Capitulo 1.

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Es curioso como vuela el tiempo, apenas si uno nace el padre espera a que este diga unas palabras, Honestamente eso es en cualquier cultura, religión y región. Lamentablemente cuando más vuela el tiempo deseas que el día se igual al anterior y que las cosas nunca cambien.

Un día normal, las calles apenas vacías, el reloj marcaba apenas las 8:00 am, y las voces en una pequeña calle se estaban subiendo de tono.

- Hija pero no es necesario, mira aún puedes ayudar en la panadería, no es necesario empacar, solo deja eso y... -

- No mamá, ya dejé el depósito y creo que es momento... - suspiro cerrando la maleta.

- Marinette, relajemonos y siéntate... -

- Mamá... Porfavor, vendré a visitarlos, lo prometo - sonrió la pequeña bajando las escaleras con su madre casi queriendo tomarla a fuerza.

Los pasos de la azabache dieron al último piso, el padre iba entrando, al parecer querían obstruir el paso a cualquier costa y por el rostro del señor se podía notar que llevaba rato que estaba escuchando todo lo que habían hablado desde que se empezaron a empacar las maletas.

- Marinette al menos escucha a tu madre, es una decisión tonta... -

- Papá... Porfavor ya habíamos hablado de esto, no quiero tocar el tema dos veces, se qué tal vez mis problemas de torpeza sean igual, pero sé que estoy segura de que puedo vivir sola, prometo venir, lo prometo - los miro sonriendo.

- Hija yo... Es que ... -

- Mamá... - corrió a abrazarla - estaré a salvó, lo juro, marcare todas las noches si es necesario, pero Porfavor... Confíen en mí - sonrió mirándola de forma dulce.

- ¡Marinette! no seas tonta Porfavor... -

- ¡Tom!, No es motivo para alzar la voz - repuso la madre viendo los ojos cristalinos de su hija - Mi pequeña bebé, yo... No podré evitar esto, es lo más seguro... Está bien, siempre y cuando me tengas alerta de todo -

- Lo prometo mami, siempre lo haré - repuso empezando a llorar

No quedo opción, el padre solo se unió al abrazo soltando algunas lágrimas. Si, un día eres la responsabilidad de tus padres y otro ya no lo eres, pero lo más seguro es que ellos no te quieran soltar.

Pero por ende...
Habrá otros muchos que quieran soltar a sus padres aunque ellos no esten.

En otro lado la misma hora el avión aterrizaba, un joven aún en la estancia esperaba que le regresarán una maleta extraviada, no era lo más usual y menos contando que la seguridad es de primera.

- Ya te dije que mejor salgamos de este lugar, tonta aerolínea, no sabe cómo cortar un queso, todo lo a batido, te dije que tomarámos primera clase -

- Plagg, Porfavor cállate, nadie puede escucharnos, además el tonto eres tú, te he dicho mil veces que esa cosa apestosa se desace cuando se está mucho tiempo apretada -

- No generalices, además el que usa las camisas casi a asfixiarse eres tú -

Una ligera risa y solo se dejó acomodar en la estancia para esperar noticias, al menos algo bueno.
Pero es normal, tanto tiempo lejos del lugar donde nació, tantos años.

¿Que habrá Sido de sus amigos?, Puede que ya algunos estén casados o quizás en planes de hacerlo, o simplemente acaben de resibirse de alguna profesión.
¿Se acordarán de él?, Tal vez ya no, si tan solo hubiese tenido el valor para despedirse de todos antes que Nathalie se lo llevará lejos, pero era mejor que llorar eternidades al pensar que posiblemente era la única vez que los volvería a ver.
¿Lo creerán cobarde por ello?, Lo más posible. ¿Quién en su sano juicio escapa en estos modos?, Tal vez se haya convertido en un vago recuerdo para todos, incluso para la industria.

- Mi moda no te interesa, ahora acaba de comer antes que el guardia venga y te vea - repuso rápidamente al notar la mirada de su compañero

- No se porque tanto drama por una maleta, acabas de heredar la agencia de tu padre, puedes... -

- Plagg, ya lo hemos dicho, ese señor nunca fue mi padre, nadie podía tener el corazón tan podrido como para hacer cosas tan crueles, además en esa maleta dejé los papeles que Nathalie me dejó, no puedo ir ni siquiera a la mansión si no muestro eso a los socios de Gabriel...-

- Adrien... Sé que sigues herido, pero eso no resolverá nada, culpar a otros por cosas sin importancia... Además no veo porque mostrar esas cosas si es claro que eres el único heredero...-

- Cállate... ¿No era importante?, Ese día casi mata a Ladybug, ese día dijo todo, siempre fue más su tonto deseo sobre mi, lo único que dijo fue que todo ... Lo otro es mero requisito que debo cumplir por ley. -

- ¿Por ley?, La ley siempre a estado de nuestro lado, incluso en casos tan malos como estos, no veo el porque pelear por estas cosas -

- ¿La ley siempre a estado de nuestro lado?, Eso no dijeron cuando Gabriel murió, hasta tuvo honores militares siendo un... Un... - apretó sus manos furioso tratando de no llorar

- Adrien calma... Las cosas ya pasaron y dudo que algo así vuelva a suceder -

- Plagg... Tu has visto las noticias, si él ya no existe... -

- Y aún así todo es un caos... Ya lo de pero nada de eso pasaría si tú...-

- ¿Si yo que? - lo miro algo irritado - Ya sabes cómo han pasado las cosas, no podía oponerme o tal vez hasta mi lady habría Sido inculpada -

- Hay cosas que nunca tienen fin... y otras que nunca podrán cambiarse...- repuso rápidamente el pequeño escondiendose al ver al guardia.

Tal vez exista algo de cierto en eso, solo tal vez, pero cuando algo se aprende muy bien nunca se olvida.

Siete Años DespuésDonde viven las historias. Descúbrelo ahora