonos – Ambos chicos abordaron el taxi y no tardaron en llegar a la casa de Diego, el ambiente era lo que se imaginaban ambos, fiesta total por el cumpleaños de Diego, el chico de pelo largo y quebrado los recibió a ambos, más afectuoso con Joaquín

DV: diviértanse chicos – fue lo que dijo antes de perderse en la multitud de gente

E: esto es por fiesta, vamos por algo de beber – Emilio y Joaquín llegaron a una mesa donde estaba todas las bebidas, cerveza, tequila, vodka era lo que más abundaba - ¿no te vas a emborrachar con la tercera hoy, verdad? – Emilio le hacia burla a Joaquín mientras le servia un vaso de cerveza

J: que gracioso – Joaquín tomo un vaso y le dio un sorbo, esta vez no le impacto mucho el sabor como la primera vez

La noche transcurrió, el ambiente era cada vez más... ¿candente... excitante... prohibido?, sin darse cuenta Emilio y Joaquín ya estaban ebrios, bailaban con la música y se dejaban llevar por toda la atmosfera

J: voy por más – fue lo que dijo Joaquín antes de perderse entre la multitud, llego a la mesa de bebidas y ahí se encontró con Diego

DV: ¿te la pasas bien pequeño?

J: si... gracias por invitarme Diego – Joaquín se sirvió un vaso del barril que estaba en el suelo, se apresuró para regresar con Emilio

DV: ¿A dónde vas con tanta prisa... no vas a darme un abrazo? – Diego extendió los brazos

J: si... claro, que tonto de mi parte – Joaquín algo incomodo abrazo a Diego, duro más de lo que Joaquín quiso y lo que hizo separase de el fue que Diego le apretó una nalga para después darle una nalgada - ¡Ey... pensé que habíamos quedado...!

DV: ¡en que me darías un buen regalo! – Diego saco su celular y lo movió frente a la cara de Joaquín – o ya sabes... - Joaquín lo fulmino con la mirada – no me veas así Joaquinsito... mejor ven y dame un beso – Diego le señalo su mejilla con el dedo mientras seguía moviendo su celular con la otra mano, Joaquín se acerco para darle un beso en la mejilla pero Diego se volteo y le robo el beso en los labios, el chico de cabello largo, le acerco más por la cintura y de su cuello lo aprisiono para que su beso se intensificara, Joaquín lo aparto de un movimiento brusco – te buscare en un rato – Joaquín volteo la mirada y vio como Emilio estaba parado a unos metros... los había visto, el castaño entro en pánico, corrió donde estaba el, le tomo de los hombros, los ojos de Emilio estaban fruncidos y su boca tensa

J: Mailo... yo – Emilio le aparto sus manos con fuerza

E: ¿Qué soy? – Emilio arrastraba un poco las palabras

J: ¿qué?

E: ¡QUE, ¿Qué SOY PARA TI?! – Emilio le grito a Joaquín y este retrocedió – ¿solo otro? – el alcohol hablaba por el - ¿esa era tu intención? – en su sano juicio nunca habría dicho eso

J: no... te equivocas

E: no soy... no soy tan pendejo Joaco... vi lo que traes puesto – Emilio le toco el trasero – lo vi cuando te bajaste del taxi, se subió tu camisa y pude ver que el elástico no tenía más tela... ¿van a coger?

J: ¡EMILIO, NO!

E: no mientas... o... ¿lo trajiste para mí? – Emilio empezó a reír - ¿Por qué me gusta puro pendejo?...

J: Emilio...

E: sabes, me voy a bailar, piérdete – Joaquín sintió el alma en pedazos, dio paso ala salida pero Diego lo detuvo

DV: estoy listo para mi regalo Joaco – lo decía mientras se acercaba a Joaquín y le tomaba la cintura y una de sus manos que la llevo a su entrepierna para que Joaquín tocara su erección, Joaquín puso una cara de completo asco, Diego se acercó a su oído – vamos arriba – y casi a rastras de la mano, Diego lo llevo escaleras arriba y a su habitación donde solo cerró la puerta

J: Diego...

DV: ¿los traes puestos?

J: por favor, no quiero hacer esto

DV: ¿¡LOS TRAES PUESTOS!? -Diego le grito a Joaquín y este se cohibió y solo asintió con la cabeza – déjame ver – Diego acorralo a Joaquín en su cama, y empezó a quitarle el pantalón para dejar a la vista la prenda interior que el castaño tenía - ¿ves que fácil que es cuando cooperas?, date la vuelta

Emilio seguía bailando, en todo el rato que estuvo ahí sintió la ausencia de Joaquín, a pesar de su estado empezó a reflexionar... Joaquín se veía con los ojos lloroso, ¿y si decía la verda?, fue a la mesa y no encontró a Joaquín, empezó a preguntar por el y alguien le dijo que había subido con Diego, esto le extraño mucho a Emilio, le daba un mal augurio, Emilio subió

J: ¡DIEGO NO! – Joaquín estaba boca abajo en la cama de Diego con los brazos en la espalda y aprisionados por Diego, el chico de pelo largo se quito el pantalón y la ropa interior, Joaquín gritaba - ¡CALLATE MIERDA! – Joaquín recibió una fuerte nalgada al mismo tiempo que sentía la erección de Diego entre sus nalgas, Joaco se forzaba y gritaba

Emilio caminaba por el pasillo intentando buscar a Joaco, se detuvo a lado de una puerta la escuchar algo... ¿Qué era?... se escuchaba como un grito, la música no lo dejaba escuchar bien, pero si pudo identificar el grito de Joaquín, entro sin dudar y se topo con la escena de Diego sobre Joaquín a punto de penetrarlo