Marcus Speed

Dioses I

En un lugar desconocido:

En los ojos de Vlad se reflejaba la cara de Marcus.

Vlad: Ya estás listo, mi querido muchacho...

Un anciano tuerto y un hombre grande con una melena rubia aparecieron a través de un portal azul detrás de Vlad.

Odin: ¿Sorprendido de vernos, alimaña?

Vlad: La verdad es... que no. Sabía que conseguiríais volver tarde o temprano. Pero prefería que fuera más tarde que pronto.

Odin: ¡Llevamos más de 500 años desterrados en Hel!

Vlad: ¿Vais a culpar a un hombre de morir y aprovechar su única salida?

Odin: Nadie antes había conseguido hacer algo así. Eras Conde y cuando te mataron, de alguna forma llegaste a nosotros y nos sustituiste. Tengo que admitir que para eso hace falta mucha fuerza de voluntad, pero no te mereces este sitio.

Vlad: No fue nada personal, erais los últimos Dioses vivos.

Odin: ¡No pienso seguir tolerando tus insolencias!

Thor: Dejamelo a mí, padre.

Thor alzó su martillo y un montón de rayos golpearon a Vlad, doblegandole de rodillas. Odin se acercó a él y le miró por encima del hombro.

Odin: Hemos necesitado mucho tiempo para reunir el suficiente poder como para volver. Es hora de que nos devuelvas lo que es nuestro.

Odín le agarró la cabeza con fuerza y le empezó a quitar el poder. Su ojo se volvió blanco mientras que un aura rojo salía de Vlad.

Vlad: ¡AAAGGGH, NNNOO!

Antes de que Odin le quitara todo el poder a Vlad, éste le apartó las manos con fuerza.

Vlad: ¡Effugium!

Vlad se esfumó delante de Odín y Thor.

Thor: ¿Voy tras él, padre?

Odín: No. Está débil, y tenemos cosas más importantes que hacer. Ya nos encargaremos de él.

Templo de Wong, China:

Wong: ¿Estás listo para tu primer combate?

Dwayne: ¿Contra quién lucharé?

Wong: Qiang ha ganado a Bo.

Dwayne: Qiang... Apuesto a que cree que no tendrá ninguna dificultad conmigo.

Wong: Y te aprovecharás de eso.

Dwayne: ¿No me deseas suerte?

Wong: La suerte no tiene cabida en este torneo.

Dwayne entró en una gran sala con un suelo de madera precioso. En el centro le esperaba Qiang, y a los alrededores habían otros luchadores observando lo que iba a ser el combate.

Qiang: Wong no te puede ayudar aquí.

Dwayne: Tampoco me ayudó en el Bosque Encantado.

Wong: ¡Luchad!

Qiang fue a toda prisa hacia Dwayne asestandole golpes con una enorme rapidez. Dwayne los paraba todos con los antebrazos.

De repente Dwayne le agarró el brazo a Qiang y éste le metió una patada en las costillas.

Dwayne: ¡Joder!