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Katie

Después de escribir y recordar ese gran día, el profesor de la segunda hora llego, solo tenía esta clase y otra y podía retirarme, pasaron rápido así que salí de ahí y espere a Emma, teníamos que ir por la niña y dejarla en casa de mamá, ella era quien se encargaba de cuidarla mientras nosotras trabajábamos, lo bueno es que solo trabajaba medio turno, después de que termine la carrera trabajaré turno completo, cuando yo salga de aquí mi pequeña entrará a la primaria y sera más complicado para mí porque necesitará muchas cosas más.

— ¿Tiene mucho que saliste?— Ví a Emma enfrente de mi y negué

— Acabo de salir, lo bueno es que pronto termino la carrera, solo un semestre y podré estar más tiempo en casa— ella asíntio y entro al carro en el asiento del copiloto, ella sabía conducir pero no le gustaba hacerlo, prefería que lo hiciera yo

— Hoy no voy a trabajar, tengo ganas de tener un día para mí, yo cuido a la pequeña, tu ve a trabajar— la voltee a ver mientras estábamos en un semáforo rojo

—¿Que hay con tu jefe?— sabía que no le dirían nada, sus jefes son buenos con ella, es por eso que se toma ciertas libertades en algunas ocasiones

— No importa, como dijiste, solo un semestre más y adiós escuela y cafetería, estuve viendo varios lugares en los que puedo trabajar y ejercer mi profesión, si me corren es lo mejor, van buscando quien me reemplace y yo ya no tendré que ir, solo estaré yendo hasta dentro de dos meses más y termino mi trayectoria en ese lugar— Ella tenía razón, ambas después de terminar la universidad iremos a un mejor empleo así que no tenía caso de que nos quedaremos en el mismo lugar más tiempo— si no fuera porque tenemos cosas que pagar, yo no trabajaría pero pronto lo haré de lo que verdad quiero hacer— llegamos al kinder en que estudia mi hija y bajamos las dos para ir por ella a su salón, llegamos al aula y la maestra estaba sería, mi hija estaba sentada en un escalón que está afuera de su salón y al vernos corrió a saludarnos.

— Buenas tardes profesora— saludé amablemente tomando a Alex de la mano.

— Necesito hablar con usted señora— me vio muy seriamente así que yo voltee a ver a Emma quien no entendía lo que pasaba

— Por supuesto, puedes llevar a la heladería a la pequeña, salgo en unos minutos— Emma se fue con mi hija y yo entre al salón de clases con la profesora y me pidió que tomara asiento— ¿Hizo algo malo mi hija?¿O a qué se debe esto?— tenía que entrar en mi papel de señora, duele decirlo pero ya soy una, debo comportarme como tal.

— Oh, por supuesto que no— eso me pareció algo extraño debido a que me estaba llamando para hablar de algo que no tiene nada que ver con mi hija

— Entonces, ¿Para que me necesita?—tenia que ir a trabajar, no podía perder el tiempo aquí si no era nada en relación con Alex

— Bueno, hemos notado que usted viene seguido con la chica que se llevó a la pequeña Alex hace un momento, no criticamos el estilo de vida de nadie pero ¿No cree que le están enseñando cosas anormales a la pequeña?— espera...¿Que mierda?— Se que usted es libre de estar con quien quiera pero, es una niña, está viendo cosas que no son comunes— ¿Tiene mierda en la cabeza acaso?

— Mi vida privada es algo que a usted no le interesa señorita— intentaba sonar tranquila pero no podía— no tengo porque decírtelo pero escúcheme bien— tome aire profundamente y hablé— la chica que viene conmigo es mi hermana, vivimos juntas porque es quien me ayuda con el cuidado de Alex, nosotras no le enseñamos nada y si así fuera a usted no le debe importar ni a ningún otro profesor o incluso a la directora, de la enseñanza y de todo lo que implique el desarrollo de mi hija me encargo yo, y si ya es todo procedo a retirarme, permiso— salí de ahí hecha furia, no podía creer la mente tan cerrada de esta gente, estamos en pleno siglo XXI, como siguen pensando así.

¿Sólo Fue Un Juego?  (SFUJ #1)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora