16 - Siendo una perra

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•Alex•

Mi vida antes de Pipes había sido un desierto vacío a comparación de ahora que estamos juntas... Desde que me besó hasta ahora que ya estamos viviendo juntas.
Conocí a sus amigas y ahora a su hermano también, y debo decir que me fue mejor de lo que esperaba, ahora yo era parte de su mundo y eso era algo que me halagaba como pocas cosas en la vida logran hacerlo sin proponerselo. Despertar a su lado, ver su cabello despeinado y luego ese par de ojitos azules me hacía pensar que estaba viviendo en una fantasía, como si todo aquello pudiera desaparecer de pronto, era tan perfecta la vida que llevaba ahora, que si pudiera volver a vivir todo para llegar a su lado, lo haría sin duda.

Quería retribuirle un poco a Piper, poner las cosas en una balanza, si ella me había presentado a sus amigas, yo también de alguna forma la había acercado a Nicky y a Lorna, ella me había presentado a su hermano, y aunque yo no tenía hermanos, tenía una madre que sabía perfectamente cómo reaccionaría al conocer a Pipes... Me gustaría que mi relación con Diane fuera al menos cordial, que me respetara y tuviera al menos un gramo de interés en mi vida para poder presentarle a Piper... Jamás había pensado en ese aspecto, fuera de mi madre no tenía más familia que conociera, ni tíos, primos, abuelos... Nada. Diane jamás había hecho mención de ello, y pensándolo bien, tampoco yo se lo había preguntado, y no era buen momento como para conocer a alguien y luego presentar a Piper... Sin duda alguna, lo más cercano que tenía a mi familia eran Nicky, Lorna y Red, y mi rubia ya les había robado el corazón desde hace un tiempo.

Estaba perdida en mis pensamientos que ni siquiera me había dado cuenta de que mi celular estaba vibrando como loco por una llamada entrante, era Piper y me resultaba bastante extraño, e incluso alarmante ya que estaba en su horario de trabajo y nunca solía llamar en esas horas.

LLAMADA TELEFÓNICA

*Alex: "¿Estás bien Pipes?" le lancé sin más soltándole toda la preocupación que se había apoderado de mí a penas vi aparecer su nombre y la hermosa foto de ella al entrar la llamada.

*Piper: "No me siento muy bien... ¿Podrías venir por mí?"

*Alex: "¿Qué pasa?"

*Piper: "No me siento bien Alex, ¿vendrás o pido un taxi?" vaya que no estaba de humor, y en seguida entendí por qué estaba así.

*Alex: "Voy en seguida cielo..."

FIN DE LA LLAMADA

Me había olvidado por completo que Pipes estaba en su periodo, normalmente esos días son todo un caos, llora por todo, hace drama por todo, y nada le parece... Amaba ser su esclava en esos días y hacerla sentirse mejor, no me la imaginaba estando embarazada, seguramente yo sería la que no dejaría pasar ni uno solo de sus antojos, le daría todo lo que quisiera y más... Mi cabeza divagaba en ese futuro lejano en el que me veía formando una familia al lado de Piper, tener un bebé, una casa propia... Tal vez me estaba apresurando mucho, pero era simplemente inevitable, la amaba tanto que no podía ver a nadie más en ese espacio de mi vida.

Conduje lo más veloz que pude, haciendo solo una parada en la farmacia y comprando algunas cosas que sabía le podían servir al menos para aligerar los cólicos, y al llegar a la puerta del bar vi a un chico que hablaba con Pipes alejarse en el sentido contrario a dónde yo me acercaba, me parecía bastante conocido pero no recordaba quien era o de dónde lo había visto, pero al menos había acompañado a Piper mientras esperaba por mí.

PLEASE, DON'T LEAVE...Donde viven las historias. Descúbrelo ahora