✨BanKing Oneshots✨

6- Engaños

Su corazón estaba roto y él estaba destrozado por dentro. Las lágrimas no paraban de salir mientras era consolado por nada más que el calor que desprendía la estufa. Ya no le quedaba nadie, bueno, aún le quedaba alguien y era sí mismo pero ya lo estaba perdiendo.

Su hermana y su esposo, quién lo diría, ¿no?

Rompió en llanto luego de haberse calmado unos segundos, no podía hacer nada más que llorar. La puerta estaba siendo golpeada con fuerza y los gritos del que consideraba la mejor persona en el mundo le imploraban que abriese la puerta. No tenía opción, tenía que abrirle.

— Recoge tus cosas y vete.— dijo acongojado por el llanto.— No quiero oír explicaciones, vete a la puta mierda.— El peliblanco nunca había oído esas palabras salir de la boca de su pareja y mordió su labio entrando a la que era su casa para recoger todo

Mientras el chico recogía, Arlequín seguía llorando abrazando a un peluche de su tamaño, cada hipido y lágrima que soltaba se le clavaban en el corazón al peliblanco quien estaba profundamente arrepentido por haber caído tan bajo y dejarse llevar por su cuñada.

— Es mejor que te busques un abogado, prepararé el divorcio.— El castaño le miró con ojos hinchados de tanto llorar y luego volvió su vista a la estufa.— Y ni te atrevas a dirigirme la palabra, me dirás  cruel pero yo no soy el que te estuvo engañando sabe dios cuanto tiempo.— El peliblanco salió de aquella casa cerrando la puerta tras él.

Revisó su móvil, dispuesto a borrar todas las fotos entre llanto y le interrumpió la acción una llamada entrante de su hermana la cual rechazó y luego le llamó Meliodas, su amigo.

— King, ¿qué ha pasado?— El rubio se encontraba confundido ante la situación, se había despertado por un montón de llamadas de Ban y cuando alcanzó a responder solo oyó entre tanto llanto "cuida a King".

— Capi.— y Arlequín rompió en llanto de nuevo.

— Quédate allí, no te muevas.— y la llamada se colgó.

El castaño se quedó mirando la foto enmarcada del día de su boda, el día más feliz de su vida. Sonrió ante el vago recuerdo soltando algunas lágrimas. Ojalá que él nunca se hubiese acostado con su hermana.

Abrió la puerta dejando ver lo tan en la mierda que estaba, Meliodas entro junto a Elizabeth quien de inmediato se abalanzó sobre King a llorar junto a él. Meliodas suspiró, Ban sin duda era muy estúpido.

— Ten.— le tendió una taza de té al chico, este la agarro con sus manos temblando y bebió un poco para luego limpiar sus lágrimas.

— ¿Ban te lo ha dicho verdad?— Meliodas asintió sentándose al lado de su pareja y su amigo.— Es un idiota... Y entre todas las personas con las que me podía engañar tuve que ser Elaine.— Arlequín miró la bebida.— Me siento mal, me gustaría que todo esto hubiese sido una broma y que ahora viniese riendo y me abrace.—volvió a romper en llanto rompiéndole el corazón a sus acompañantes quienes le abrazaron calmando lo hasta que cayó dormido.

Meliodas lo acostó en la cama y lo tapó con las mantas mientras que Elizabeth limpiaba algunas cosas que habían sufrido la ira del de baja estatura. Suspirando la pareja se miró con una expresión de preocupación por el chico, Arlequín era muy inestable y no se sabía que podía pasar cuando estaba así de roto por dentro.

— Tu, grandísimo idiota.— Empezó a hablar cuando el peliblanco atendió la llamada.— Espero que tengas una buena excusa para lo que le hiciste.

— No tengo excusas.

— A pesar de todo, él te sigue amando.— Elizabeth abrazó a su pareja quien se estaba apunto de dejar llevar por la ira.— Así que o lo arreglas todo o piérdete, ah otra cosa, no va a ser sencillo que te disculpe. — y colgó la llamada.

~☕️~

— King, sé que me odias y todo eso pero por favor, oye lo que tengo que decirte. — El chico se detuvo mirando con enojo a Ban.— Bien, primero que todo estoy arrepentido por lo que he hecho, me dejé llevar por el alcohol y la situación. Segundo, quería disculparme contigo porque el día que nos casamos te prometí que nunca te haría daño y fui tan idiota que ni siquiera pude cumplir la promesa, y Tercero, King, fue un mero acto sexual sin sentimientos de por medio, ni siquiera llegamos a nada porque te recordé y la intente apartar.

— Excusas.— Susurró Arlequín.— No te pienso perdonar tan fácil Ban, no soy el yo del pasado porque te recuerdo que hace 9 años me hiciste lo mismo.

— Y sigo arrepentido por eso...

— No es tan difícil ser fiel Ban.— Se acercó al peliblanco.

— Lo sé King.

~🍮~

Luego de un año tras Arlequín logró que le disculpara, ahora tenía que ir poco a poco recuperando su confianza. Acarició la espalda del chico que dormía junto a él, ambos estaban cansados del día anterior. Miró al chico y desde muy en el fondo de su corazón prometió por su vida que nunca más le iba a ser infiel a esa criatura tan hermosa.

— Buenos días dormilón.— Ban susurró con su voz ronca haciendo sonrojar al castaño quien escondió en sus manos su rostro.

— Buenos días.— Dijo tartamudeando, causándole ternura al chico y provocando que lo abrazase