Limando Asperezas

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00:29 hrs, ALGÚN BAR DEL CONDADO.

- No puedo creer lo que me estás diciendo, Hizashi. 

- Yeah, well... No estaba en mis planes que la situación terminara así.

- Eso puedo verlo. Por eso estás aquí, llenándote de alcohol el sistema. ¿Como vas a cuidar a Shouta en ese estado? Ni siquiera asumas que te voy a dejar conducir.

- No me regañes, Nemuri-chan. Primero, no estoy tan alcoholizado. Segundo, Shou estará durmiendo seguramente toda la noche de hoy y parte de mañana, aún sigue bajo las terapias de Recovery Girl.- respondió Mic, dando un resoplido antes de dar un largo trago a su bebida. La realidad es que tras lo sucedido la noche anterior, ni él ni Aizawa habían cruzado palabras salvo para lo estrictamente necesario; el pelinegro le evitaba la mirada y en general optaba por dormir antes que cualquier cosa. 

Y Hizashi intentaba ser comprensivo, pero su impresión tras aquel beso atropellado le creaba constantes accesos de paranoia, no sabía si el otro estaría fastidiado, molesto o algo parecido. De modo que, siguiendo el consejo de su amiga Midnight decidió al menos por esa noche darle un poco de espacio. "Volveré para la mañana y te llevare de nuevo con Recovery Girl ¿de acuerdo?" fue lo que dijo antes de dejar la casa del héroe convaleciente que apenas se limitó a asentir en silencio sin apartar la vista de su mascota, que dormitaba sobre su regazo. Ya conocía bien al pelinegro y sabía que esos mutismos largos sólo podrían significar que estaba o muy molesto o muy concentrado en otra cosa, mas no se atrevió a preguntarle directamente a fin de no empeorar la situación entre ambos. De modo que hizo lo mas razonable: darle su espacio para pensar mientras él hacía lo propio. 

- Oye, cielo, dime una cosa. ¿Nunca le has dicho a Shouta sobre qué es lo que realmente sientes?

- Se lo digo todo el tiempo. - gruñó desganado apurando el ultimo sorbo de whisky.- desde que estábamos en la academia, como estudiantes.

Nemuri dio un resoplido. - Quiero decir, ¿alguna vez se lo has dicho en serio? Sé cómo eres y sé que mas de una vez le has hecho cumplidos que terminan en jugarretas, no me sorprende que Aizawa reaccionara como lo hizo después de eso.

- Ya vas a regañarme. - protestó débilmente.

- Entonces no se lo has dicho tal cual. No puedo creer que seas tan cabeza dura, Hizashi. 

- ¿No estás siendo muy cruel conmigo, Nemuri-chan? Simple curiosidad.- Preguntó, mirándole un poco mal, con la barbilla apoyada sobre la superficie de la barra. 

La mujer a su lado frunció los labios; en el estado en el que se encontraba Hizashi iba a ser difícil hacerlo entrar en razón, así que decidió usar otro medio.

- De acuerdo, lindo. ¿Que te parece si vas a tu casa, te das una ducha y te vas a dormir? - dijo, poniéndose en pie y arrastrándole consigo. Para la heroína estaba claro que Mic ya tenía muchas copas de más como para tomar decisiones coherentes. - No estás pensando bien en ese estado y lo vas a empeorar. Quien sabe, quizá mañana puedas hablar con el con más calma, pero por amor a todo lo sagrado, sé directo con él.- añadió, metiéndolo a su coche y llevándole de regreso a su hogar, donde lo dejó reposar en su cama, sacándole el calzado y la chamarra de piel, para que durmiera más cómodamente. Hizashi, rendido por el alcohol y el cansancio de los días cuidando de su mejor amigo, terminó sucumbiendo al sueño.


09:29 am


Aceleró el paso tanto como pudo, molesto consigo mismo por haber dormido más de la cuenta y porque la resaca no dejaba de taladrar su cabeza a causa de sus excesos. Temía que el azabache se hubiera despertado antes de que llegara y no pudiera ayudarle con su aseo y demás. 
Por suerte para el rubio, tanto el héroe como su gato seguían durmiendo plácidamente haciéndole dar un suspiro de alivio. Aprovechó para tomar alguna pastilla para apaciguar la jaqueca y reposar en el silencio reconfortante de la casa de su amigo un rato mas, al menos hasta que los maullidos del gato le dieron aviso de que seguramente Shouta ya había despertado. 

Se levantó y fue a verle, tratando de seguir el consejo de Nemuri y le sonrió con el gesto habitual.

- Good morning, my friend. ¿Como te sientes?- saludó antes de acercarse al pelinegro, que le miró de reojo.

- Me siento mejor, gracias.- Respondió, con la taciturnidad de siempre. No puso resistencia cuando el rubio le asistió para los menesteres de aseo y cuarto de baño, aunque prefería no hablar mientras tanto. 

Y Hizashi lo entendía bien. Mucho más después de lo sucedido entre ellos. Luego de haberle ayudado a desayunar, permanecieron en silencio, unos minutos mas, mientras la TV transmitía el noticiero de la mañana. 

- Oye..- Dijeron ambos, prácticamente el unísono. Shouta le miró haciéndole un ademán para que fuera él quien continuara. 

- Sobre lo de la otra vez. Eh...- Dudó unos momentos, el recordar el calor de la boca del azabache contra la propia por poco le hace arrepentirse de haberse atrevido a tocar el tema. Tomó un poco de aliento antes de continuar. - Yo... lamento haber hecho algo tan atrevido. Te repito que no era mi intención causarte un disgusto.

Shouta le miro atento, para luego desviar ligeramente la vista.

- No estoy enfadado.- Dijo, sencillamente. Eso hizo que el rubio alzara las cejas.

- Ah...¿no?

- La verdad es que de todo lo que podrías hacer para hacerme sentir mejor, un beso era lo que menos me esperaba. No era necesario llegar a tanto. Eres un cabeza hueca muchas veces, pero sé que no lo hiciste con mala intención.

- Wait, wait. No lo hice solo por eso.- alzó las manos, sacudiéndolas ligeramente. Ahora era Shouta quien le vio un poco desconcertado. Sin embargo la mente del azabache fue mas sagaz y no pudo evitar hacer un poco de distancia por acto reflejo, alzando la mano enyesada.

- Espera. No me digas nada. No... creo que no estoy listo para hablar de eso. Lo siento.- dijo, con voz mas confidente. Hizashi presionó los labios, incómodo, pero por respeto a su amigo, le dio el gusto de mantenerse callado.

- No quiero que nuestra amistad se arruine por apresurar nada, Zashi. - habló con toda franqueza.- No tengo que repetirte algo que ya sabes. Te estimo, bastante. Y desde que eso pasó mi cabeza es un desastre fuera de lógica. No fue el mejor de los momentos en realidad; por favor, te pido un poco de tiempo. Y te doy mi palabra de que responderé debidamente a lo que quieras decirme al respecto. Aun así, si todavía la quieres, ten por seguro que mi amistad sigue vigente para ti.

Aquella respuesta le causó una mezcla de alivio y pesar, pero como bien dijo Nemuri, tomaría tiempo si quería ser tomado en serio. A cambio, le entregó una sonrisa cálida y un breve abrazo, que aunque Aizawa no pudo corresponder en forma, se lo hizo sentir al reposar dócil el mentón sobre su hombro.


El problema entre ambos se había resuelto. Y Hizashi no podía estar más feliz. Al menos por el momento.





**********Fin del Capítulo 4**********

Muchísimas gracias a quienes  han votado por esta historia! Espero poder actualizar en breve!


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