CAPITULO 9 - INSOMNIO Y VOCES

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El reloj de marcaba las 3:00 am, el frío empezaba a hacerse más fuerte por el invierno. El insomnio simplemente estaba ahí, afectando mi razonamiento durante el día y la noche. Las voces eran ya no se volvieron claras que hace unas horas, no puedo entender que dicen, susurrando cosas horribles es lo más seguro.

Decidí salir de mi cama, todo el cuarto estaba a una baja temperatura así que no importaba si me dirigía hacia la parte de la terraza.

Antes de salir, agarré tres cosas: cigarrillos, encendedor y mi antigua grabadora, era mejor hablarle mis penas a un simple objeto porque no te juzgará ni te dirá que necesitas tomar analgésicos.

Puse el cigarrillo en mis labios y lo rápidamente encendí para que el viento no se encargara de apagar la llama.

Apreté el botón.

-Se porque hago esto, sigue pareciendo tonto si nadie que escuche esto pero es mejor que alguien me escuche así de jodido-.

Inhale y retuve el humo.

-Hoy simplemente fue lo mismo: no dormir, intentar dormir al menos 3 horas, ir a la universidad, salir de ella, intentar dormir. Es un ciclo completo en donde ningún sentimiento que haya simplemente no lo entiendo y por ende simplemente no existe para mi, es cansado. Duele-.

-Casi cumplo 20 y sigo exactamente igual, solo y sin entender. Me da curiosidad si en realidad podré cumplir esa promesa, también creo que tengo un poco de miedo-

-Las luces de la ciudad son hermosas, me gustan verlas por tanto tiempo. A pesar de que las luces estén ahí por personas que las necesitan, se ve lo solitaria que puede ser una ciudad. Mamá mencionó que se iría con su prometido en dos días, asegura que ya es tiempo de hacer una nueva vida, es muy tonta. No importa lo que pasa, siempre me dejarán solo-.

Pausé por un momento, deseo acabarme este cigarrillo.

Al cabo de unos 5 minutos encendí uno nuevo y seguí con lo mismo.

-Sigo vagando como siempre, tapando la mitad de mi rostro con una bufanda, las voces preguntan por mi nombre pero el dolor de cabeza hace que olvide algunas cosas, no recuerdo mi nombre. Es mejor no recordar nada y solamente pasear por las calles-

-Estoy tan cansado pero no puedo dormir, me duele el seguir pensando, no importa. Deseo ser un fantasma-.
Es mejor seguir adentro, apagué el cigarrillo de un pisotón y entre a la habitación.

Ahí me encontraba, tirado en el piso con los ojos cerrados y con el frasco amarillo.
apreté el botón de la grabadora
-Al final cumplí con mi promesa pero sigo sin dormir, veo lágrimas pero yo no las siento, veo una cara triste pero no entiendo el porque esta ahí, ya no importa que en estos momentos empecé a tener sueño-.

Dejé la grabadora a un lado y me metí a la cama, al fin puedo dormir y la única voz que escucho es la mía.

"Frases e Historias de una vida Adolescente"Donde viven las historias. Descúbrelo ahora