Superzam: Daddy

D O C E

Billy y Courtney pegaban algunas que otras hojas para simular que su maqueta era un pequeño parque, donde claramente era el pasto.

— Les ganaremos a todos, niño Maravilla — sonrió la rubia —. Y no lo digo por decir, pero nuestra maqueta será la ganadora.

— ¿Tú crees? — preguntó el ojiazul sonriendo —. Estaría excelente porque necesito esos dos puntos — carraspeó riendo.

— Oh cierto, en el examen sacaste un seis — bufo —. Deberías aplicarte y no dejar que Superman te saque seguido de la escuela.

— Sólo fueron dos veces — contestó mordiendo su labio —. Necesitaba ayuda.

— Y cómo que clase de ayuda necesitaría el hombre de acero de ti? Um? — lo miró riendo.

— P-Pues ya sabes...— pego la última hoja de árbol —. A veces héroes como él necesitan ayuda de personas como yo.

— De acuerdo — lo miró extrañada pero asintió —. Quien fueras tú Batson. Pero aún así perdiste algunos apuntes. Hasta la profesora Mooney lo dijo.

— De dos días — bufo.

— Pero con eso tuviste para tener un seis — le sacó la lengua.

— Pero está maqueta me dará dos puntos — le sacó la lengua también.

Ambos se fulminaron con la mirada, hasta que la risa pudo con ambos y comenzaron a reírse.

— Eres un bobo Billy.

— Soy alguien listo y gracioso — agregó sonriendo victorioso —. Hasta podría que estés enamorada de mí secretamente.

La rubia no dijo nada y sólo negó frenéticamente, teniendo un ligero rubor en las mejillas.

— C-Cómo crees Batson — rodó los ojos mientras seguía armando las pequeñas moléculas de agua —. Eres feo.

— Si claro — se arregló el cabello —. Soy lindo y se como conquistar a la gente.

— Si ajá.

— Enserio! Soy alguien...sexy por naturaleza.

— C-Claro — Courtney miró a otro lado.

Billy la miró extrañado pero se encogió de hombros mientras seguía pintando aquellas moléculas.

— Esto no se pega bien — murmuro la chica haciendo que el ojiazul lo mirara.

Billy vio la acción que hacía la rubia, el intentar pegar y meter la molécula con el palo para quedar estático, le hizo tragar saliva en seco.

Pensar en eso era...como pensar lo qué pasa con Clark y con él.

— Sucede algo Billy? — preguntó Whitmore viéndolo —. Pareces que te comió la lengua el gato — y comenzó a reír.

— N-No — carraspeó riendo nervioso —. Estoy bien.

Clark miraba el reloj que estaba en su oficina, tenía que leer algunos papeles para entregarlos y de paso ayudar a Lois Lane.

3:46 pm. A esta hora se suponía que Billy estaría en casa con aquella chica de nombre Courtney.

Se decía a él mismo que no debería escuchar la conversación que tenía el menor con la jovencita pero no podía.

Y sólo escuchaba la platica sobre clases, que deberían pintar ahora y algunas risas.

Al menos todo iba bien hasta que llegó la señorita Lane.

— Clark qué haces? — preguntó poniendo algunos papeles en su escritorio sobresaltando al mayor.