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ha pasado más tiempo de lo que esperaba. por fin tomé valor para ir a verte.
cada día le daba una rosa, la misma hora, el mismo tiempo, el mismo sentir, la misma promesa.
no lo sé, esto es ridículo, sigo haciendo la misma cosa, se ha convertido en un hábito, sí, así es. no me importa, a ella le gusta. ella, estoy enamorado de ella.
lo recuerdo a la perfección, aquella vez que la conocí, yo vendía ropa con fred en kensington, le vendí la chaqueta del ahora vocalista, sus gustos eran un tanto diferentes, supongo que por ello le agradó a freddie. de cualquier manera, me tuvo que devolver la chaqueta, pude ver la sonrisa más bonita en sus labios carmesí. me quedé como un idiota admirándola.
—hey rubio, ¿estás bien?
diablos, sentí una pena enorme al escuchar eso, era la voz de un ángel. fred tuvo que venir porque no reaccionaba. caray marie, desde ese día sí que me tuviste. seguro que aún lo recuerdas también. fue un avance, de cierta manera, nos conocimos.
