Capítulo 1: Fiesta

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Ya pasó un mes y medio desde el ataque de los Mandamientos y que Elaine enloqueciese y Liones vivía meses de paz sin recibir ataques de demonios. Jericho era feliz con su novio Ban, el Pecado de la Codicia y con su hermana Killian.

Un día, a las afueras de la capital, el capitán de los Siete Pecados estaba con todo su grupo en su taberna Sombrero del Jabalí de celebrando la unión de Ban con Jericho.

-Un brindis por Ban que ahora es feliz-dijo Meliodas.

-No brindemos más que me da vergüenza-titubeó Jericho sonrojándose.

-Oh vamos, ¿no te hace ilusión brindar con mis compañeros?-preguntó Ban.

Diane jugaba con Killian mientras Merlin le enseñaba varios trucos de magia, dejando a la niña alucinando.

-Se lo está pasando en grande,¿eh?

-Que envidia Ban-sama-dijo Elizabeth-Tienes una hermana muy linda.

Jeje, gracias princesa-rió Ban mientras terminaba de preparar la comida.

-Oye, esta noche hay una fiesta en el castillo y mi padre os ha invitado a todos-intervino Elizabeth cambiando de tema.

-¿Se celebra algo especial?-preguntó King.

-Margaret se casa con Gilthunder en un par de días-respondió la princesa-Y mi padre quiere celebrar una fiesta antes de la boda.

-¿Qué Gilthunder se casa?-preguntó Jericho asombrada-No sabía nada.

-Porque querían mantenerlo en secreto-respondió Elizabeth-Solo lo sabíamos nosotros, Howzer-san y Griamore-san tampoco lo saben.

-¿Vas a ir a la fiesta, Jericho-chan?-preguntó Diane con una sonrisa.

-Pues claro-respondió ella-Así les doy mi enhorabuena...

-Y presentas a Ban como tu novio-intervino Merlin.

-¿Có...como lo sabes?-preguntó Jericho asombrada.

Todos miraron a Gowther, quién se disculpó por meterse en la mente de la caballero, pero Merlin lo sabía sin depender de Gowther. Jericho se fue de allí avergonzada y Ban fue tras ella.

-Jericho, perdónales.

Killian salió de la taberna y le preguntó lo que pasaba.

-Jericho-nee,¿estás bien?

-Si-respondió Jericho-Solo me he agobiado un poco ahí dentro.

-Bueno Jericho, nos veremos esta noche,¿no?-dijo Ban.

-Si, me pondré mona y nos veremos allí.

-Jericho-nee-balbuceó Killian-Yo no tengo vestido de fiesta.

-No te preocupes Killian-dijo Jericho-Te compraré uno para esta noche.

-¿Tú no vienes Ban-nii?-preguntó Killian.

-No, no, tened un rato para vosotras.

Killian abrazó a sus hermanos y cogió a Jericho del brazo hasta la ciudad para comprarse un vestido para la fiesta de esta noche.

Cuando cayó la noche en la capital, todos acudieron al castillo para la fiesta en honor a la boda de Margaret y Gilthunder. Ellos eran el centro de atención y recibían ovaciones de todos.

-Estás guapísima, hermana-dijo Veronica.

Las tres princesas de Liones rieron y se divirtieron con su padre, los Pecados hacían sus cosas y Jericho evitaba contacto con sus compañeros para no descubrir que estaba con Ban.

-¿No te estás divirtiendo?-preguntó Guila.

-¡Guila!-exclamó Jericho-Vaya susto me has dado.

-Se me hace raro verte separada de tu novio,¿habéis discutido?

-No, para nada. Es solo que estoy un poco nerviosa para decírselo a todos.

En ese momento, Killian interrumpió su conversación para preguntar a su hermana si bailaba con ella. Ella aceptó y estuvo bailando con su hermana hasta que cambiaron a un vals ideal para parejas. Jericho no quería que la vieran bailando con Ban hasta que no estuviera segura de contarlo, pero Griamore interrumpió el baile diciendo:

-Qué faena, una de las bailarinas se ha puesto enferma y no puede hacer el show.

-¿Bailarinas?-preguntó Jericho.

-Jericho puede hacerlo-interrumpió Guila.

-¿Qué? No, no, no.

-Tonta, aprovecha y deja a Ban pasmado con tu baile.

-Pero si no he bailado en mi vida, no valgo para eso.

El rey se acercó a ella y preguntó si podía hacerle ese favor; Jericho suspiró y aceptó.

-De acuerdo, lo haré, pero solo un baile,¿de acuerdo?

El rey asintió y mandó a Jericho con el resto de bailarinas para que le enseñasen el baile, uno bastante sencillo de aprender.

Ella se avergonzó de ver lo que tenía que llevar puesto y se sonrojó.

-Vamos chica, que todos te están esperando-dijo una de las bailarinas.

Ya...ya voy-titubeó Jericho.

Se cambió rápidamente y acudió al escenario junto a las demás. Cuando empezó el espectáculo, todos se quedaron asombrados por lo bien que bailaba Jericho.

-Ban-nii-dijo Killian-Jericho-nee baila muy bien.

-Si, si, me ha dejado impresionado.

Pronto,llegó una parte donde Jericho tenía que hacer un baile en solitario y cuando miró a Ban, sonrió y terminó su parte del show.

Cuando el show terminó, todos los presentes aplaudieron y lanzaron ovaciones y silbidos a Jericho y al resto.

Bendito este amorDonde viven las historias. Descúbrelo ahora