2- Calor

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Ambos chicos se encontraban tirados en el suelo en busca de algo de frío, era verano y estaban tan sudados que aunque quisieran no podían estar juntos porque sus cuerpos entrarían en más calor.  Apenas se habían mudado juntos y ¡sorpresa!, no habían comprado ventiladores ni nada parecido y ahora la estaban pagando.

— Espera, encontré algo frío.— Ban rodó por el suelo hasta llegar al de ojos miel y puso la mano en el pecho de este.— Tu corazón.

— No estoy de humor para bromas.— dijo moviendo un abanico y alzando su ropa para que le entrase aire fresco y se sintiera mejor. Estaba sufriendo, odiaba el calor y todo lo relacionado, su piel estaba roja por quemaduras y le dolía un montón si se movía o le tocaban.

— Estoy intentando alegrarte.— Ban pegó un ligero golpe en la cabeza del castaño y se levantó del suelo caminando hacia otro sitio, King fue tras el a gatas.— No te pongas así que me das más calor.— King soltó una pequeña risa.

— Si me cargas te doy un beso.

— No, ahora te jodes.— Ban le sacó la lengua al castaño poniéndose una camisa de tirantes negra que hacía resaltar su piel blanca y unos pantalones vaqueros.

— ¿A dónde vas cari?~— Arlequín alargó la frase por el cansancio físico que sentía.

— Voy a ir a una heladería con Elaine.— El de ojos color miel se despertó por completo y miró a Ban con algo de celos.

— Ya veo ya veo.— Arlequín salió de la habitación caminando y se puso a ver el cielo por la ventana, era su único método para no enojarse con Ban.

— Idiota.— Arlequín recibió un pequeño golpe en la cabeza de nuevo, haciéndole girar a ver con un pequeño puchero en sus labios a su amado.— Si no te vistes en 10 minutos no te llevaré.— El chico salió corriendo a la habitación a vestirse lo más rápido posible.— Total, igual te iba a a llevar.—  susurró cogiendo algo de dinero de su cartera.

— ¡Ya estoy!— la enorme ternura que le provocaba verle así le hizo abrazarle con cuidado de no tocar sus quemaduras.— ¡Vamos! ¡vamos!

— Enano impaciente.— ambos salieron de aquella casa para luego caminar al sitio.

Allí se encontraron con Elaine y su novia Jericho, Arlequín fue de inmediato a abrazar a su pequeña hermana y a dedicarle una mirada asesina a la chica que le acompañaba. Ban simplemente se acercó caminando y alzó la mano en modo de saludo.

Como siempre Arlequín se sentaba entre su hermana y su novio, aunque sabía que nada pasaba ni iba a pasar entre ellos.  A Elaine le parecía algo tierno que Arlequín se pusiese algo celoso cuando ella le hablaba a Ban, Ban simplemente pasaba. El peliblanco consideraba una estupidez enorme el sentir celos, pero a su pequeño se lo perdonaba por lo mucho que le quería.

Pasaron la hora hablando y discutiendo quién era la mejor pareja, haciendo roces y cosas tiernas para que la gente opinase. Comieron el helado y se llevaron grandes cantidades de ese invento mágico y celestial al irse a casa.

— Ban...— El de baja estatura le llamó al llegar a casa tirando de su camiseta. Tras un leve "Hmm?", Arlequín le miró a los ojos con expresión de cachorro triste.—Lo siento por ponerme celoso, sé que no sucede nada entre tú y mi hermana pero en verdad no te quiero perder.

— King, no me vas a perder.— Ban puso la mano sobre su cabeza acariciando su pelo.

— Eso espero.— Susurró antes de ponerse de puntillas lo más que podía para alcanzar los labios de su pareja.

✨BanKing Oneshots✨Donde viven las historias. Descúbrelo ahora