Secrets In Love ♡ [JENLISA](omegaverse)

Capítulo 11

Lisa. Un par de horas despues de salir de su hogar y espiar a su objetivo. Se encontraba en el regazo de aquel beta novato que había fichado en la bienvenida. Su objetivo en otras palabras.

-¿Qué dices?- preguntó en un tono meloso la omega que se refregaba en aquel beta ahogado por el aroma de celo de esta.

-Mhg~ Que eres hermosa.- soltó en un tono lujurioso el beta menor, pareciendo estar hechizado por cada movimiento que provocaba una exquisita fricción entre ambos hecho por la omega.

Con el poco control que le quedaba tomaba con fuerzas las caderas de la omega buscando mas fricción.

-Ahora dime, ¿lo hiciste por conveniencia o por deber?- preguntó susurrando la omega que ahora utilizaba su aroma para hostigar aquel joven beta que era seducido por palabras y pequeñas acciones que lo volvían completamente loco.

-El señor Dillan me mandó a...
q-que lo desgoyara vi-vivo...- Respondió mientras alzaba sus caderas ejerciendo falsas enbestiadas a la omega.

-Oh..entiendo...- después de haber dicho eso una sonrisa de lujuria y un brillo peculiar e indescifrable en la mirada de la omega se hizo presente.
El beta quedó paralizado del terror, su instinto le advirtió tarde con quien se estaba enrollando.

En un abrir y cerrar de ojos la omega saco un cuchillo debajo de su falda, su arma favorita descontando el látigo, una pistola toda decorada con brillos rosa y negro.

No tardó en utilizarlo para algo útil.
Tomó del mango de este, mientras le daba un beso bastante húmedo al beta, atravesó con el filo del cuchillo en la garganta de este que antes gemía por tener en cuatro a la omega que se veía tan inocente.
La sangre se escurrió de la boca del beta.

Se escuchó un grito de horror de una mujer mayor que vio como el resto de los cambia formas que eran guardaespaldas del beta también caían, sus cuerpo inertes en el suelo en un rápido movimiento de la omega que volvía a estar en el regazo del beta.
Algunos miraron reacios a la situación; apenas la omega se levantó del regazo del ya fallecido, personas y uno que otro cambia formas corrieron al cuerpo sin vida.

Muchos, la mayoría alfas, observaron con ojos de lujuria a aquella omega con una silueta y caminar provocativo, su rostro serio y la mirada fría que les proporciono a aquellos alfas hizo a más de uno soltar un jadeo de excitación, ella sonrió cínica mente al guardia mientras acariciaba el pecho de este quien soltó un suspiro profundo de frustración, conocía a la omega, ahora su jefa.

-Cuida bien el lugar...No cualquiera puede entrar Mingyu.- dictó la omega con voz suave y aterciopelada.

-Cómo usted lo diga... señorita- Respondió con respeto y dudoso el alfa.

-Señorita suena bien... Pero para ti Lisa- dicho esto le guiño el ojo y camino fuera de aquel lugar llamando la atención de todos.

Una llamada entrante en su celular hizo que rodará los ojos, seguramente era su asistente y mejor amigo de crímenes.

-Lisa... La idea era No llamar la atención... ¿estas en celo cierto?-

-Ash.... Si, ¿eso que importa? Trae más beneficios. Aparte lo disfruté, necesitaba sacar algo de estrés- contestó la omega sonriente y calmada.

-Pero no era ese el plan- le reto el alfa de la otra linea -¿Qué ocurrirá si Jennie se entera?- esa pregunta descolocó a la omega parándose en seco en el pavimento.

Si bien. Sabía que este secreto saldría a la luz en cualquier momento, aún no se sentía lista para contarle a su alfa que ella, su pareja, disfruta matar y ver correr sangre en sus manos, cuando se encargó de crear un lado, una cara, de una omega casi perfecta.

-Ya estamos cada vez más cerca Sean- se limito a decir la omega por teléfono mientras salía del estacionamiento de ahora su casino y subía a una de sus motos conduciendo hasta su hogar.