psicólogo 》vhope

twelve

HoSeok les tomó brevemente los datos a los presentes, y anotó mentalmente el orden:
BaekHyun y ChanYeol, sus padres. JiMin y YoonGi, sus mejores amigos. Y por último, MinHo, novio de TaeHyung.

A pesar de que todos los presentes reconocían a MinHo como el novio de TaeHyung, parecían tratarlo básicamente como si no existiera; así que HoSeok debería averiguar si la familia sabía algo.

— Muy bien, antes de empezar quiero decirles que no deben pelearse entre ustedes, ni mucho menos echar la culpa en nadie. Recuerden que están aquí para ayudar a TaeHyung.— una vez que todos se pusieron de acuerdo, comenzó a hablar.— Para los amigos de TaeHyung, ¿sus padres son la influencia que debe tener un adolescente?

La pregunta descolocó a los jóvenes, quienes miraron un poco en pánico a dichos padres.
Hasta que por fin el pequeño castaño, -ahora calificado como JiMin- decidió hablar.

— Conozco a los padres de Tae desde que tengo diez años, parte de mi vida las pasé con ellos también... Creo que son unas personas muy dedicadas a la salud y bienestar de su hijo, incluso si cometen errores como todos. Creo que ambos son la influencia perfecta para Tae.

HoSeok asintió tomando una pequeña nota en su libreta.
Dirigió su mirada alrededor notando lo tensos que se encontraban.

— ¿TaeHyung sufrió algún evento traumático? Ya sea una pérdida, una mala experiencia...

— Supongo que eso lo debería responder Tae, ¿no?—  JiMin dirigió su mirada hacia su amigo.

TaeHyung divagó un momento, hasta que finalmente negó con la cabeza.

— ¿TaeHyung tuvo... Algún vínculo tóxico?— observó como TaeHyung se tensaba nuevamente— Me refiero a amigos, parejas, familia... Cualquier tipo de vínculo que pudiera afectar a su comportamiento.

Todos en la sala guardaron silencio, esperando quizás que sea TaeHyung quien hablara.

— Bueno, supongo que eso es un no.—  HoSeok habló tras el silencio de varios minutos que se produjo. Algo decepcionado, volvió a anotar en su libreta. Pretendía que alguien hablara específicamente de aquel chico que estaba sentado sin hacer ni decir nada.

— Vamos Tae, quizás haya alguien en tu vida que haya sido tóxico y tú no te diste cuenta.—  el pálido pelinegro habló, para la suerte de HoSeok, tras haberse mantenido en silencio todo el tiempo— Quizás haya alguien ahí en tu vida o en tus recuerdos que te haya marcado y tú aún no lo sabes.

— Lo hubiese sabido YoonGi, es absurdo.— TaeHyung le respondió sin mirarlo.

El pelinegro chasqueó la lengua, ignorando aquel comportamiento.
 

Las preguntas continuaron su rumbo, y llegado el fin de la sesión, HoSeok había podido destacar en su libreta que:

Él y JiMin eran amigos de la infancia.
Se separaron un tiempo cuando JiMin consiguió pareja, pero luego volvieron a unirse y a llevarse bien entre los tres.
Que TaeHyung siente mucha admiración por su padre BaekHyun y que le molesta cuando ChanYeol no llega a casa a horario y hace que BaekHyun se preocupe esperándolo.
También supo que TaeHyung ama mucho a su abuela, pero que desde el diagnóstico de la anorexia no ha podido verla mucho, y por eso la extraña.

Pero no supo nada de MinHo. El chico apenas respondió la cantidad de tiempo que llevaban juntos, pero nada más.
Ni siquiera se veía preocupado por la situación de TaeHyung, no habló con él ni le dijo ninguna palabra de aliento cuando se fue.

Al retirarse todos los presentes excepto TaeHyung, HoSeok llevó sus dedos al puente de su nariz, inhalando profundo para serenarse.
TaeHyung estaba dándole la espalda, y odiándolo probablemente.

Se acercó con cuidado, acariciando sus hombros por detrás.

La respiración pesada de TaeHyung le hacía ver que estaba luchando contra sí mismo.

— Eres un canalla.— habló por fin— Te conté lo que me sucedía sólo porque quería ser sincero contigo. Y tú te aprovechaste.

— ¿Aprovecharme? Yo sólo estoy siguiendo el protocolo de terapia, a estas alturas era necesario una sesión en grupo. Sólo le pedí a tus padres que vinieran las personas más cercanas a ti.

— ¿Te crees que soy idiota?— dijo dándose vuelta y clavando sus ojos enfurecidos en HoSeok— Seguramente, si no te lo contaba, ni siquiera te habrías esforzado en traerlos aquí. Tú lo que querías era ver a MinHo y hacerlo quedar mal parado.

TaeHyung habló como si estuviese dolido, por lo que HoSeok no pudo seguir haciéndose el duro.

— No te voy a mentir. En verdad quería ver quien era ese sin escrúpulos de quien me hablabas. Pero en parte es necesario esto, recuerda TaeHyung que estoy aquí para ayudarte principalmente.

El nombrado se paró, quedando a la altura de su psicólogo.

— ¿Quieres ayudarme realmente?

— ¿Ahora ya no me tratas de usted? Por supuesto que quiero ayudarte TaeHyung.

— Conozco una terapia mucho mejor que esa, doctor Jung.

Apenas dicha aquella frase, capturó los labios de HoSeok, impulsándose hacia adelante.
El mayor tuvo que sostenerse del escritorio para no perder el equilibrio mientras devoraba la boca del otro.

Las manos traviesas del menor paseaban por su pecho y su cuello, dando leves caricias que le recordaban a ambos las veces que sus cuerpos se conectaron con el otro.
Pero lamentablemente, ambos sabían que ese no era el lugar ni el momento apropiado para satisfacer sus deseos.

Se separaron jadeantes, sus labios hinchados y rojos, compartiendo una sonrisa de picardía.

—  HoSeok, no me importa lo que hagas como psicólogo. Necesito seguir viéndote, seguir estando contigo; sólo de esa manera me siento bien. Puedo decirte que... S-soy... Soy tuyo, HoSeok.— el mayor tomó las manos de TaeHyung y las besó con cariño, luego besó sus labios y le sonrió.

—  No TaeHyung, tú no me perteneces. Tú no eres de nadie más que de ti. Te perteneces a ti, y a la naturaleza, al arte de tu existencia. A lo que te haga feliz.

— Eres tú quien me hace feliz.