O C H O

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Clark suspiraba y entrecerraba los ojos, su respiración comenzaba a acelerarse poco a poco. Apretó las sábanas de un momento a otro y miró en la parte inferior de él, encontrándose un bulto entre las sábanas.

Quito despacio lo que lo cubría y vio al menor, quien gustosamente trabajaba con su miembro.

— B-Billy — el mencionado lo miró sin dejar a un lado lo que hacía —. Oh~ — soltó un ligero gemido el mayor apretando las sábanas.


— Clark? ¿Clark?

El Kent abrió los ojos encontrándose al menor quien lo miraba confundido desde la puerta.

— ¿Estas bien Clark?

El mencionado rápidamente tomó una cobija y tapó su parte baja carraspeando nervioso.

— S-Si, sol-sólo me sentía...mal — contestó sentándose.

— ¿Quieres que te traiga agua? — preguntó Billy a lo cual Clark asintió y el ojiazul salió de ahí.

El pelinegro salió de su cama para entrar al baño, mirando el problema que tenía bajo de su pijama.

Y sin mencionar lo que pasaba en su mente, tanto revuelto que tenía.

«Clark, eres un estúpido», entró a la regadera para ducharse con agua fría «¡Es sólo un chico!»

Se escuchó un ligero golpe en la puerta:— Estás en la ducha?

— E-Eh? Ah s-si, ahora salgo.

Lo más rápido que pudo, intento bajar la erección que tenía. Pero al recordar la mirada de Billy le era imposible.

— Te veo en la cocina — agregó y escuchó como el menor se fue.

Cuando termino, salió a cambiarse y de paso a la cocina, donde efectivamente Batson se encontraba sentado y en el suelo estaba Tawny con su taza de leche.

— Buenos días papi — sonrió Billy mientras comía cereal.

— Buenos días — contestó mientras iba por una taza de café.

— Hoy es sábado — agregó el pelinegro menor —. Podríamos salir, no crees? Tiene tiempo que no salimos.

— Y dónde quieres ir? — regresó a sentarse.

— No lo sé, tal vez al cine? — carraspeó —. O podríamos ir comprar comida para Tawny y-

Clark se fijó en los labios del menor, en su comisura tenía una pequeña gota de leche que le era visible. Trago saliva fuertemente mientras trataba de olvidar todo y sólo centrarse en lo que le decía.

— ¿Tú que dices?

— Um — se quedó estático —. S-Si, si quieres.

— ¡Genial! Entonces nos iremos por la tarde?

— A dónde?

Billy rodó los ojos:— Al cine, Clark. Una película se acaba de estrenar y sería bueno ir a verla.

— Oh si, si en la tarde — le sonrió y el menor lo miró extrañado.

— ¿Pasa algo?

— No, nada. Todo esta bien.

Billy asintió sonriéndole pero aún tenia duda así que siguió comiendo de su cereal gustosamente.










— Tawny, llegaremos un poco tarde a casa, así que eres el guardián el día de hoy — sonrió el menor acariciando lo mientras el felino le ronroneaba —. Te deje comida a un lado de mi cama, de acuerdo? — lo cargo para darle un beso y lo dejo de nuevo en el suelo.

Superzam: DaddyDonde viven las historias. Descúbrelo ahora