No, Thanks. (The Heathers)

Capítulo 04:

Capítulo 04:

_Narra Verónica_

Sonreí inconsciente ante la acción de Ram y acosté mi cabeza sobre su hombro, dejando que me apegará más a el, su brazo rodeaba mi cuello de forma delicada, mientras jugaba con mi cabello enredandolo entre sus dedos.

-Oye, Verónica- me habló Ram con su voz algo ronca, Levanté mi cabeza y voltee a verlo con curiosidad en mis ojos -Oye, ya sabes, tengo 2 entradas para ver una película hoy a las 8 ¿te apuntas?- mencionó sonriente el de ojos azules, ligeramente avergonzado, lo delata el rubor en sus mejillas.
-¿Porqué no vas con Kurt?- le pregunté con mi ceja arqueada, Kurt solamente me vio y empezó a reír nervioso, intentando ocultar algo.
-Hoy saldré con Mcnamara ¿no es así, linda?- extendió su mano a Mc y le sonrió con ternura, ella de un momento a otro, pareció captar el mensaje y se levantó, para agarrar su mano y abrazarlo por la cintura, plantandole un beso en la mejilla.
-Sí, iremos a almorzar y tal vez al centro- me sonrió la de uniforme amarillo, su mirada delataba que me mentía ¿tan difícil es para Ram decirme que me invita a salir? Reí ante la idea.
-Oye Ram- llamé su atención con mi sonrisa burlona, Heather Chandler me veía negando ligeramente con una sonrisa en su rostro, dejando ver sus dientes de un perfecto blanco, que son resaltados por un hermoso labial vino, que hace lucir sus labios más grandes y su piel más clara, algo que ella no nescesita- ¿Tan difícil te es decirme que me invitas a una cita?- sus mejillas tomaron colores rojizos, estaba avergonzado, reía nervioso, intentaba buscar una explicación, sus manos se movían de forma rápida y torpe- Es un sí, iré, nos vemos en mi casa a las 6:30 ¿ok?- hablé dándole un rápido beso en la mejilla, dejando mi labial rojo marcado en ella. Él sólo asintió, saliendo de ahí, no sin antes abrazarme y susurrarme un "gracias" con una sonrisa estúpida en su rostro. Es un chico bastante atractivo, piel bronceada, ojos azules y su cabello marrón, hacen resaltar de buena manera su rostro, también es muy atento, mínimo conmigo, ha sido un gran apoyo a través de los años, no niego en que me atrevería a darle una oportunidad. Siempre ha sido dulce y divertido, desde que nos conocimos en el Kinder Garde.

_Narra Heather Chandler_

Voltee los ojos divertida, al ver a Ram abrazar a Ronnie y irse, mi mirada se posó en Heather Duke, aquella joven de uniforme verde con su cara llena de desgano siempre. Ella es la que se lleva mis burlas y humillaciones, o Tea, como le dice Ronnie (Ya que a Verónica no le gusta nada el té verde, ese apodo se lo ganó Duke, al ser la que menos le agrada) Ella se notaba molesta, bastante seria, su mirada estaba postrada en Verónica, la cuál miraba hacia donde se había ido Ram, con una sonrisa tonta, está celosa, ella intentó algo con Swenney, antes de su operación de senos y después de está, también, pero Ram solo tiene ojos para mi amiga que siempre viste de azul. Heather siempre ha sido una simple posser que necesita atención de la gente para ser feliz ¿porqué no la he sacado del grupo? Me gusta verla sufrir las humillaciones, además, no creo que sea lo suficientemente fuerte como para no suicidarse si le quitó el único mérito que tiene, el cuál es ser popular, por algo ella es el único color secundario de las 4, el verde, el que menos me gusta, apesar de unirse antes que Ronnie, a ella le di el azul por lo dulce y soñadora que era.  "Tea" bufó molesta, nuevamente y se levantó, limpiando su vulgar falda que no deja nada a la mente de hombres que quieren tener un polvo con ella, junto el aquel escote, que oculta solamente dos bolas de silicona cubiertas por una piel ya dañada por el paso de los años.

-¿Dónde vas, Heather?- le dije, cruzandome de brazos, sabía lo que quería, vomitar, parecía un ritual, siempre vomita después de comer.
-Al baño- bramo, yéndose en la dirección a los baños, por lo cuál Mcnamara la sigue, Cinnamon le tiene mucho cariño a Duke, a pesar de ser ella la que menos la soporta, y Ronnie también, Ronnie, por seguir a Mcnamara, no me quedó más opción que hacerlo yo igual. Llegamos a los baños de aquella porquería de lugar, sucios y mal olientes, aún siendo el baño de mujeres. Lo primero que me encontré fue a Duke de rodillas vomitando todo lo que había comido, era asqueroso, un ritual enfermo.
-Vamos Heather, crece, la Bulimia es demasiado del 87- voltee mi mirada hacía el espejo y de mi cartera saque un labial vino tinto, el cuál me pasé por los labios dejando aquel color impregnado en él. Cuándo terminé, busqué atraves del espejo a Ronnie, encontrando que hacia pase del pasillo, ella no los necesitaba, siempre hace lo que quiere, no les molesta a los profesores, para ellos es alguien aplicada y dulce, pero, nosotras sí, por lo que sonreí tontamente, ella siempre a sido muy atenta, con todos- Verónica, ven- la llamé y alzó su mirada del cuaderno, cerrandolo instantáneamente, sacando de este el pase, entregandoselo a Mcnamara, la cuál le sonrió tierna.
-¿Si?- me preguntó acercándose hacia mí, con un pasó rápido pero atractivo, apenas llegó hacía mí, se posó a peligrosos centímetros de distancia, por lo que di un paso para atrás, para evitar tentación de robarme un beso de esos carnosos labios de mi amiga, pálidos y atractivos de forma natural,que ahora por degracia estaban cubiertos de un rojo sangre dejando a resaltar, las heridas marcadas, culpa de su ansiedad.
-Quiero ver como te queda este labial- mencioné con muy poco interés en bueno, Duke, la cual le pedía una menta a Mc, ella se la entregó sin rechistar. Mcnamara siempre ha sido muy pasiva, necesita carácter, no se lo quiero formar yo, no quiero arruinar su inocencia, pero lo ocupa, no debe ser igual que Duke, una perra Faldera.

Nuevamente fije mi vista en Verónica la cuál me sonrió y alzó los hombros, eso significada que no le interesaba, abrí ligeramente su boca y con una pañuelo rojo bordado con un bello encaje negro y con mis Iniciales "HC" en una letra cursiva imperdible, fue regalo de la Señora Sawyer, siempre lo ando en mi bolso, siento que me da suerte. Limpié su aquel labial rojo vibrante,  dejando al descubierto  aquellos carnosos labios con un pálido natural que los hace sumamente atractivos sin ningún color. Mordí mi labio hacia tal pensamiento y empecé a poner el labial vino sobre sus labios, cuándo terminé, ella simplemente me sonrió, aquel rojo le queda espectacular, hace resaltar más sus grandes ojos y sus hermosos pómulos.
- ¿Y que tal?- susurró avergonzada, un tono que la hace lucir adorable, tal vez no le gustaba, es lo que pienso, pero me parece hermoso, antes de que pudiera hablar Duke me quito la palabra.
-No me gusta, se te ve demasiado mal, "Ronnie"- en su tono de voz se notaba la mayor envidia que conocía, Verónica siempre ha sido hermosa. Un hermoso pelo Castaño que siempre lleva a media melena y recogido con dos trenzitas pequeñitas que se unen con un hermoso lazo azul, dejando al deacubierto una colita pequeña, su piel pálida siempre hace resaltar sus sonrojos naturales, sobre todo en sus mejillas, que también están decoradas por muy ligeras pecas esparcidas como estrellas en el cosmo, sus ojos marrones siempre se han visto grandes, aún más con sus largas pestañas negras y sus delicadas cejas marrones, sus labios grandes y con un ligero pálido son adorables, ella no es muy alta, ni muy baja, sus pechos no son una copa A, pero ni una copa E, son una D, son el tamaño suficiente para su cuerpo, su cintura pequeña siempre la remarca con aquel abrigo azul que usa y sus anchas caderas hacen ver que su cuerpo es una maravilla. Eso lo que Duke envidia, la belleza natural de Verónica, ella es una maravilla, pero no la puedes comparar ni con Mc, ni con Ronnie, ni conmigo, las tres somos naturales, ninguna ha llegado a pasar por la sala de cirugías, pero Duke sí, por su aumento de pechos, no, no me molesta para nada, en realidad me parece bien, ocupaba autoestima, sólo que ella los muestra como si fueran mérito propio desde que nació tuvo esos globos como pechos, cuándo no le queda bien a su tipo de cuerpo, es una chica sumamente delgada y alta, cualquier chica de esa descripción, no tiene unos pechos casi talla Triple D (F). Para Duke, estaba bien, pero en realidad se vem falsos y es algo que ella no nota.
-En realidad a mi se me hace muy lindo, Ronnie- mencionó la de amarillo, dulce como siempre, a lo cual Vero solo sonríe y le agradece con un gesto con la cabeza con sus mejillas tomando un rosa, para luego despedirse de nosotras 3 y irse del baño, con un beso en la mejilla, menos Duke, aquella se quitó molesta, alzó sus hombros y se fue, con un andar vivaz y atrevido, no sin antes darme su rosa, entendí al instante, necesita que se la guarde.

_Narra Verónica_

Llegué a mi clase y me senté, en mi puesto de siempre, al fondo en la fila derecha, pero no podia hacerlo bien, a la ventana, ahí estaba él, Mister no-name kid, viendo por la ventana, sonreí un poco algo que él notó y volteó hacia mi dirección.

-Vaya, Verónica- sonaba burlón- ¿Dónde estuviste?- me preguntó sin quitar el tono de burla en su voz, era divertido oírlo hablar así.
-No sé- ignore su mirada divertida y posó su cabeza sobre sus manos, aún viéndome.
-Oye ¿y tu rosa?- abrí mi boca, sorprendida ¿como lo sabía?- Vi al Quarterback dartela- respondió mi pregunta al instante, pero no sin antes quitarle importancia al asunto
-Oh, eso, la dejé en mi casillero- mentí, Heather se la dejó, ella me la va a cuidar hasta que llegué a casa, aquel joven, alzó una ceja curioso, pero le quitó importancia, nuevamente. Pasó un rato, en donde la profesora incluso me vio y simplemente me saludó, creo que ya les es normal que llegue cuando quiera a las clases. Aquellas largas horas se hicieron eternas, hablando de la guerra fría, una guerra entre Russia y Estados Unidos, se le llamó Guerra Fría, ya que nunca se abrió fuego entre ninguno de esos dos países, pero derivaron en las guerras de Vietnam y Corea. Misma mierda que siempre, al fin tocó la hora de salida, un timbre ruidoso y molesto, pero nuestra salvación, hoy salimos un poco más temprano de lo normal, son apenas las 12 del día, pero también hay que ver, es el primer día, nadie quería venir. Recogí mis cosas y me despedí de aquel chico sin nombre, el cuál solo me lo devolvió con una risa burlona y decidí irme el auto de Heather, siempre nos vemos ahí al salir de clases, amenos que cambiemos, pero quedamos de acuerdo desde un día antes.

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¡Y hasta aquí!
Para todos, no tengo nada contra Duke, la amo, pero bueno, es para que todo tenga sentido, confíen en mi