Los Ojos De La Luna [2.2]

Capítulo 23| Inconsciencia

T A D E U S
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Como ya se me hizo costumbre no puedo pegar el ojo, estoy muy cansado, pero no puedo dormirme y estoy dando vueltas en la cama sin poder atrapar el sueño. Hypnos debe estar preparando una pesadilla para mí oh se está cobrando el que no le haga ninguna broma en su renovación de botos. Levantándome de la cama termino por salir fuera en busca de la calma del agua golpeando en la playa, ver el océano en calma siendo iluminado por la luz de la luna y meditar en completa oscuridad. La arena entre mis dedos relajo la tensión de mi cuerpo, el olor salado del mar fue como un arrullo y a medida que me acercaba más me sentía cansado. Quise volver a la casa, pero mis pies continuaban caminando hacia el mar, poco a poco fui llegando al agua y cuando mis pies tocaron la orilla no podía sentir que controlaba mi cuerpo.

—¡Tadeus! –un grito lejano llego a mis oídos, pero estaba en un estado de sueño sin poder tener un control sobre mi cuerpo –¡Tadeus despierta, POR por los dioses reacciona! – abrí mis ojos al escuchar nuevamente aquel grito y no era nada más ni nada menos que el grito de Bunnie. Mire hacia a mis costados buscándola, pero no la encontré hasta que mire al frente siguiendo una fuerte luz que sobresalía del agua.

Bunnie estaba en el agua siendo levantada por algo que no logro ver, ella tiene sus cabellos de color blanco y sus ojos al igual que sus manos brillan. Esta intentando luchar con algo que por la oscuridad no logro ver, pero de inmediato me meto al agua nadado mar adentro hasta llegar cerca de donde se encuentra. Me detengo al ver como uno de los tentáculos que sostenía a Bunnie la suelta para tirarse sobre mí. Nade hacia un costado, pero no pude esquivar el otro tentáculo que me atrapo, Bunnie grito algo que no llegue a escuchar pues el monstruo me hundió debajo de agua.

Luche con todas mis fuerzas, hasta utilice mis poderes, pero fue inútil todo mi cuerpo dejo de responderme y mis ojos pesaron que se cerraron. Caí en la inconsciencia por no sé cuanto tiempo, solo sé que al despertar estaba fuera del agua y vi a Bunnie desmayada aun siendo sostenida por el otro tentáculo. Intente llamarla, pero ella continuaba tan dormida como una pierda, hasta que al mirar al frente pude ver lo que parecía ser una enorme isla. Había antorchas en un muelle donde el monstruo nos dejó a mí y a Bunnie que continuaba desmayada, me acerque a ella levantando apenas su torso para dar suaves palmadas en sus mejillas. Comenzó a despertar estando desorientada y sin percatarse aun de que era yo me golpeo con sus poderes. Me tiro al agua por suerte pude racionar rápido y volví a subir al muelle con ayuda del agua, abrace a Bunnie por la espalda aprisionando sus brazos y le hable al oído.

— Bunnie soy yo, Tadeus – susurro contra su oído, ella deja de luchar y la suelto viéndola incorporarse y mover un poco su cabeza. Miro la isla y guardo un largo y crudo silencio, sospecho que esta no era la primera vez que veía este lugar.

— Bienvenidos – una voz femenina a nuestras espaldas nos tomó por sorpresa, apenas giramos vimos a la chica que nos había estado trayendo los mensajes de la madre de los pedidos. — Mi madre quiere que cumplan con su pedido o de lo contrario avisará para que traigan a las niñas – delante de nosotros aparecieron dos esferas, una que mostraban a Bianca durmiendo y otra que mostraban a la hermana de Bunnie.