CAPÍTULO 18

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Durante la jornada de trabajo, todo iba bien lo único que cambiaba era lo que se sentía en el ambiente, era de esas sensaciones en las cuales se puede sentir la lujuria y tensión en el aire, algo extraño de por si, todo pasaba más lento y el trabajo que teníamos era bastante, pero lo bueno de ello es que me ayudaba a ocupar la mente en otra cosa que no sea en lo que mi cuerpo presentía que pasaría, o tal vez era imaginacion mia. El hecho de tener que llamar personas para ofrecerles trabajo me distraía bastante ya, y además de realizar consultas sobre materiales de oficina y para los que trabajarian en campo con nosotros. He tenido que llamar a todas las personas que conocía para hacerles una mejor propuesta de trabajo, ya saben como es este mundo, el dinero es lo que te mueve si es que no sabes cual es tu vocación. Ya estaba por terminar todos los pendientes que tenía y ya seria la hora de salir del trabajo, preferí alistar mis cosas ya que mañana seria otro dia muy parecido con todo el alboroto que hubo hoy. 

- Hora de irnos Gianna. - no se porque pero se me pusieron los pelos de punta en ese momento, sentido figurado.

- Bueno, imagino que me dejaras cerca a mi casa? - pregunta estupida Gianna.

- Te parece que te llevare a tu casa apenas salgamos de acá? - oh por dios, nervios pero ya me imagino bien a que se refiere. 

- Bueno vamos entonces. - que me parta un rayo por lo que estoy por hacer. 

- Te veo en el estacionamiento en 5 minutos, no demores. - por el tono de su voz deduzco que esta algo desesperado.

- Ya voy, dame un momento. - todas mis cosas están listas pero quiero hacerlo esperar. 

Lo veo salir con una calma que engaña a cualquiera que no sepa nada de esto. Siendo sincera ni siquiera se por que estoy nerviosa cuando se perfectamente lo que pasará y tampoco es nada nuevo para ninguno, pero aun asi siento algo extraño por dentro y espero que no sea nada malo, ya tengo todo listo y voy camino al estacionamiento, lo veo ahí sentado dentro del auto y me hace una seña para apurarme, el resto del personal nos ve irnos juntos, pero al momento no le doy importancia aunque se que se harán ideas bobas sobre que andamos juntos, aunque tampoco es del todo falso, pareja no somos pero sí algo más personal que amigos o compañeros de trabajo que le da un aventón a su compañero.

En el camino, ya en la autopista solo me dedico a escuchar música, mientras que el coloca una mano suya en mi pierna y el tacto es bastante suave. Me pone un poco que haga eso pero quiero hacer como si nada pasara y ademas yo tambien puedo colocar una mano mía en su pierna e ir subiendo la temperatura del ambiente dentro del carro, siendo sincera es la primera vez que hago cosas como estas dentro de un auto y en cierto punto me encanta, es que algunos tenemos ciertos fetiches o fantasías que cumplir señores y en el auto es una de las mías. En cada semáforo es un beso o un tocamiento en ciertas zonas además de la música que acompaña. 

- Quien te viera a simple vista no pensaría que eres tan morbosa Gianna. - el tono de su voz cada vez se vuelve más ronco.

- No le enseñaron que las apariencias engañan. - hasta mi tono de voz ha cambiado durante el viaje. 

- Pues te doy toda la razón con respecto a lo que me dices, pero sigue haciendo lo que haces. - se comienza a poner tenso y su respiración es calmada a comparacion de como se siente su cuerpo. 

- Mejor lo terminamos cuando estemos en el hotel, estas manejando. - calentura en el cuerpo pero con cerebro consiente, no quiero causar un accidente y mi muerte antes de tiempo. 

El no dice nada, se relaja y sigue manejando de camino al hotel, les había dicho que el camino del trabajo a mi casa es bastante largo y pues no les miento ya llevamos 30 minutos en la autopista y también acercándonos al hotel que fuimos la ultima vez, siento cierta emoción al recordar aquel día y también algo más que no se como explicar de momento. El camino al hotel cada vez se va haciendo más corto y aun asi puedo sentir la tensión dentro del auto que si le pasaras un cuchillo parecería que la tensión se corta super rapido y todo explotaría cual bomba nuclear y arrasa con todo a su paso, pero prefiero calmar las aguas y arrasar con todo una vez que esté dentro de dicha habitación, en cambio Benjamín se le puede notar que tiene ciertas partes de su cuerpo bastante tensas y en sus ojos hay algo muy oscuro que parece ser la lujuria tomando control del ser humano que tengo al frente. 

- Hemos llegado. - veo el hotel al frente y siento como si pudiera respirar cada vez más lento y mi cuerpo se siente tenso. 

- Lo se, se puede ver que llegamos. - siento un calor en el vientre y que me recorre la espalda. 

- Entremos. - toma mi mano y me guía como la última vez y mi cuerpo está vuelto loco ahora mismo.

Recuerdo al señor con el que está hablando ahora Benjamin, parece saber exactamente lo que pasara y bueno es lo más obvio ya que acabo de ver una pareja salir del lugar, vamos camino al séptimo piso, salimos del ascensor y mi cuerpo se va sintiendo más tenso en este momento, la mano de Benjamín se siente muy bien sujetando la mía y se siente algo confortable pero no me gustaría acostumbrarme a ello. Veo la entrada de la habitación y se que es lo que me espera detrás de aquella puerta y será un momento de placer y diversión. 

- Tenemos un buen rato por delante. - el tono de su voz me asusta pero me hace sentir cómoda.

No digo nada, puesto que la voz no me sale y mi cuerpo esta reaccionando por si solo, empezando por sacarnos las casacas que tenemos encima y están estorbando, los besos asi como llegan también se van yendo y aumentan la intensidad, las cosas alrededor comienzan a estorbar, nuestras manos comienzan a realizar sus propios caminos en el cuerpo de cada quien, la ropa comienza a salir de uno en uno y el ambiente se carga de tensión sexual y además se siente pesado, todo va pasando de una manera lenta y tortuosa para cada uno. 

Relaciones TóxicasDonde viven las historias. Descúbrelo ahora