☆Love me Noona [J.JK]☆

01

En una parte de Seul, una chica en su hogar hablaba por teléfono comodamente en el sofá de su living viendo televisión y tomando una copa de vino.

-¿Vas a arrendar una habitación?-se escuchaba una voz femenina por el móvil.

-Si...lo pensé bien y es mejor que otra cosa, ademas esa habitación se esta llenando de polvo.- contesto la castaña a su amiga.

-Esta bien, pero... Rae, estas super bien económicamente, un trabajo estable, te has repuesto del idiota...- fue interrumpida.

-¡Ni lo menciones!...y estuve mal solo dos meses...ademas no estaría mal tener dinero extra.- hablo y tomo un sorbo del vino.

- Y ¿A quienes les vas a arrendar?

- Amm...no sé, quizás a los universitarios...ya sabes, como hay una universidad a tres cuadras de mi casa a ellos les beneficiaría eso...con respecto al costo...no lo sé todavía.

- y ¿ya has puesto algún anuncio o algo por el estilo?

-No, aun no. Están los muebles pero no el resto, tengo que comprarlas: sabanas y adornos...de hecho tengo pensado ir esta tarde al centro a comprarlas ¿por qué? .- dijo tomando otro sorbo de su copa.

- Bueno, te lo pregunto porque los vecinos de Busan le han preguntado a mis padres si yo les podría hacer un favor y es buscarle un depa o algo al hijo mediano de ellos ya que ingreso a la universidad y están buscando un lugar y yo sigo buscando y en casi todos los lugares prefieren a chicas o ya están arrendadas y el mayor esta en el extranjero y casado... asi que me puedes hacer ese favor solo para que vea la pieza ¿si?- Sonaba acongojada la amiga.

-...bueno...que venga y lo vea la próxima semana por que desde hoy la tengo que limpiar, arreglar y muchas cosas más. ¿ok?

-Ok, gracias amiga les voy decir altiro. que es sin compromiso y todo eso. ok te dejo, hablamos o nos escribimos luego. Bye.- diciendo esto Rae también se despidió y cortaron la llamada, dejo el celular en la mesita del centro.

Termino de beber su copa, fue a la cocina tomo utensilios de limpieza y fue hacia la dicha habitación.

-Bien Rae...a limpiar.

Se demoro una hora en dejar impecable la pieza, luego se  ducho y se arreglo para ir al centro comercial en su auto. 

Compro varias cosas pero neutras ya que aun no sabía quien iba a ser el dueño de ese cuarto. Ya cansada de tanto ajetreo en el centro, decidió volver a casa y descansar viendo televisión acompañado de su notebook y una refrescante copa de vino.

(...)

Al día siguiente se dispuso a ordenar y decorar la habitación; cuando termino se sintió extraña ya que hace bastante tiempo ese lugar no se ocupaba.

 Ella recuerda cuando llego hace siete años para ser exactos, era habitada por ella y la persona que tenia su corazón desde la secundaria, ya a los dieciocho decidieron mudarse a Seul y a aquella casa para realizar sus estudios y gracias a la ayuda de sus padres lograron encontrar esa casa para en ese entonces la feliz pareja. Ambos con veintiún años y enamorados, decidieron dar el siguiente paso. el chico le pidió matrimonio a Rae, y ella feliz y enamorada acepto. El tiempo transcurría, los estudios continuaban y la organización de un matrimonio se acercaba, pero Rae empezó a notar cambios radicales en su futuro esposo: ya no la llamaba como antes, salía constantemente en las noches, evitaba el tema de la boda y cuando Rae le preguntaba si seguía enamorado de ella o si quería seguir con la boda él simplemente le daba escusas de el cansancio, nervios de próximos exámenes y/o proyectos o la misma boda.