El Gran Peligro De Ser Devorado

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Narra Rubble:

Todas las veces es lo mismo, el hombre que hace 6 meses me compró me maltrata y me lastima cuando está borracho.

Estuve viviendo con este hombre desde ese fatídico día que me compró, le dió al hombre que me tenía un montón de billetes y me llevó enjaulado a su casa en donde vivía con su esposa, que trabajaba en una fábrica de textiles y el dinero que ella ganaba día a día, el hombre lo usaba para comprar cervezas y no le deja dinero para comprar comida o lo que faltaba

Cuando su esposa iba a trabajar, el hombre invitaba a sus amigos a tomar cerveza en la casa.

Se emborrachaban y tomaban mientras hablaban de sus problemas de economía y que hacían que sus esposas trabajen y ellos se la pasen tomando.

Cada vez que tomaban, el hombre siempre me tenía ahí con él.

Sus amigos se burlaban de lo gordo que estaba y me hacían comentarios muy feos y siempre se burlaban de mí.

Me decían que yo nunca más volvería a ver a mis hermanos y que sería un cachorro tonto el resto de mi vida.

Después de haberse emborrachado lo suficiente, los amigos del hombre se iban borrachos a su casa.

Cuando se iban, el hombre se iba a buscar comida y casi siempre no encontraba nada de comer ya que el dinero que ahorraban lo gastaba en cervezas.

Cuando no encontraba comida, se acercaba a mí y me decía que cuando ya no haya nada de comida, él iba a matarme y comerme.

Eso me dió bastante miedo y rogaba que haya un poco de comida para que el hombre no cumpla lo que me dijo.

Los días pasaban y la esposa del hombre, traía un poco de comida que compraba con el dinero que su hermana le daba.

La esposa del hombre era muy buena conmigo y me daba un poco de la comida que me traía.

Pero tenía miedo de engordar, ya que si me ponía más gordo, el hombre va a matarme y comerme.

Por esa razón, la comida que la esposa del hombre me daba lo vomitaba para no engordar.

Cuando el hombre estaba borracho, andaba con una navaja de bolsillo y me hacía gestos con ella y me hacía creer que algún día me iba a matar.

Yo tenía tanto miedo que en las noches cuando se escuchaban unos pasos, pensaba que era el hombre que me iba a matar, pero afortunadamente no era el hombre.

Mi miedo crecía más y más y deseaba salir de ese infierno y regresar con Ryder y los demás cachorros en donde ese hombre no cumplirá la promesa y que logré matarme y comerme.

No quería que el hombre me mate y me coma, pero no podía escapar de ahí o sería peor para mí ya que el hombre podría matarme si intento escapar de esa casa.

Yo solo espero que alguien me ayude a salir de este  infierno.

Continuará...........................................................................

Mis Huellas A Casa: Secuela De Buscando A ZumaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora