CAPÍTULO VI

254 27 7
                                    

Hoy era de eso días aburridos, el señor tigre estaba presumiendo sus "increíbles" dotes en la materia de educación física, las chicas suspiraban encantadas y los hombres lo celaban o admiraban en secreto, mientras yo estiraba para correr un poco.

- Bien chicos, acérquense - Me acerque al maestro primero y después vinieron los otros.

- Hoy aremos yoga en parejas, así que tomen a su pareja y vayan al gimnasio por colchonetas - Tras esas instrucciones se fue y busque a uno de mis mejores amigos, Furihata Kouki, el me saludo y me hizo señas de que hiciéramos pareja asentí y me dirigí a él, pero una mano me jaló bruscamente hacia atrás y me vio con una sonrisa, mi cuerpo quedo atrapado en el suyo, me solté enfadado y me voltee para verlo.

- Hagamos pareja, Tetsuya - Pero yo negué con la cabeza.

- Lo siento, Kagami -kun, pero no, are pareja con Kouki -kun - El castaño llegó después de eso y me lo lleve dentro del gimnasio, tomamos una colchoneta y nos pusimos en una posición cómoda frente al profesor.

Nos estiramos para calentar y después llegaron otros, me sentí observado toda la clase, hasta que me equivoque de dirección chocando con Kouki el cual cayó de zancadilla sobre mi, el me vio finamente y yo lo vi también muy incómodo, el se acercaba de a poco a mi pero fue alejado por el pelirrojo, lo aparte de mi amigo.

- Ya basta Kagami, estas yendo muy lejos, deja de molestar a Kouki, solo se resbaló, fue mi culpa - Me acerque a mi amigo y le dije viéndolo - Siento mucho a ver chocado contigo, no me fije por donde era - El me acarició la mejilla.

- Tranquilo, no es tu culpa, yo tampoco me di cuento que estabas distraído - Le Sonreí para ir al vestuario para cambiarme e ir a mi casa, era la ultima clase del día por eso estaba feliz, aunque no se notara en mi rostro.

Al terminar de cambiarme me fui sin ver ni decir nada, a Kagami lo están regañando por el alboroto, al pasar por la puerta principal me jalaron hacia un callejón y oprimieron mis labios, yo conocía perfectamente de quien eran, me deje llevar con pasión hasta que para y se alejó de mi y me vio con esos tiernos ojos grises.

- Vine a recogerte - Me apegue a el mientras el pasa sus brazos por mi cintura, y volviendo a besarme, pero me detuve y me quede estático y empecé a palidecer.

- ¿Qué ocurre cariño? - Me quede viendo su uniforme.

- ¿Estas en Shutoku? - El me miro sonriente.

- Si cielo y en el mismo salón que tu querido hermano - Eso me quitaría el sueño.

- Tranquilizante, vamos a comer y después te llevare a casa - Yo me quede pensando, dudando un poco, Sonreí y le dije que si.

El me jaló hacia su moto, me presto su casco, me subí detrás de el, estaba acostumbrándome de nuevo a el aire que chocaba contra mi cara, entramos a una tienda de ramen antigua, el entro saludado a las personas, eso me dio un poco de risa ya que esa actitud tan sociable solo la puede tener el.

- Buenas tades Takao -kun, buenas tardes lindura - La mujer me vio con una sonrisa y le dio el menú a mi novio.

- No es una chica Akiyama -San - La señora de edad avanzada se puso sus lentes y me sostuvo la cara, me observó unos minutos con mucho detenimiento, - Con esa cara tan linda y fina cualquiera crearía que eres una chica - Ella se levanta ya que este lugar era muy tradicional y le hace señas a una mujer más joven.

- ¿Qué ordenaran? - Ella nos miro con una sonrisa lista para apuntar nuestro pedido.

- Yo quiero un soyu ramen por favor - Mi adorado azabache no tuvo que ver la carta para ordenar, al contrario de mi que busque rápidamente algo que se me antojara en ese momento.

- A mi me traería un miso ramen, por favor - La mujer mayor me vio con luz en sus ojos cansados mientras entraba a la cocina a preparar nuestro pedido.

- Claro precioso - La mujer más joven me guiño un ojo provocando provocando una cara de molestia en Kazunari.

Las horas con mi novio pasaban como segundos, ciertamente teníamos algo muy especial entre los dos.

- Vuelvan otro día, prepararemos té - Los dos no despedimos con una rápida reverencia y me llevo a casa.

Cuando bajamos de su moto me tomó por la cintura y yo uní mis brazos por su cuello, me beso hasta quedar sin aliento.

- Te amo Tetsuya - Me susurro al oído despacio y quedito para que solo yo lo escuchara.

- Y yo te adoro Kazunari - Me abrazo aun más a él, pero nuestro romántico momento fue interrumpido por voces que no esperaba escuchar en un largo tiempo, rápido el se escondió entre los arbustos del jardín.

- Tetsu, hace ya años que no te vemos - Mi hermano moreno me abrazo fuertemente.

- Me alegra verte bien, a parte, estas a fuera por tu propia voluntad, eso demuestra que estas de buen humor, ¿a qué se debe el cambio? - Yo balbucee algunas palabras ilegibles, a los que todos al parecer notaron mis nervios.

- Por cierto, Taiga nos dijo que estabas hoy muy rebelde, sabes que a papá no le gusta que hagas eso - Mi cara se transformo en una mueca de odio.

- No me lo menciones, a parte, ese desgraciado no tiene nada que ver conmigo, ya le dije y me canse de decirle que NO me voy a casar con el, y NO sera nada de mi - Ellos suspiraron con resignación, luego me abrazaron entre Ryota y Daiki.

- Entremos, queremos saludar a la abuela - Yo me zafe de su abrazo.

- Yo necesitó aire, así que pueden entrar y platicar un rato con Oba san, mientras yo entro en un rato - Ello solo me dejaron a fuera, cuando estuve seguro de que nadie me veía corrí a mi novio.

- Tus demás hermanos han crecido mucho, y más Atsushi, creo que me a aplastaría se me metiera a una pelea con el - El azabache hizo una mueca graciosa que mi me hizo reía bajo.

- ¿De que te ríes? - Me pregunto con un puchero.

- De que estas muy preocupado por morir en manos de mi hermano - No pude aguantar más la risa y me hache a carcajear.

- ¿Insinuas que tengo miedo? - Me sonrió mientras me tumbaba sobre el pasto y empezaba a hacerme cosquillas.

- No... Por favor... Ya no más... No puedo más - Decía entre risas y daba horcajadas de aire para poder respirar bien.

- Eres una ángel Tetsuya - Me dijo mientras reía también.

Terminamos recostados, el sobre un árbol rodeando mi cintura con sus fuertes brazos y yo en medio de sus piernas y mi cabeza recostada sobre su pecho, escondidos como dos vándalos entre los arbustos.

- Kazunari, si no estas conmigo me muero, juro que me muero - Le dije viéndolo a los ojos y el solo me dedico una sonrisa cálida y un beso sobre mis labios.

- Tetsuya, te amo, escapemos nuevamente, pero esta vez, hagamoslo mejor, algo grande, algo imparable, algo mas planeado - Yo sonrei con felicidad, no me molestaba, pero teníamos que planear bien nuestra huida.

Al final el se fue y yo sentí un hueco profundo de mi corazón, sin nada mas entre a casa, pero me sorprendió no solo escuchar a mis hermanos, mi abuela y mi madre, si no dos voces mas, corrí hacia donde salían, mis jadeos de cansancio y horror a lo que me esperaba me ahogaban, la casa era inmensa así que me apresure, me plante frente a la puerta y con mis manos temblorosas deslice de a poco la puerta.















Aquí les dejo actualización, esperó que les guste, y muchas gracias por continuar leyendo.

Los amo.

Bye. ♥♥

TOW HEARTS, ONE HEARTBEAT. (Reescribiendo) Donde viven las historias. Descúbrelo ahora