Relaciones Tóxicas

CAPITULO 3

Empiezo con mis labores hoy puesto que ya pasaron 5 días desde que empece a trabajar acá, me acomodo para recibir los planos de los chicos que iban llegando, y sin querer dirijo la mirada hacia el escritorio de Benjamín y veo que aún no llega, pregúntense porque me fijo en si está en su oficina ni yo misma lo sé pero me gano la curiosidad hoy.

Ya por fin almuerzo y justo cuando estoy por salir a comer, veo que llega, trae una cara de no haber dormido nada.

- Hola Gianna un favor puedes ir a comprar un energizante por mí? – su rostro parece el de un mapache.

- Disculpe pero estoy por ir a almorzar, si desea puedo ir después que haya almorzado. – me mira y sonríe.

- Está bien ve, luego vienes. – con ese tono pícaro que tiene.

Me gusta cuando me tomo mi tiempo para almorzar y hoy así lo hago, me tome un buen tiempo, ya cuando termino me dirijo a oficina.

- Ya llegue, disculpe la demora, que necesita. – esta echado sobre su escritorio.

- A ti, sobre mí. – con un tono ronco en su voz, cargada con cierto toque de lujuria.

- Me disculpara pero no estoy para sus bromas de mal gusto, me retiro. – hago notar mi enojo puesto que no me parece nada gracioso como se expresa.

- Disculpa, por favor puedes ir a comprar el energizante que te pedí, toma mi billetera. – me lanza la billetera, sin querer la abro y me quedo con la boca abierta, sí que maneja plata, con razón ese carácter y manera de ser.

Regreso ya con el energizante helado que conseguí y lo coloco en su escritorio al igual que su billetera.

- Ahí tiene Benjamín, su energizante y su billetera. – se la coloco a su lado.

- Gracias Gianna, y por favor no se enoje conmigo solo expreso lo que quiero. – me mira y siento como si me analizara de pies a cabeza.

- Disculpe, pero usted tiene una pareja y exprese con ella lo que desea. – no me gusta esta sensación que se está formando dentro mío, pero se siente como si algo en mi hirviera.

- Ella no tiene nada que ver, yo puedo hacer lo que quiera y con quien yo quiera. – noto como sus ojos esconden el deseo.

- Pues busque a alguien más, porque de primera le digo que eso no pasara conmigo. – noto que como arque una ceja como si me estuviera retando.

- Ya veremos con el tiempo si dices lo mismo, porque soy capaz de terminar mi relación con ella en estos momentos. – dice con tal seguridad la cual no me gusta ni si quiera como suena.

Me retiro por que por lo visto hablar con él no lleva a nada, pero aun así algo en mi quema por dentro, como si tuviera ganas de descubrir sobre ello, pero si él quiere jugar no me quedare atrás.

Me dispongo a hacer mis cosas para así poderme distraer puesto que el ingreso de estos plano toma mucho tiempo y precisión en la numeración, me distrae bastante pero causa ciertos estragos en mí, ya que termino cansada.

- Gianna, Benjamín te busca, quiere que vayas a su oficina, me parece que quiere la información por los planos. – noto en el tono de voz de Jacqueline que esconde molestia alguna y no sé porque.

- Ahora voy, gracias Jacqueline. – respondo con una sonrisa.

Me preparo mentalmente para ir a la oficina de Benjamín porque sé que esto será una batalla larga.

- Me mando a llamar Benjamín. – sonrió con picardía para ver su reacción.

- Si pasa y cierra la puerta. – me devuelve la sonrisa de igual manera aunque esta vez veo que tiene cierto toque de lujuria.

- Diga que es lo que necesita. – dejo que vea que no me amilano ante su mirada.

- Ya te dije temprano que es lo que necesito de ti, pero esta vez lo postergare. Necesito que bajes al segundo piso y solicites la firma para este documento. - su voz sigue sonando igual de picara pero ahora si tiene más seriedad.

Estoy saliendo de su oficina y antes de cerrar. – Lo traes de vuelta. – Me guiña el ojo.

Fui al segundo piso y pedí la firma que Benjamín me solicito, pero si demore un poco porque me indicaron que el director estaba ocupado. Una vez que termine me dirijo a la oficina de Benjamín percatándome que la puerta está entre abierta y parece que está hablando con alguien, entonces toco la puerta.

Benjamín traigo el documento que me pidió. – hago una voz dulce para no incrementar la tensión en el ambiente, pero creo que no funciono, puesto que quien estaba adentro es su enamorada, que al salir casi me empuja no sin antes mirarme de pies a cabeza con odio.

- Pasa y cierra la puerta. – otro que se carga la incomodidad encima, de seguro pelearon.

- Acá tiene el documento firmado Benjamín, me retiro. – se lo entrego y le doy una sonrisa según yo inocente.

- Déjalo ahí. Te dije que terminaría con ella y así es, acabo de romper con ella. – su sonrisa ya parece de satisfacción y además con deseo, lo cual mi cuerpo lo recibe y entra en calor.

- Ah que bueno Benjamín, pero sus problemas personales no son de mi interés. – veo que se para y camina hacia mí, yo retrocedo para tomar la manija de la puerta, pero siento que me jalan del brazo.

- Ya verás que serás mía y no habrá tiempo para que lamentes cuando eso pase, porque solo pensaras en estar conmigo. – y me pega hacia hacia el diciéndome todo esto al oído, el cual me causa cosquillas por la espalda, tiene un aroma a cítricos y madera el cual huele delicioso.

- Veremos si eso llega a pasar Benjamín. – juro que en ese momento sentí como mis piernas se hicieron de gelatina por un momento pero me repuse lo mejor que pude para salir de ahí. Ese aroma aun lo tengo grabado, huele delicioso.

Tratar de concentrarme en mi trabajo fue difícil porque aún no consigo quitar ese olor de mi mente pero mejor me pongo a ingresar esos benditos planos o terminare mi día sin hacer nada, el tiempo sí que corre rápido cuando estas ocupada. Por fin salida, ya voy caminando y veo que el baja las escaleras tras mío, para cuando me alcanza puedo sentir su respiración en mi cuello.

- Serás mía tarde o temprano y prometo que no te vas a arrepentir. – esta vez su voz no oculta absolutamente nada y tampoco su mirada, es como si estuviera viendo una presa, y esa soy yo.

EL COQUETO POR PARTE DE GIANNA IRA DE A POCOS, PERO BENJAMÍN SEGUIRÁ DETRÁS DE ELLA COMO SIEMPRE.

UNOS CAPÍTULOS MAS Y SERA LA ESCENA HOT QUE ESPERAN.

ESPERO QUE ESTÉN DISFRUTANDO DE ESTA HISTORIA QUE PARECE SACADA DE UN DIARIO.