capuccino. { taennie }

1.

taehyung.

Tristeza.
Solo era capaz de sentir eso. No había día en el que no despierte llorando, en el que deje de sentirme tan miserable por dentro. ¿Qué sentido tenía seguir viviendo, haciendo la misma mierda de siempre?
Estoy cansado, estoy aburrido. 
Aburrido de la monotonía, de los días grises.
Aburrido de mi aburrida vida, de mis bajones, de esta depresión que tengo desde hace años.
Aburrido de la ciudad, del trabajo, hasta de mi novia.

Yeontannie era mi único rayo de sol dentro de esta tormenta. Él le ponía color a mi vida. Él me hace tan feliz. Es real esos consejos que dan acerca de tener mascotas. Dejé de sentirme tan solo después de que esta bolita peluda con patas llegara a mi vida. Recuperé un poco de felicidad, aquella que había perdido hace muchos años atrás.

Déjenme hablarles un poco de mí.
Me llamo Taehyung. Me crié desde niño con mis abuelos, puesto que mis padres no me querían en sus vidas, ellos querían seguir viviendo como si fueran solteros, viajando por todo el mundo. Mi abuela fue la mejor madre del mundo y, mi abuelo, el mejor padre. A la edad de 16 años, fallecieron ambos en lo que yo estaba en la escuela. Me enteré a media mañana, habían tenido un accidente automovilístico.
Ese día, sentí que gran parte de mi vida se había ido con ellos. Perdí a las dos únicas personas que me amaban con mucha intensidad, que apoyaban mis sueños de ser artista. Las dos únicas personas que me querían por quien era y nunca me juzgaron. Las dos personas más importantes de mi vida, muertas.

Estuve devastado por meses. Ese día supe que todo sería distinto. Me rehusaba a creer que estaban muertos. Todos los días, salía de la escuela con la esperanza de llegar a casa y oler la deliciosa comida que hacía mi abuela, la cual, estaría ahí para recibirme con los brazos abiertos, como siempre hacía. Tenía la esperanza de que mi abuelo entraría por la puerta principal, quejándose del tráfico, como siempre solía hacer.
Pero no sería así. Y es lo que más me dolía.

Todas las noches, llorando hasta quedar dormido. ¿Acaso este era un castigo de la vida?
¿Qué hice mal? ¿Acaso alguna vez me porté mal con ellos para que la vida me los arrebate de un día para otro?
Terminé la escuela a los 18, el día de la graduación, vi como todos mis compañeros tenían a sus familias llorando de felicidad por ellos. Todos tenían padres y hermanos orgullosos quienes los abrazaban. En cambio, yo era el único que no tenía ningún familiar ahí.
Fue una mierda. Recibí mi cartón de graduado y salí del lugar lo más rápido posible, con lágrimas en los ojos. Se sentía horrible no tener a alguien esperándote con los brazos abiertos. Era devastador no tener a alguien que me diga "Me llenas de orgullo, Taehyung".

Desde que mis abuelos partieron al otro mundo, he intentado suicidarme varias veces, todo con tal de ir al lado de ellos. Al lado de mi familia. Pero muchas veces no pude, la cobardía me ganaba, además que mis pensamientos carcomían mi mente. ¿Qué pensaría mi abuela si me viera en este estado tan patético, buscando acabar conmigo? Estaría realmente decepcionada. Yo sé que ella quería que yo fuese un gran pintor, cantante o saxofonista.
Mis abuelos siempre fueron mi motor para seguir adelante.
Pero, sin ellos, ¿para qué querría seguir viviendo?

La única vez que casi muero fue a los 20 años. Me paré al centro de la pista, cuando un bus iba a pasar. Pero vi a un cachorrito que iba a ser atacado por tres grandes perros. Vi que el pequeño animal me miraba con ojos de súplica mientras escuchaba el llanto de este. Me acerqué rápidamente hacia donde estaban los animales y tomé al más pequeño en mis manos. Espanté a los otros tres, y cuando estuvieron lo suficientemente lejos, revisé al que tenía yo. Por suerte, no tenía ninguna herida; solo estaba un poco sucio. Me fijé en su cuello y no tenía ningún collar, lo que significaba que no tenía familia, así como yo. Fui rumbo a casa con el pequeño animal, no sin antes ir a la veterinaria por comida para cachorros y shampoo para perros.
Ese día fue cuando mi hijo llegó a mi vida.

Los años pasaron y terminé la universidad con 25 años, logré graduarme como artista. En la universidad, conocí a una chica, con la cuál estaba comprometido. Se llamaba Joy, ella estudiaba la misma carrera que yo. Realmente la amaba.
Una noche, la había dejado en su casa después de haber estado juntos toda la tarde en una cita. Ella vivía sola, así como yo.
Al día siguiente, su madre me llamó llorando. Me tensé al escucharla tan mal, ¿habría pasado algo malo?
Su esposo le quitó el teléfono y me dijo que la noche en la que dejé a Joy en su casa, horas después habían entrado para saquear la casa, y que la habían matado, debido a que había llamado a la policía.
La vida me castigaba nuevamente. Primero mis abuelos, después mi prometida...
¿Por qué no era yo quien moría? ¿Por qué?
Habíamos planeado una vida juntos ya. Teníamos tantas metas para el futuro.
Me sentía bien con ella a mi lado, era una gran mujer. Me hacía tan feliz, hacía que me sienta vivo nuevamente...

Los años pasaron, había perdido ya a tres personas importantes para mí. No me encariñaba tanto con las personas desde ese entonces. Aprendí que nadie es eterno y que todos me iban a dejar tarde o temprano, y realmente quería evitarme más dolor.
Tuve más novias hasta la actualidad, pero ninguna se compara con Joy... Nadie me ha hecho tan feliz como ella, nadie hacía que mis días tengan color. No he amado a nadie tanto como la amé a ella.

Actualmente, trabajo como maestro de artes en la universidad más influyente de Corea. Sigo viviendo solo con mi cachorro. Aún no dejo de llorar por las noches. Me volví adicto al café. También tengo una novia, su nombre es Irene y tiene 28, como yo. Pero, realmente, es aburrida. Solo soy su pareja para tener un poco de compañía y cariño, pero no la amo. No quiero sentirme solo. Aunque ya llegará el día en que me aburra y termine con ella, si es que ella no lo hace primero.
Mi meta es morir. Solo estoy esperando a que Yeontan parta al cielo para perritos. Sin mi pequeña fuente de felicidad, ¿para qué me mantendría vivo? Odio mi vida, odio todo lo que tuve que pasar, odio mi trabajo, odio llorar cada noche antes de dormir, odio lamentarme hasta el día de hoy, odio sentirme tan miserable.