No más Shancai | Jardín de Meteoros

Bartender #19

— Sei, nena. Shancai me envió un mensaje, pensé que podíamos salir tu, ella y yo juntos ¿esta tarde?

Suspire pesado y mire a ShiShin.

— Hoy tengo que ir a ver como va la construcción del Fleur hasta pasado de las 16:00. Podemos encontrarnos.

ShiShin sonrió inmensamente y beso mi cabeza. Murmuró un pequeño "Gracias" y continuó poniéndose ropa. Nos habíamos levantado algo tarde y según mi intuición la señora Yu opto por no llamar a la puerta de Si. 

Yo busque entre la ropa de Si y logre encontrar unos pantalones cortos y su camisa más pequeña, los zapatos eran los mismos. Arregle lo más que pude mi cabello y luego salimos para tomar el desayuno, Si me contaba como era cada parte de la casa e incluso me contaba algunas anécdotas pequeñas sobre su infancia.

— Buenos días, señora Yu. — Dijimos ShiShin y yo a la vez.

— Buenos días niños. Espero que hallan dormido bien.

Comimos entre risas y luego me marche para cambiarme en mi departamento. Llegue rápido, me quite la ropa de Si y la guarde entre mis cajones, luego me cambie por mi ropa de todos los días y baje a por mi auto para ir al Fleur. 

El bar estaría en uno de los edificios más altos de Shanghai, conformaría exactamente en el ultimo piso y la terraza, era un proyecto millonario financiado por Zen Industries, que poco a poco iré devolviendo el dinero hasta que sea mio, financieramente hablando.

Entre al edifico y subí por el ascensor al primer piso del bar, los trabajadores japoneses estaban ocupados pegando cerámica y porcelanato, básicamente este piso seria la pista de baile, acompañada de mesas y sus sillas y obviamente la barra, decorado en colores negros y blancos, detrás de la barra hay una habitación para reuniones en caso de necesitarlas y a la vez una habitación para clientes más exigentes y especiales.

En eso, el gerente de obra, un japones a cargo de la construcción y que también trabaja para la empresa, me abordo contándome sobre los significativos avances en la construcción.

— Le tengo un problema señorita. — Me dice el llamando al elevador de servicio.

— ¿Cual es, señor Yoshimura? — Le pregunto preocupada. Nos subimos y presiona el numero de la terraza.

— Ya lo vera...

Llegamos y veo la figura que menos me esperaba ver, mi egocéntrica e inútil hermana mayor. Mire al señor Yoshimura, el solo agacho la mirada. Suspire y ella desvió su atención del celular y me miro.

— Seina, hermana, ¿qué tal? — Me pregunta acercándose a saludar.

— Bastante bien, Reiko, ¿qué haces aquí? 

— Padre me envió a ver la construcción de tu... barsucho de mala muerte — Dijo haciéndome una cara de asco.

Yo le intente dar mi mejor sonrisa y ser lo más gentil posible. — Ya veo... ¿qué te parece?

— Si quieres mi opinión, pues, deberías darle un toque más extravagante, más colorido no eso todo aburrido en colores blancos y negros, ponle más neón y luces fuertes, pero ya te dije es solo mi opinión... oh, nos vemos tengo que ir a una reunión con mis amigos. — Me dice acelerada y viendo su celular, luego llama al ascensor.

— ¿Donde te estas quedando?

— En este hotel, au revoir.

Oh, si. Justo ahora estoy muy enfadada. Papá hizo un movimiento sin consultar y en toda mi vida he aprendido que si ese hombre hace algo apresurado es porque algo sucederá.

Me despeje la cabeza y el señor Yoshimura me pregunto sobre algunos datos de ubicaciones y otras cosas, llegamos hasta el borde de la piscina infinite que se estaba construyendo. La terraza tiene un motivo más de chill que de el concepto de bar como tal, con grandes sillones y una pequeña barra de tragos junto a una pequeña cocina en caso de que los clientes soliciten algo sencillo para comer.

Quede contenta con el progreso de la construcción y en caso de que no tengamos atrasos ni contratiempos podría estar abriendo en alrededor de 4 meses. Un buen tiempo. 

No lo pensé más y baje hasta el estacionamiento para conducir mi auto hasta donde Si dijo que los reencuentro.