Brian despertó en su cama sintiendo una fuerte resaca, maldiciéndose por dentro hasta voltear encontrándose con su amigo aun medio dormido a su lado babeando la almohada, y rio quitándoles unos rubios mechones del rostro viéndolo despertar.
- Ummm... Buenos días
- Buenos días
- Oh dios, mi cabeza... ¡Oh dios, mi trasero!
- P-Perdón...
- No importa ¿Hoy tenemos ensayo?El guitarrista vio como con esfuerzo el batero se levantó desperezándose vagamente mientras volvía a vestirse, cada movimiento era despreocupadamente sexy, demasiado despreocupado, no parecía avergonzarle ni mucho menos preocuparle el hecho de que hayan vuelvo a tener un encuentro íntimo, en ese momento lo entendió, como un baldazo de agua helada Brian comprendió que para Roger aquello no era más que entretenimiento casual al igual que con sus múltiples amantes, de hecho recordaba vagamente haberlo visto anoche con una chica en su presencia, algo muy alejado del fuerte sentimiento amoroso que él le tenía.
- Rog... Roger disculpa pero creo que será mejor que te vayas
- ¿Qué?
- Es que... Tengo cosas que hacer y...
- Sabía que te arrepentiríasRoger lo miro muy serio y terminando de vestirse salió rápidamente sin esperar que lo acompañen a la puerta, Brian sintió un remolino en la boca del estómago, que bien sabia no era a causa del alcohol, el darse cuenta que acababa de arruinar la amistad con su mejor amigo solo por un par de noches de sexo casual le generaban más nauseas que cualquier resaca.
El rubio camino a paso rápido con las manos en los bolsillos y la cara prácticamente cubierta en totalidad por su bufanda, no hacia tanto frio pero no tenía ganas de cruzarse con nadie, solo quería llegar a su casa, estaba enojado, tenía ganas de romper algo o golpear a alguien, acababan de echarlo temprano como a una puta barata, por primera vez sabía lo que se sentía estar del otro lado de la situación y se odiaba dándose cuenta de eso, sintiendo los ojos mojados se echó a correr para llegar lo más pronto posible y que nadie viera sus lágrimas.
Ese no fue un buen día para ninguno de los dos músicos, y menos cuanto más se acercaba la hora de volver a verse las caras en el ensayo de esa misma noche. Freddie llego siendo recibido, nuevamente, por un silencio mortal, John lo saludo con la mano en alto sentado con su bajo, mientras Brian y Roger parecían zombis mirando a la nada mientras practicaban con sus instrumentos en modo automático, el cantante volvió a mirar al bajista pidiéndole una explicación y este se encogió de hombros.- Veo que tenemos algo serio aquí, no creo que podamos presentarnos en este estado, un día son los mejores amigos del mundo, al otro se odian, y así continuamente ¿Qué rayos está pasando con ustedes, se puede saber?
Ambos músicos parecieron salir del trance mirando a Freddie quien se posiciono molesto entre la guitarra y la batería, estos cruzaron miradas un momento frunciendo el ceño y volvieron a desviar la vista ofendidos sin ganas de tratarse.
- De acuerdo, si así lo quieren, Deacy tu encárgate de rulos
Inesperadamente Mercury enojado tomo del brazo a Roger levantándolo se su lugar tras la batería, prácticamente arrastrándolo a la fuerza fuera de la sala, mientras Deacy mas amablemente retuvo a Brian apoyando una mano sobre su hombro indicándole que se quedara allí con él.
- ¡¿Freddie que mierda estás haciendo?!
- ¡Lo hago por el bien de la banda, querido, ahora me vas a decir qué demonios pasa entre ustedes dos!El cantante retenía al baterista en un cuarto contiguo a la sala de ensayo apoyándose contra la puerta para que éste no pudiera escapar, sabía muy bien que ese melodrama entre los dos no iba a terminar hasta que alguien más le pusiera fin, y ese alguien pensaba ser él.
- Son cosas entre nosotros, no tengo porque contarte nada, Farrokh
- Se acostaron ¿Verdad?
- ¡¿Q-Que?! ¡¿Cómo sabes eso?!A Taylor se le caía la cara de vergüenza, asombrado ante la acusación tan certera del cantante ya ni una pisca de fastidio le quedaba, mientras Freddie lucia tan serio que daba miedo, jamás lo había visto de esa manera.

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El Modelo
عاطفيةBrian tuvo una gran idea que le permitiría ejercer su hobbie por la fotografía y al mismo tiempo complacer la nueva 'faceta' de su mejor amigo Roger. Lo que no sabían es que estaban jugando con fuego.