Sucesos inesperados

Todo a la mierda

CAPITULO 15

Ya era de mañana y estaba muy ansiosa mientras me arreglaba para ir al instituto era el último día de clase y Sneik había prometido que me recogería, que podía ser más perfecto en este día, creo que ya era hora de contarle sobre mis quistes igual había estado tomando juiciosa el medicamento y el médico me había dicho que pronto desaparecerían.

Hola amor –dijo mi madre mientras entraba a mi habitación-

Hola ma –respondí mientras buscaba que aretes ponerme-

¿Vendrás a casa después del instituto? –pregunto-

No lo creo –tome unos pequeños aretes perla y empecé a acomodarlos en los primeros huecos de mi oreja-

Entonces llévate las llaves porque talvez salgamos y no sé a qué hora regresemos –me puse frente a ella y bese su mejilla-

Okay ma así será –le sonreí ampliamente y ella estiro su mano para entregarme las llaves y mi frasco de pastillas-

No olvides tomarlas Alex –asentí y tome los objetos-

No lo olvidare –salimos juntas de mi habitación y encontré la mesa desocupada con solamente mi desayuno-

¿Y tú? –la mire-

Ya desayune hija, solo faltas tú

-me acerque a la mesa y pude notar el delicioso olor a waffles con cubierta de fresas y miel, además observe un rico jugo de naranja, me abalance sobre la mesa y empecé a comer-

Tranquila Alex nadie te quitara –reí mientras le daba un gran mordisco a mis waffles-

No demore mucho desayunando y después de lavar mis dientes me fui para el instituto me recogió Diana en su coche

Alex –dijo mientras me subía al coche-

Fea –respondí mientras cerraba la puerta y me colocaba el cinturón-

Oye iremos después de clases a un antro ¿nos acompañas? –Pregunto mientras ponía en marcha el coche-

Claro, ¿puedo ir con mi novio? –me miro mientras conducía-

¿Novio? –Su tono fue de asombro más que de pregunta-

Si, novio Diana –sonreí un poco-

No me digas que volviste con ese idiota de Peter –puso su mirada en el reloj y aceleró un poco ya que se estaba haciendo tarde-

Nooo!! Para nada es un chico realmente estupendo –respondí mientras me sujetaba un poco de la puerta por la velocidad-

-asintió aliviada- que alegría o me tendría que ver obligada a mandarle a unos amigos para que le dieran su merecido

-nos reímos un poco más hasta que llegamos a la entrada, ella me dejo y se fue al estacionamiento, me dijo que nos encontraríamos después a la salida, corrí hasta mi salón y cuando llegue pude ver una nota en la puerta que decía (clase cancelada por problemas médicos del docente, no creí mucho lo que leí así que me dirigí a coordinación para verificarlo ya que había gente muy graciosa que solía hacer bromas como esas, pero era verdad, al parecer el señor Carlos se había intoxicado –

Bahh –musite para mí misma- ¿que se supone que haga ahora? –saque mi libro de Mientras llueve de la mochila y empecé a leerlo mientras caminaba buscando un buen lugar para acomodarme-

Cuidado!! –Gritaron, no alcance a voltear cuando sentí un fuerte golpe en la cabeza y ya estaba en el piso al igual que mi libro-

-me puse de pie furiosa y mire de donde había provenido el balón que me había golpeado, cuando vi aun muchacho bastante alto corriendo hacia mí-