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En estos ultimos días habia podido notar varias cosas, tanto de el reino como de el que lo gobernaba.

Variaba de cosas tan simples como que los dos ultimos días de la semana se servian unica y exclusivamente fresas en el postre ya que eran las favoritas del rey y desde pequeño conservaba dicha costumbre. Hasta cosas como el que las ejecuciones de aquellos que el rey llamaba traidores, preferia hacerlas él, y para colmo, de la peor manera posible para que estos sufrieran lo suficiente frente a los ojos de los demás de tal forma que a estos se les quitaran las ganas de tratar de hacerse los listos durante un buen tiempo.

A mi parecer, no era algo en lo absoluto bueno, y mucho menos, ya que al ser sus sumiso actual, tenía que estar presente en cada una de las ejecuciones, viviendo con el miedo de que la proxima, fuera la mia.

Estaba realmente sorprendido, ya que había durado más de lo que mi yo anterior habría pensado. Más de lo que se tenía planeado que durara el debil y delgado chico albino.

Cualquier otra persona en mi lugar estaría feliz por no haber muerto. Pero a decir verdad, yo no lo estaba.

Ahora mismo me era totalmente desgastante pensar en cosas así cuando que tenía dos problemas muy grandes.

El primero, no entendía la actitud del rey.

De cierta forma, me era totalmente extraño que pasara de ser un tipo bruto y desconsiderado, a ser alguien preocupado y amable.

Claro, no  pasaba muy amenudo esto ultimo, ya que el papel de mounstruo era dificil de quitarselo.

Por eso mismo cuando sacaba enfrente mio ese lado suyo, era inevitable terminar desorientado y confuso.

Desde aquel día que me dijo que tenía que comer, no a vuelto a querer tocarme, si a caso, cuando llega de los lugares a los que va, quiere que le masajee los hombros o la espalda, de ahí nada más, e incluso, las unicas veces que lo veo son mañanas y noches, y otras, como esta y que son raras, decide que lo acompañe a los lugares a los que va.
Eso si, con la ropa que me designan y un collar como si fuese un perro.

Al principio, para mi era de lo más vergonzoso andar por las calles vestido así ya que sentía que todo mundo me juzgaba con la mirada y que inclusive, se burlaban de mi. Pero al igual que todo, con el tiempo comprendí que todo, absolutamente todo, estaba para la protección del rey y lo que es del rey.

Básicamente nos marcan cual ganado para que al estar alguien cerca del rey y no porte la ropa que se seleccionó el mismo día, este sea asesinado, pues se cree que es algún tipo de espía o algo por el estilo.
De igual forma, es para protección de su personal del mismo rey, por ejemplo, antes al pasar por las calles recibía golpes o insultos. Ahora al pasar solo mantienen su distancia, ya que no quisieran ser llevados a los calabozos solo por que se quisieron pasar de listos con el sumiso del rey.

-Donghae, ven aqui.- fuera por que él me habló o por qué la señora que estaba delante de él mostraba una cara  totalmente aterrada me acerqué lo más rápido posible, al estar ahí me di cuenta de la situación. La señora estaba vendiendo artículos del reino vecino.

-¿Ya hemos mencionado qué se tiene prohibida la entrada de otros comerciantes en mi reino cierto?. Preguntó. A lo que solo me limité a asentir con la cabeza y bajar la mirada. -¿Conoce los castigos que le serán aplicados por entrar a mi reino y tratar de vender cosas de otro?

-Yo no sabía que no estaba permitido.

-Manden una carta al reino vecino de que si no pagan para que liberemos a esta comerciante, será decapitada en tres días, es todo.

Ante lo dicho los guardias que lo escoltaban inmediatamente tomaban a la señora y procedieron a esposarla.

-No creo que pagen por que se les devuelva. Comenté, a lo que el rey solo sonrió y murmuró algo que me pareció a "es bueno que conserven la esperanza" de una manera que no me sonó en lo absoluto, bien intencionada.

Al llegar al reino, pasó lo que esparaba, golpearon a la pobre mujer hasta que no pudo suplicar más por piedad y al final, la arrastraron hacia los calabozos, tal y como lo había indicado el rey.

En cuanto a mi, solo me dirigieron hacia la mesa donde comemos, para ahí esperar a que el rey llegara y que este decidiera lo que querían comer así sea algo totalmente distinto a lo que los empleados hubiesen preparaso.

Yo por mi parte, me limité a pararme  a un lado de donde siempre se sentaba a comer el rey. Cansado de la situación. Y es que, ¿Qué podía hacer a parte de tratar de olvidar y darme el lujo de descansar mi mente por unos minutos? Me quedaba claro que no podía estar compadeciendo a aquella pobre señora. Es más, estaba seguro de que si hablaba tratando de abogar por ella, yo terminaría con el mismo destino que ella.

Por eso era mejor quedarme tal y como estaba ahora. Sin hacer nada.

El sonido de unas pisadas anunció que el causante de todo mi dilema mental, ya se encontraba en la habitación.

Inmediatamente me incliné en señal de respeto, a lo cual el solo pasó por mi lado y se sentó.

-Y bien ¿Qué prepararon para mi? Que saben que una ejecución no es nada fácil.

Mentiría si dijera que esas palabras no provocaron en mi un nudo en el estómago de pura rabia, y es que, ¿Quién tenía tan poco corazón coml para decir eso? Se le notaba que estaba más que ansioso por asesinar a esa pobre mujer.

- Heechul, lleva a Donghae a arriba, me es asqueroso que esté con esa cara cuando que voy a ingerir alimentos.

Antes de percatarme de lo que estaba pasando tenía a Heechul tomandome de la mano para sacarme de la habitación, en la que, al voltear, tenía a un rey con el entrecejo fruncido y una mirada que no sabía muy bien como decifrar.






Mmmiren, les explico, yoo, ya no se que escribir hsbsjaha para ser sincera quiero escribir un montón de fanfics peeero, se que debo seguirle a este, peeeero, pues me dan mis ataques de panico amixes, que quieren, Y NO ya no voy a hablar con floresitas por que en examenes ando y palabras fuertes ameritan. unu

En fin uwu capitulo DEMASIADO corto, pero capitulo sisisi.

Posdata: ni de chiste esperen actualización pronto uwu, o tal vez si, o tal vez fanfic nuevo, nuuunca lo sabremos e.er chao ❤👄👅

Corrupting the sweetness. •EunHae•Where stories live. Discover now