-¡Vamos Erick,será sólo unas cuántas horas!
-Ya dije que no Chris. Sabes muy bien,que no me gustan las fiestas.
-Por favor,hazlo por tu mejor amigo- El castaño llevaba al rededor de treinta minutos queriendo convercer al ojiverde,para que lo acompañe a una fiesta.
Luego de diez minutos más, Erick terminó aceptando,cansado ya de las súplicas de su amigo.
-Me las tendrás que pagar,Vélez.
-¡Gracias,gracias,gracias!
Pasó una hora,y los dos muchachos ya estaba preparados.
Se subieron al auto del castaño,y en diez minutos ya se encontraban en una casa gigante.
La música se escuchaba en toda la cuadra;las luces de colores lograban marear un poco al menor;el olor a alcohol y cigarrillo se colaba por sus fosas nasales.
Y como era de esperarse,ni siquiera se habían cumplido los diez minutos y Christopher ya se había alejado,dejando sólo al cubano.
Erick maldijo en voz baja,y se encaminó al patio de la casa,chocando con mucha gente que ni siquiera conocía en el transcurso.
Cuando llegó, no había mucha gente. En un rincón estaban dos personas comiéndose entre sí. En otro un grupo de gente,para ser más específicos eran cinco chicos;fumando,quien sabe que cosa. Y en una banca,se encontraba en chico con pelo rizado.
Sus manos estaban en su cara,tapandola.
Erick se acercó.
Cuando llegó al lado del rizado,este último ni siquiera había notado su presencia.
Se sentó en el espacio que quedaba de la banca. El rizado al notar su presencia,sacó sus manos de su cara,y limpio lágrimas que salían de él.
-¿Me puedo sentar aquí?
-Ya estas sentado.
-Cierto.
Entraron en un silencio un poco incómodos. Lo único que se escuchaba eran las risas de las personas que estaba en el patio,y la música de la casa.
-No es de mi incumbencia, pero no me gusta ver a la gente llorar ¿Puedo saber,porque lloras?
-Tú lo dijiste, no es de tu incumbencia.
El ojiverde bajo la cabeza,mirando sus manos.
-Está bien,supongo.
-Mí novia me engañó- soltó el rizado,luego de un pequeño rato.
Siguió soltando más lágrimas,sintiendo sus manos mojadas,por el intento de limpiarse.
-Uh,¿quieres hablar de eso?
-Ni siquiera nos conocemos,¿Porqué le contaría mis problemas a un desconocido?
-Erick - el ojiverde le extendió su mano,para estrecharla con el rizado.
-¿Eh? - el rizado no entendía.
-Me llamó Erick,¿y tú?
El rizado le extendió su mano,agarrando la de Erick - Joel.
-Bien,ya nos somos desconocidos. ¿Ahora me quieres contar?
-Mí novia,o bueno, Ex-novia,me engañó. Y yo mismo lo descubrí.
-Umh,yo nunca tuve novia;aunque soy gay, asi que sinceramente, no te entiendo. Pero no merece que tú llores por ella. Apuesto a que hay mucha gente que muere por tenerte.
-Gracias,supongo.
Así fue como todo comenzó.
Muy simple ¿no?.
Te encontré cuando tu corazón estaba roto,llené tu taza hasta que se desbordó.
Me costó tanto mantenerme cerca.
Tenía miedo de dejarte sólo.