Odio la manera en la que las películas y los libros nos hacen pensar como será el amor de nuestra vida. Lo odio por qué en serio nos hace pensar que algún día va a ser de la manera en la que nos lo dicen. En la que te llena de ilusiones. Y definitivamente odio la manera en la que esperas que se haga realidad.
Y cuando comienza a suceder como en tu película de romance favorita, es cuando permites que te rompan el corazón.
Por qué tal vez sentiste esa vibra mágica al tocar por accidente su mano. O tal vez te temblaron las piernas cuando tuvieron contacto visual durante unos segundos, que para ti fueron eternos. O cuando sentías como tú corazón casi se salía de tu pecho cuando él te sonreía de lejos.
Yo deje que eso me pasará una vez, y eso solo provocó que me doliera el corazón a cada movimiento que hacía. Eso hizo que con cada respiración que hiciera, provocará un llanto en mí que podía durar más de una hora.
Pensé que él iba a ser mi príncipe azul, porque yo sentí todo lo que mi película de romance favorita decía. Sentí como me faltaba el aire cada vez que me daba un bonito piropo. Sentí esas mariposas en el estómago cuando nos abrazamos. Y podía permanecer todo el día viendo sus hermosos ojos.
Él, se supone que también estaba enamorado de mi. Y yo también lo podía sentir. Durabamos horas hablando. Hablando de nuestros miedos. Hablando de nuestros sueños. Hasta un día llegamos a hablar de que nombres llevarían nuestros futuros hijos, que ingenua fuí.
Recuerdo que jamás me despedí de él. Jamás le di una último adiós. Jamás le dije lo importante que fue para mí, y llegué a pensar que esa fue la razón por la cual se fue, otra vez, que ingenua.
Todavía recuerdo aquel día que lo ví con ella. Con aquella chica que pudo hacerle mejores promesas que yo. Aquella chica que lo enamoró más rápido de lo que yo lo estaba haciendo. Y que ahora tiene su corazón en sus manos.
Al inicio yo solo lloraba. Después solo gritaba maldiciendo su nombre, al preferiría a ella. Y ahora ya no siento nada, él ya no puede hacerme daño.
Y puede que esto suene de lo más tonto, pero gracias a él puedo ver que las películas de romance no son ciertas. Pero así como él pudo encontrar a la persona que superó a todas las demás, yo voy a poder encontrar a la mía.
Y ahora eso suena estúpido, caer en el mismo círculo vicioso. Solo para complacer a un escritor que escribe estúpidas historias de amor, llenando de ilusiones falsas a los corazones de los demás.
Y demostrando que cualquier persona. Cómo las que encontramos en las historias de amor. Que aún después de haber reparado su corazón roto, puede tener el valor de dejarse enrredar en otra historia de amor. Otra historia que te puede dejar peor de lo que ya estabas. O tal vez por fin caer en la historia correcta. En la historia en la qué tal vez peleen y se enojen, pero al fin y al cabo, va a ser la historia en la que podrás vivir toda tu vida.
Y así, tal vez solo así, vas a poder encontentar a tu escritor o a tu director favorito, dándote él una cachetada con guante blanco de que fuiste una ingenua más que siguió creyendo en el amor.
-TammyMHP