Capítulo Extra #4

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“Diarios”

— Querido diario —Leyó Jungkook — estoy muy nervioso porque mañana será el gran día, me he preparado física y mentalmente para ser capaz de tomar este empleo pero no sé si podré convertir a Park Jimin en un gran artista, además sigo molesto, ya que por su culpa todos me molestaron en la escuela... En realidad no tiene la culpa pero a veces desearía que...

—Wow aguarda Jungkook —Dijo Jimin mirando a Baeyong que sonreía mientras bebía su jugo en caja— no quiero que nuestro hijo escuché eso.

—¿Por qué no? Él debe saber que fue difícil para ambos la vida.

—Tiene cinco años... No lo va a entender.

Jungkook miró al niño que esperaba a que siguieran contando la historia, éste rió un poco y siguió leyendo.

—Hoy fui a la entrevista, estuve muy nervioso pero valió la pena, me presenté ante la madre de Jimin y por supuesto que él se encontraba, debo admitir que su sonrisa es... —Jungkook miró al rubio que esperaba a que terminara la oración — tienes razón, nuestro hijo no puede escuchar esto.

—¡Jungkook! Anda termina, a Baeyong le gustará escuchar eso, ¿No es cierto? —Lo cargó poniéndolo en su regazo mientras el niño asentía.

—Tu sabes perfectamente como termina esa oración.

—Si, pero no me canso de escucharlo —sonreía emocionado mientras Jungkook reía un poco.

—Debo de admitir que su sonrisa es muy hermosa, desde que entré por esa puerta me di cuenta de muchas cosas, no sé lo que haré, ese no era el plan, supongo que deberé trabajar mucho para convertir a Jimin en el mejor artista que Corea haya visto.

Jimin sonrió al mismo tiempo que rió al escuchar a Baeyong aplaudir emocionado.

—¡Yei! —Dijo Jungkook siguiéndole el juego— ¿Te gusta la historia de papá?

—¡Si!

—Entonces también te encantará la historia de papi ¿Cierto Jimin? —Dijo el castaño mirando a Jimin sorprenderse.

—Oh claro, dejame ver —Le entregó al niño para buscar su diario.

Jimin buscó entre sus cosas sacando aquel cuaderno que una vez Jungkook tomó con sus propias manos la primera vez que viajaron a Japón. Si lo hubiera abierto se hubiera dado cuenta de los verdaderos sentimientos que Jimin sentía por él pero hubiera sido una historia completamente diferente.

—Aquí está —sonrió al mismo tiempo que se sentaba — ¿Crees que sea buena idea?

—Baeyong dice que si —Jungkook miró al niño que asentía — y yo también estoy de acuerdo, anda lee.

Jimin rió un poco nervioso abriendo el cuaderno mirando su letra, las fechas, eso lo hizo sonreír, sintió algo cálido recorrer su cuerpo, había olvidado como se escondió y ahora era libre de expresar sus sentimientos.

—Querido diario... He comprado este cuaderno para usarlo como un diario, me siento tonto al hacerlo ya que nunca antes lo había hecho pero aquí intentaré plasmar todos los sentimientos, emociones, disgustos que no puedo decir en voz alta y será una gran forma de desahogarme.

—Oh Jimin —susurró Jungkook a lo que el rubio siguió leyendo.

—Contraté a un mánager hace un par de semanas, mi madre creyó que era buena idea y la verdad no veo la diferencia, no sé que hace un mánager, ni siquiera me interesa lo que haga, solo quiero comenzar a trabajar pero pondré mis esperanzas en ese chico, Jungkook... No recuerdo su apellido, no creo que sea importante de memorizar, de todas formas no es como si estaré el resto de mi vida con él.

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