Capitulo III

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Narrado por Clara

El dragón me dejo sola, ya no hacia tanto frio, comencé a ver la habitación en la que estaba. Estaba todo decorado en tonos azules, negros y blancos. Lo que más llamo mi atención fue un gran sofá y un estante con muchos libros, me acerque a ellos y comencé a hojear algunos libros, al parecer trataban de una época mucho antes de que mi padre gobernara como de unos 100 años atrás. Estaba concentrada leyendo, aun tenía  frio y mi ropa seguía toda mojada aunque no me importaba mucho, estaba concentrada leyendo ya que jamás había leído un libro tan antiguo…

-¿Qué haces? Me pregunto una voz como la de un anciano, me sorprendí mucho y solté el libro de golpe dándome media vuelta, era un dragón pero no era el que me había traído aquí sino uno mucho más pequeño, de color amarillo y tenía unos alargados bigotes aunque lo que más me sorprendía es que sabía hablar y no como el otro dragón que no movió la boca y sus pensamientos parecían entrar directamente en mi cabeza, podía escuchar claramente sus palabras que resonaban por toda la habitación.

-¿Puedes hablar? Le pregunte nerviosa mientras recogía el libro y lo colocaba torpemente en el estante sin apartar la mirada del dragón.

-Sí, soy unos de los pocos dragones que pueden comunicarse con los humanos y ¿Qué hacías con tus sucias manos sobre uno de mis libros? Dijo el dragón acercándose a mi, yo inconscientemente dio unos pasos atrás.-No tengas miedo, ni se porque ese estúpido de Brane te trajo, no pareces una chica muy inteligente. Dijo el dragón acomodando  los libros que yo había desordenado.

El dragón tenía en una de sus garras una tela de color anaranjado y blanco ¿Qué era? Yo estaba muy nerviosa, ¿Qué quería ese dragón llamado Brane de mi? Estaba muy tensa.

-¿Qué es eso? Le pregunte, el vio la tela como si se hubiera olvidado de que estaba ahí y me la ofreció.

- Ropa de humanos, si sigues con esa ropa toda mojada te enfermaras y yo no quiero llenarme de gérmenes humanos.

No le respondí solo la tome y la comencé a observar, era un pantalón, una sencilla camisa blanca, una botas y una especia de vestido muy corto y sin mangas, realmente parecía ropa de hombre. No le di mucha importancia y como vi que el dragón estaba revisando algo en el estante y no parecía tener intenciones de salir me cambie rápidamente. La ropa se sentía ligera y de algún modo ya no tenía tanto frio y mi cabello comenzaba a secarse, me acerque al dragón, tenía muchas preguntas  y tal vez él las podría responder.

-¿Cómo te llamas? Le pregunte tratando de hacer conversación, si quería que me respondiera necesitaba ganarme un poco su confianza, podía notar que este dragón era un poco odioso.

-Blas. Dijo sin ni siquiera mirarme, parecía estar leyendo un libro ¿Es que acaso los dragones sabían leer?

-Que interesante nombre, me recuerda a mi abuelo… Dije con una sonrisa, eso era una gran mentira ya que solo conocí a uno de mis abuelos, se llamaba Gregorio y era muy infantil, totalmente diferente a el dragón Blas pero tenía que hacer algo para llegar a las verdaderas preguntas.

-Chica puedo notar que quieres algo, así que deja de darle vueltas al asunto y habla. Dijo Blas aun con su mirada en el libro.

-¿Por qué me trajeron aquí? ¿Ese dragón Brane puede también hablar con los humanos? ¿Qué es este castillo? ¿De quién este castillo? ¿Hay más humanos aquí? Quiero ir de vuelta a mi casa. Dije soltándolo todo, esto último sonó como si fuera una orden aunque no quería que sonara de esa manera, el dragón guardo el libro y me miro desinteresadamente.

- No sé porque te trajo aquí, solo me ordeno llevarte esa ropa y enseñarte el castillo, no puede hablar con los humanos, solo yo y otros 5 dragones podemos, en este castillo nos refugiamos varios dragones, le pertenece a Brane que es el dragón azul que te trajo y no hay más humanos. Dijo mientras caminaba hacia la puerta.- Me molestan las chiquillas preguntonas así que evita hablar o preguntarme cualquier otra cosa y vamos, tendré que enseñarte el castillo. Dijo mientras abría la puerta yo me quede pensándolo un momento pero luego salí de esa extraña sala con ese odioso dragón a mi lado.

Narrado por Dimitri.

Esa chica se acercaba corriendo hacia mí, por impulso baje de mi caballo cuando llego hacia donde estaba respiraba agitadamente de tanto correr, cuando se calmó comenzó hablar.

-Quiero ir contigo a buscar a Clara. Dijo mirándome seria.

-No, es peligroso. Dije, su expresión era muy linda, esta chica me estaba volviendo loco, me gustaba demasiado y no la pondría en peligro.

-Pero yo quiero ver que Clara este bien… Dijo con los ojos llorosos.

-Si vas probablemente mueras, pero podrías hacer algo por. Dije sin pensarlo y con una enorme sonrisa en mi rostro.

-¿Qué? Dijo entusiasmada.

-Cierra los ojos. Le dije, ella lo hizo y mi corazón comenzó a latir con fuerza tan solo al imaginarme lo que pensaba hacer, la quería besar y si iba a morir al meno me iría con un lindo recuerdo.

Sin pensarlo dos veces tome su barbilla y me acerque rápidamente a ella depositando en sus labios un tierno beso. Me separé rápidamente de ella y me monte de un salto en mi caballo, mi cara estaba toda roja y mi corazón latía muy rápido, no quería que ella me viera así por alguna razón, era la primera vez en toda mi vida que me sentía así por una chica y eso me estaba volviendo loco.

Comencé a trotar despacio alejándome de allí y voltee mi rostro para verla de nuevo, estaba con los ojos muy abiertos, tenía una mano en sus labios y estaba tan roja como un tomate. Estaba a punto de arrepentirme e ir con ella, pero no podía hacerle eso al rey, así que comencé a correr alejándome de ahí.

Espero que les haya gustado:D 

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⏰ Última actualización: Sep 13, 2012 ⏰

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