Capítulo 33

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Advertencia: tema sensible.

"Pude ser yo"

El lunes 09 de septiembre, Jimin se encontraba en su casa, luego de haber sacado su canción y mirar diferentes programas y leer los comentarios de sus fanáticos al respecto, decidió dejar a un lado todo eso y concentrarse más en mentalizarse cosas buenas, quería dejar la preocupación a un lado, no quería que todo esto volviera a afectarle ya que como siempre habrían buenos y malos comentarios.

El teléfono sonó de repente haciendo que se alejara de la ventana para responder, por un momento creyó que era Jungkook pero no fue así.

— ¡JIMIN! —Escuchó aquel grito de preocupación.

—¿Seulgi? ¿Qué sucede? ¿Estás bien?

—No, no lo estoy.

—Te escuchas mal, ¿Qué pasa?

—M-Mi papá y mi mamá se enteraron de algo.

—¿Ya saben que tú...?

—No —Tragó saliva sintiendo el nudo en la garganta — desearía que fuera eso pero no lo es.

—¡Habla Seulgi! Estoy muy preocupado.

—Jimin, Yeri le dijo a mis padres que nos vamos a casar.

—¿Qué? —susurró— p-pero... No puede ser posible.

—Ellos están muy alegres, no pude decirles la verdad, ellos son mi todo Jimin, no quiero defraudarlos, soy su única hija ¿Entiendes? Esto es lo que me preocupaba, lo lamento tanto.

—No, no cariño no llores... Haremos algo para arreglar este problema, hablaremos con tus padres, debes ser fuerte y poder enfrentarte a ellos, se que no soy el indicado para decirte eso pero la verdad es que no se que decir.

—Voy a estar bien, en verdad agradezco que te preocupes por mi pero... Debiste ver sus rostros, todos te halagaban, sentía que por fin hice algo bien, me hizo sentir feliz a pesar que era una mentira, no quiero arruinarles la vida diciéndoles mi verdad, no quiero que dejen de sonreír por mi culpa, soy su única hija y siento que voy a decepcionarlos —El llanto de Seulgi era simplemente algo no fácil de escuchar, ella lloraba de una manera en que te arrancaban el alma.

—Seulgi escuchame —Jimin podía sentir el nudo en la garganta— no estás decepcionando a nadie, no quiero que piense eso, tu eres la chica más hermosa que mis ojos hayan visto, eres divertida, amable, el hecho que te gusten las chicas no significa que eso va a cambiar, si tus padres te aman, si ven a la hermosa persona que yo veo, no van a sentirse decepcionados, no deberían dejar de quererte menos —Una lágrima cayó de repente, a Jimin le dolía decir esto ya que eso significaba ¿Qué sus padres no lo querían?

—Gracias Jimin... Muchas gracias.

—Vas a estar bien Seulgi, puedo asegurartelo.

—Todos vamos a estar bien, Jimin —Dijo de repente haciendo que Jimin suspirara— ¿Me lo prometes?

—Una promesa es difícil de romper, se supone que nunca debemos de hacerlo si no estamos seguros pero lo prometo Seulgi, haremos lo posible para que todos estemos bien.

Luego de esa preocupante llamada, Jimin no sabía que hacer, todo le daba vueltas, necesitaba un cigarro, eso calmaría su ansiedad así que se puso de pie y fue por una caja de ellos que tenía guardada en su mesa de noche, al tomarlo al igual que su encendedor decidió salir al balcón para que el humo y el olor se esparciera en el viento, al sacar la flama y ver aquel delgado cigarrillo en sus manos pensó en Jungkook, en sus amigos incluso en su psicólogo, ¿Por qué debería de hacer esto? Habían otros métodos para quitar la ansiedad, debía distraerse así que dejó caer los cigarrillos al suelo junto con el encendedor y salir corriendo.

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